Capítulo 97

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Esa pregunta no para de rondar por mi mente. Siento que puedo hacerlo, que puedo matar a ese cabronazo, pero un pequeño porcentaje me dice que no lo estoy, que sigo siendo un poco débil.

-Oye, ¿estás bien?- Pregunta preocupado Rubén.

-No sé si estoy preparada para matarlo.- Necesito sincerarme con él.

-Claro que puedes, te acabas de cargar a un tío que te sacaba como cinco cabezas. En ningún momento has dudado de si hacerlo o no, ¿por qué con él sería distinto?

-No lo sé.- Digo confusa.

-¿Tienes rencor hacia él?

-Mucho.- Mi voz suena tajante.- Me gustaría haberle metido un navajazo al tenerlo tan de cerca.

-Yo también.- Dice sonriendo.- Pues eso es lo que tienes que hacer cuando lo tengamos cogido por los huevos dentro de unos minutos. Hazle saber quién es ____________. Demuéstrale lo salvaje que eres y que te tenga miedo.

La música deja de sonar y el sonido de una sirena inunda la sala, para acto seguido escuchar:

-Por favor, los invitados a la subasta que se dirijan a la tercera planta. El resto de invitados que no deseen adentrarse en esta, que sigan en esta planta y disfruten del bufe libre. Muchas gracias.

Todos los invitados van subiendo tranquilamente a donde se nos ha ordenado, no puedo evitar escuchar las groserías que dicen. ¿Acaso sus esposas están contentas con esto? Yo soy una de ellas y ya hubiera intentado asesinarlos, total, ahora se compra todo con dinero.

Al llegar a la tercera planta divisamos los distintos compartimentos que llevan los nombres de los invitados, en el medio de estas se concentra un espacio redondo y grande con focos rojos, supongo que es donde colocaran a las mujeres.

-Cariño, voy al servicio. Ahora vengo.- Deposito un beso en su mejilla y me dirijo a la sala donde tienen a las mujeres.

Voy andando tranquilamente, sin prisas, estoy disfrutando cada momento que se me brinda. Noto como alguien me sigue y al girarme me encuentro con Judith, Melisa y Nora.

-¿Qué hacéis?-Pregunto confusa.

-Tenemos que cubrirte y ayudarte, como el equipo que somos.

-Chicas.- Digo mirándolas.- Venga, no tardaremos en llegar.

Al cabo de unos segundos llegamos casi a la puerta, pero me detengo al ver dos guardia, no es difícil.

-Hay dos guardias.-Informo.

-No se preocupe.- Dice Nora.

Veo como saca una pistola táctica moderna semiautomática con silenciador, y Melisa no tarda en unirse. Disparan dando en el pecho de estos y me acerco corriendo para tomarle el pulso, están muertos.

-¿Cómo coño lo habéis escondido tan bien?

-Trucos, jefa, trucos.- Dicen sonriendo ambas.

-Enseñarme para la próxima.- Veo como asienten con la cabeza.- Avisar de que se lleven estos cuerpos.

Vuelven a asentir con la cabeza. Nos levantamos todas y abrimos la puerta haciendo que todas nos miren, pero mi sorpresa es al ver quien es la jefa de sala.

-Jane.- Digo mirándola.

-______________.- Dice sonriendo.

-¿Qué haces aquí?

-Ocuparme de que estas mujeres sean subastadas al mejor postor.

-Me refiero que como has acabado aquí, tienes una buena estabilidad económica como social. No necesitas esto.- Digo encogiéndome de hombros.

Mi Tentación (Elrubius y tu HOT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora