Bruce entro a la habitación con una bolsa de plástico transparente entre sus manos y un par de botellas de agua.
—¿Qué tanto compraste? Cuestionó la pelirroja con diversión mientras se colocaba una camisa del rizado.
—Agua... Dijo lanzando las botellas sobre la cama. Pastilla del día después, prueba de embarazo y condones. Le sonrió suave y le entrego la bolsa.
—Tienes agua aquí, ¿Por qué compraste más? Lo miro sacando las cosas de la bolsa.
—Porque creo que esa agua sabe mejor, y supuse que te gustaría más. Se encogió de hombros.
Natasha suspiro con fuerza y lo miro con una gran sonrisa en el rostro.
Dicen que los pequeños detalles hacen la diferencia, y es cierto.
—¿Sabes tomar la pastilla? No quise preguntarle a la chica de la farmacia porque me vio un poco mal en cuanto pedí los condones. Entre cerró los ojos al recordar la incomoda situación.
—Tiene instrucciones. Rió despacio y giró la caja para que el pelinegro pudiera verlas. Entiendo la compra de condones, pero, ¿Por qué una prueba de embarazo? Cuestionó algo confundida.
Bruce paso ambas manos por sus rizos y se ruborizó un poco.
—Me ganaron los nervios y cuando vi ya había pedido todo eso. Natasha rió ante la actitud apenada del joven y se acercó a él.
—Vamos a la mesa, necesitas desayunar. Dijo antes de tomar la mano de Bruce y caminar.
Los pies del pelinegro se arrastraron hasta llegar a la mesa, Natasha camino hasta la nevera para descubrir que solo había una dona dentro.
—Bien, puedes desayunar dona y agua. Se burló antes de tirar la vieja dona a la basura.
—Puedo llamar al vigilante, tiene una pequeña tienda. Se encogió de hombros caminando hasta ella. ¿Qué se te antoja? Pregunto acercándose por detrás.
—No me hagas decir una vulgaridad. Soltó riendo nerviosa.
—Oh, eres una niña mala. Jugueteo un poco escondiendo la cara en el cuello de la pelirroja. ¿Quieres ser una niña mala, cierto? Murmuró rodeándola por la cintura.
Natasha rió y acepto los húmedos besos en el cuello pero terminó por empujar levemente al rizado al sentir que él se estaba concentrando demasiado.
—Debes desayunar. Repitió antes de girarse sobre sus talones para poder mirarlo.
—No, no debo. Tony me alimenta muy bien, tengo calorías suficientes. Rió antes de abalanzarse a ella nuevamente.
La pelirroja rió fuerte al sentir la ligera capa de barba de Bruce raspando en sus clavículas.
—Bruce, por favor, creí que la adolescente era yo. Lo empujó levemente con las manos, intentando romper el agarre. Quiero desayunar, por favor pide algo para poder cocinar.
Bruce suspiro pesadamente y alzó ambas manos fingiendo derrota.
Tomo el teléfono de pared y marcó un par de números.
Termino pidiendo algunos huevos y un poco de jamón, después de todo necesitan ahorrar tiempo para invertirlo en otras cosas más... Más interesantes.
—Bien. Natasha saco la pastilla de la gran caja, bastante llamativa para su gusto.
Bruce observo en silencio, jugando con la caja de condones sobre el cristal de la mesa.
ESTÁS LEYENDO
Hilo. (Brutasha)
FanfictionEn una vida cotidiana, Natasha Romanoff y Peter Stark son mejores amigos. ¿Qué pasaría si todos los clichés se juntarán en una sola obra? Lo averiguaremos. (Esta obra fue finalizada el 8 de agosto del 2019 pero he decidido hacer correcciones de r...