Capítulo 65

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La mañana la disfruto muy bien con Rubén y no me ha preguntado nada al respecto de la pesadilla de ayer, y la verdad es que me alegro de que no lo haya preguntado porque me sentiría un poco violenta. Esto es algo que no le he contado a Rubén, sé que le conté mi vida y sobre como me salvó Tom de un tipo que venía en busca de mí por mis padres, pero lo que él no sabe igual que Tom es que vinieron una segunda vez a por mí e hicieron el mismo cometido. Por eso no dejaron esta vez ninguna marca y yo decidí no contar nada, me quedé callada y lo único que pude hacer es sentarme en el plato de la ducha y dejar que el agua intentará limpiar todo su aroma y lo que había dejado en mí. Si llegaba a contarle algo a Tom posiblemente me llevaría de nuevo a Estados Unidos y me separaría de Judith con la que ya estaba cogiendo confianza, y todos sabemos lo que significó Judith para mí desde el principio. Las palabras de ese ser siguen en mi cabeza y no paran por la noche, ese es el origen de mis pesadillas y los demás piensan que es otra cosa como la pérdida de mis padres o algo por el estilo, pero no es sobre como volví a sufrir una segunda violación y aunque intenté defenderme él ya había movido ficha con antelación.  

-Bueno, ¿y no puedo ir contigo al comité?- pregunta Rubén mientras me mira con un pucherito. 

-No, solo pueden ir los invitados y si llevo a alguien me la lían y no solo eso, sino que me mata mi jefe por mentirle. 

-Pero me voy aburrir y lo único que quería era tenerte entre mis brazos, mientras te enredo con mis piernas.- Me mira de forma coqueta y aunque deseo estar en esa tesitura con él no puedo.

-Lo siento, cariño. Te espero esta noche, ven a recogerme a donde te he dicho sobre las once y nos vamos por ahí. 

-Vale.- Dice con el ceño fruncido. 

Me río y le doy un pequeño beso en los labios, me meto en el cuarto de baño y comienzo a ponerme la lencería de encaje negra para acto seguido introducirme el vestido negro de encaje también con la espalda descubierta, me aliso el pelo y me maquillo de manera natural. Me miro y sonrío ante el resultado. Salgo y me encuentro con la mirada sorprendida de Rubén.

-Es un comité, _____________.

-Gracias, pensaba que este vestido no me quedaría bien por mi cuerpo.- Le suelto rodando los ojos.

-Perdón, pero es que estás tan guapa que temo que alguien intente tirarte caña. De verdad estas muy guapa, cielo. El negro sin ninguna duda es uno de los colores que mejor pegan contigo y tu tono de piel. Será un honor quitarte luego el vestido.

-Gracias, grandullón.

Me da un breve beso y un azote en el culo, me giro para reprocharle, pero lo único que recibo es una sonrisa inocente así que no puedo hacer nada ante esa maldita sonrisa. Me despido y me dirijo al comité.

Después de diez minutos y unas cuantas historias que me relata el conductor llegamos al comité, al salir me encuentro con un gran edificio y siento como me suda las manos por los nervios. Entro y me dan una pegatina en la cual se muestra mi nombre, le agradezco a la señorita y me adentro hacia la sala que está plagada de gente contenta dialogando tranquilamente. Doy vueltas y charlo con algunos psicólogos que me ofrecen sus contactos ya sea para charlar como para la empresa ya que se sienten interesados en ella, llevo ya como dos copas de champán y voy frenando ya el carro porque como tome otras dos más seguramente empezaré a ver cosas que no son. Nos adentramos a la sala que será la bienvenida a todos y una charla previa sobre lo que es la psicología y lo que se debe de hacer contando los distintos tipos de problemas que suceden hoy en día y las medidas como soluciones que se proponen ante esto. Es como recordar viejos tiempos, pero lo que más me sorprende es que algunas personas deben de quedarse de pie debido a que no hay sitios ya, pueden que hayan calculado mal el número de personas.

-Buenas noches, señoras y señores. Como ya sabéis nos encontramos de nuevo aquí para recordar todo el trayecto que hemos trabajado durante nuestra carrera y lo que significa para nosotros la psicología.- No puede ser verdad, el que celebra todo esto es Aleixandre Ruiz debe de manejar grandes contactos para hacer este tipo de cosas. Dejo de escucharlo para enfocarme de nuevo en sus facciones y estudiando los movimientos que hace, y estos se me hacen familiares, pero no sé en que los puedo relacionar. Necesito saber quién es, él debe de saber cosas sobre mí seguramente. De repente, escucho los aplausos del resto y comienzo a aplaudir también como si me hubiera enterado de todo, veo como todos empiezan a desalojar la sala y miro la hora. Por dios, ha pasado ya como dos horas, pero ¿cuánto tiempo he estado exhorta en mis pensamientos? 

Siento el tacto cálido de unas manos agarrando la mía para depositar en ella un beso y sé perfectamente quién es.

-Buenas noches, ____________.

-Buenas noches, Aleixandre. Me ha encantado el pequeño tour que nos ha hecho para recordar todo por lo que hemos pasado por nuestra carrera hasta llegar aquí.- Miento para que vea que he estado interesada en recordar todo, eso o pensará que soy una persona desinteresada y eso no da buena imagen de mí.

-Muchas gracias, ___________, me resulta un alago escuchar eso de ti.

-Denada, Aleixandre, yo solo cuento la verdad.

-¿Le han recibido bien?

-Con los brazos abiertos y me he sentido como en casa, le hubiera preguntado lo mismo a usted, pero es que eres el que ha organizado todo esto.- Le sonrío y veo como su sonrisa se amplia, eso puede derretir a cualquiera.

-Efectivamente, y pensé en tu empresa porque es una que empieza a igualarse con la mía y entiendo ahora porque comienza a tener tanta calidad porque lo mejor de la psicología se encuentra allí.- Me guiña un ojo y aunque por fuera sonría por dentro frunzo el ceño y pienso que está coqueteando conmigo.- ¿Le apetece luego a acompañarme a una cena con alguno de los mejores psicólogos del mundo?

-Y yo estoy invitada porque...

-Ten por seguro que yo invito a las personas a las que considero que son lo suficiente para sentarse conmigo y obviamente porque me parecen de lo mejor del mundo de la psicología.

-¿Yo le parezco eso?-pregunto sorprendida.

-Siempre suelo decir la verdad y no solo eso, es que la prensa relató como una chica recién salida de la Universidad pudo levantar una clínica en la quiebra.- Imágenes de ese día llegan a mi mente y sonrío, pero este es borrado al recordar que había quedado con Rubén.

-Muchas gracias, Aleixandre, pero tengo a alguien especial esperándome dentro de tres horas en la puerta para irnos a tomar algo.

-¿Su novio? Bueno, solo le digo que esta oportunidad no la suelo dar y que debería de pensárselo bien. Si me disculpa seguiré atendiendo a los demás, si acepta mándame un mensaje y la recogeré para irnos juntos. 

-Vale, hasta luego.

Veo como pasa por mi lado y me quedo varios minutos pensando en sí debería de ir a esa cena, puesto que podría conseguir información valiosa y aliarme con nuevos miembros, pero dejar así a Rubén no es justo. Le voy a llamar para ver lo que opina, cojo el teléfono y le marco:

-¿Deseas que vaya a por ti, cielo?- Su voz ahora es tan suave que me da cosa pedirle si podemos aplazar nuestra quedada. 

-No, verás es que me han invitado a una cena donde estarán los mejores psicólogos en esa mesa y bueno te quería preguntar si podemos disfrutar nuestra quedada mañana porque esto es una oportunidad que debo de aprovechar para sacar lo máximo para mi clínica.- El silencio en la línea es algo que me está matando y cierro los ojos para enfrentarme a los suspiros de Rubén.

-Oye, no te pongas tensa que no me voy a enfadar ni nada por el estilo. Entiendo que quieras ir porque esto es un viaje laboral no de vacaciones, solo te pido que tengas cuidado y que si ves que sales sola me avises y voy a recogerte. Yo me pasaré a por más ropa a mi hotel y hablaré con nuestros dos amigos, ve y disfruta que luego me lo recompensarás.

-¿De  verdad, cariño?- Le susurro.

-Por supuesto, cielo. Venga, disfruta. Adiós, cariño.

-Adiós, cielo.

Cuelgo y sonrío ante el tacto que ha tenido Rubén con este tema, por lo que le mando un mensaje a Aleixandre y al momento me contesta con unas caritas sonrientes como de aprobación. 


Mi Tentación (Elrubius y tu HOT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora