Capítulo 3

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July estaba en su casa, ayudándole a hacer la cena a su madre, su padre no tardaría en llegar y su castigo no había sido levantado, para entonces ya se había acostumbrado.

Constantine estaba poniendo la mesa mientras su madre cocinaba y July estaba lavando los trastes sucios.

En ese momento escucharon como alguien tocaba la puerta, no podía ser su padre ya que él tenía llaves.

—Yo voy, señora Dunn. —Dijo Constantine desde el comedor.

La castaña trataba de ver por la puerta quien era pero era imposible. Sin embargo, Constantine se veía alegre, estaba hablando mucho, eso no era normal en ella.

—Señora Dunn. —Constantine entró a la cocina con una sonrisa de oreja a oreja. —Buscan a la señorita Julia. Dice que es urgente.

—Pues, diles que está castigada. —Dijo la señora Dunn sin dejar de hacer sus cosas mientras July agachaba la cabeza decepcionada.

—Sí, señora. —Dijo seria.

Constantine salió de ahí y regresó en menos de un minuto.

—Señora Dunn. —La volvió a llamar. —La buscan.

—¿Quién es el insistente? —La madre de July estaba exasperada. Se lavó las manos y se las secó en su falda mientras iba a ver quien era.

July miró interrogante a Constantine mientras ella la ignoraba y se iba de ahí. De pronto, July se vio interrumpida en hablarle a Constantine porque un grito de su mamá llamó su atención.

—¡Steve! —July se emocionó y dejó lo que estaba haciendo para ir a ver a su amigo. —Me alegra verte, ¿ese es un uniforme?

—Sí, así es, señora. —Steve estaba feliz y nervioso. —Fui reclutado. Soldado Rogers a sus servicios. —Steve se paró derecho mientras hacía el típico saludo militar.

—¡Julia! —Su madre le gritó sin darse cuenta de que ella estaba atrás.

—Aquí estoy, madre. —Ella contestó algo seria pero al mismo tiempo feliz de por fin ver a su amigo y saber que estaba entero.

Su madre se acercó a ella mientras le susurraba amenazante: —Solo porque es Steve y estabas preocupada por él.

—Sí. —July asintió nerviosa y seria mientras su madre salía de ahí para terminar la cena.

Los dos jóvenes se quedaron viéndose a los ojos sin poder decir nada. Steve estaba aterrado pero feliz de por fin ver a su amiga y se imaginaba cómo recibiría la noticia., mientras que July quería matarlo por haberse enlistado pero una pequeña parte de ella estaba feliz de que lo aceptaran en el ejército porque era su sueño pero ella se negaba a aceptarlo en su presencia.

—Um...hola. —Dijo el rubio con una pequeña sonrisa.

July no pudo fingir estar enojada con él y corrió a abrazarlo.

—¡Steve! —Casi hace que ambos caigan. —Te detesto, te desapareciste sin dejar rastro, nada, ninguna nota. ¿Sabes? No porque Bucky se haya ido, significa que ya no tienes a nadie más que se preocupe por ti.

—July. —Steve dijo serio. —Me estas lastimando el cuello.

—Te lo mereces. —July dijo sin soltarlo pero después de unos segundos lo soltó para poder verlo con su uniforme y al verlo no pudo evitar recordar a su prometido el día que vino a decirle que se iba.

—Pasa, crea que la estancia está desocupada para que podamos hablar. —July lo jalaba por el brazo. —Me tienes que contar que ha sido de ti. Y yo también tengo algo que contarte. —Dijo ella mientras recordaba su día en la jefatura.

Immortals /Bucky Barnes/Where stories live. Discover now