Capítulo 32

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Caemos exhaustos en la cama después de tres rondas. Veamos el lado positivo, Rubén está loco por mí o eso me dice afirma él con seguridad, y que este sábado ha acabado muy, pero que muy bien.
-¿En qué piensas, cielo? - Su voz grave, pero relajante hace que lo mire.
-Pensaba que ha terminado bien el día, y que mañana quiero prepararle una pequeña fiesta a Judith. Ya que su vuelo sale mañana a las doce de la noche.
- ¿Pequeña fiesta?
-Sí, Mangel, ella, tú y yo.
-Suena perfecto. Si quieres mañana por la mañana aviso a Mangel para que la entretenga y así compramos las cosas, ya sabes, comida y confetti.
-¿Confetti?
-¡Claro! Para explotarlo y decir: ¡Viva gomi! - Dice entre risas el apodo que nos decimos nosotras por lo que yo comienzo a reírme.
-Vale, compraremos confetti.
-¡Bien!- Y comienza aplaudir como un niño pequeño, pero el momento se ve interrumpido porque bostezo a la manera de un león. - Uy, creo que alguien tiene sueño.
-Si...- Digo acomodándome en su pecho.-Buenas noches, grandullón.
-Buenas noches, pequeña.
Y poco a poco voy cerrando los ojos para sumergirme en un sueño agradable.
~Te quiero mucho, ____________~
Abro los ojos al oír esa frase. Pero solo me encuentro a un Rubén con el pelo revuelto y durmiendo.
~Te quiero de verdad, _________, no me dejes~.
Parece que habla en sueños y parece ser que no quiere perderme, ¿por qué siento algo extraño floreciendo dentro de mí? ¿Son las populares mariposas?

-Yo también te quiero y no te dejaré. - Le digo mientras acaricio su cabello para acto seguido dejarle un beso en la mejilla, sus brazos se aferran a mí fuertemente y siento que mi corazón late deprisa. Ay, Rubén, no me hagas daño por favor.

Mi Tentación (Elrubius y tu HOT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora