Mi Tentación (Elrubius y tu HOT)

Capítulo 43

-¿Cómo que hablar con ella? ¿De qué tienes que hablar con ella?- Le pregunto seca.

-Tengo que averiguar de donde ha sacado tus antiguos datos, ¿no crees?

-Podrías averiguarlo metiéndote en su ordenador o su móvil y mirarle los contactos, ¿no crees?- le contesto.- Para ser una persona que no está metida en lo que tú trabajas llego a saber un poco más que tú.-  Le digo con sarcasmo. 

-Voy a ir de todas maneras, porque por desgracia sé más que tú en hacer esas cosas, ¿sabes por qué? Porque es mi trabajo- dice recalcando las dos últimas palabras.

-¿Sí? No te mientas a ti mismo, he estado en casi todas las mierdas por desgracia. Y las he pasado contigo, así que no vayas de hombre sufridor que sabes perfectamente que yo a la edad de 10 años ya sabía manejar un cuchillo e incluso como clavarlo en un cuello.

-Sí, por eso le dije a tu madre de que no debería de haberte enseñado eso. Eras una cría.

-Una cría que estaba metida en los mismos líos que su madre, era normal que me enseñara hacer eso en vez de haber jugado a las muñecas.

-Estoy en contra de eso, podría criarte también con algo cercano que ha pasado cualquier niño del mundo. 

-Pues no se pudo, Tom. Pero, aquí la cosa importante no es lo del trabajo o mi asquerosa infancia. Es que no quiero verte cerca de esa mujer y punto.

-Acaso, ¿eres mi novia? ¿mi mamá? No que yo sepa, solo eres una chica que conozco por su madre que era una mujer demasiado problemática y prometí que cuidaría de su hija. 

-¿Nunca he sido algo más? ¿Cómo una amiga? ¿Sólo he sido esa cría? ¿Por eso me abandonaste en la universidad? ¿Por qué no soportabas a esa "cría"?- Siento ahora mismo un gran nudo en la garganta porque nunca me había enfrentado así con Tom y es algo que me cuesta afrontar. Veo como su mandíbula se tensa y sus ojos me miran de tal manera que me traspasa el alma.

-Me alejé porque un sentimiento estaba creciendo dentro de mí de una manera intensa. Sabía que si volvía hacer el paso que hice esa vez la cagaría del todo y nos rompería a ambos. 

FLASHBACK:

Estaba sentada afuera de la discoteca, hoy me había graduado de mi último curso del instituto y pasaría a la Universidad. Un paso que marcara mi vida, un paso al cual le tengo miedo. Estaba disfrutando de mi graduación con Judith hasta que ha aparecido mi ex y me ha fastidiado un poco la fiesta con su "voy a tocarle las narices a mi ex",  le he rogado a Judith que se quede adentro y siga con la fiesta. Le he prometido que volvería rápido que solo necesitaba un poco de aire. 

Siento unos pasos que se acercan a mí y directamente me pongo en guardia como me enseñó Tom, pero una voz rompe el silencio:

-¿Por qué has salido de la fiesta?

-Estaba el gilipollas de mi ex, al final tenías razón, Tom. Debería de escucharte de vez en cuando y ahorrarme este tipo de situaciones. 

-Oye, no pasa nada. Es bueno estrellarse solo y aprender de ese error, es cosa de la vida. Tendrás muchos novios, pero yo siempre estaré ahí y con un toque de llamada me tendrás a tu lado en cero coma. Soy tu ángel de la guarda, preciosa. 

Abre los brazos y nos fundimos en un abrazo haciendo que me siente como en casa, siempre puedo decir que "me siento como en casa" en distintos brazos, pero como los de él ninguno. Al fin y al cabo siempre me ha cuidado, puede que sintiera algo por él, pero como es imposible nunca he movido ficha. Nos separamos y su mano se dirige a mi cara para apartar un mechón de pelo, me acaricia la mejilla y siento como todo ocurre en cámara lenta. 

Nuestros ojos conectan y hay un profundo silencio, pero nuestras miradas están intercambiando todo tipo de mensajes de lo que estamos sintiendo ahora mismo. Nos acercamos poco a poco y nuestros labios están a unos centímetros, tan cerca que siento su respiración chocando con la mía:

- Te quiero, __________. Nunca lo olvides, por favor.

- Yo también te quiero y no lo olvides, porque yo no lo haré. 

Y de repente, sus labios se fusionan con los míos convirtiéndose en uno y juro por lo que más quiero que este beso es el mejor de mi vida y que este dejará una gran marca en ella. Siento como millones de sensaciones explotan en mi estómago y como mi cerebro entra en una parálisis mental. Su lengua busca a la mía y comenzamos una pequeña guerra la cual termina en que sus dientes atrapan mi labio inferior haciendo que nos separemos y suspire. Juntamos nuestras frentes y sonreímos.

FIN DEL FLASHBACK.

¿Quién iba a saber que después de ese beso se desataría un gran huracán que me rompería en mil pedazos?