Capítulo 20

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—¡Mirts! Será mejor que tengas una buena razón por la cual llegas tarde. —El jefe de Mirts fue el primero en recibirlo recalcando lo obvio.

—Lo siento señor, no encuentro a mi esposa. —La cara de Mirts demostraba la desesperación que estaba viviendo.

—Eso no es mi problema, usted tiene una hora de entrada, ahora váyase con Smith, hubo un accidente. Un auto se salió del camino.

Mirts dejó su maletín en su cubículo y salió detrás de Smith. No estaba presente pero debía de hacer su trabajo. No había visto a July en un día y eso lo estaba comiendo vivo pero una parte de él le decía que July podría estar vagando por ahí como solía hacerlo y simplemente se le había olvidado avisarle. Había llamado a Cass y a Peggy, Cass le dijo que había venido a verla, y Peggy no sabía nada, luego llamó a su casa y su madre dijo que también había pasado por ahí, eso lo relajaba, a lo mejor después se fue a trabajar y en estos momentos estaría en la casa durmiendo. Eso se decía para poder seguir con su día.

—Mira, sé que estás preocupado pero al menos podrías prestarme un poco de atención. —Su compañero captó su atención después de haberle hablado durante varios minutos. —Si quieres, solo tomaremos el reporte y yo termino el papeleo, después pide permiso para ir a buscar a tu esposa.

—Gracias Smith. —Mirts sonrió ligeramente.

—Algunas veces mi esposa hace lo mismo, resulta que solamente está en casa de su madre, obviamente que me molesto pero no hay nada que un par de nalgadas no arreglen. —Smith dijo sin dejar de ver al camino.

—¿Golpeas a tu esposa?

—Cuando se lo merece. —Smith alzó los hombros indiferente.

—No deberías. —Mirts dijo algo molesto. Él jamás llegaría a golpear a July.

—Ya veo que no golpeas a tu esposa. Es por eso que no encuentras a la tuya mientras que la mía está en casa, como debería. —Mirts tuvo que contenerse apretando su puño, su humor no era el mejor y que Smith se comportara como un imbécil no ayudaba en nada.

El resto del camino pasó en silencio. Por fin llegaron al tramo de carretera, había un tumulto de gente. Ya habían llegado los bomberos y estaban terminando de apagar el fuego que el auto había ocasionado.

Algunos cuerpos de la policía estaban cerrando las calles cuando vieron a Smith y a Mirts como sus relevos.

—Desde aquí nos encargamos nosotros. —Smith dijo a sus compañeros para comenzar a bajar a ver la escena. —¿Qué es lo que saben?

—Creemos que fue un accidente, el conductor se salió del camino y su auto se incendió. No hay rastro del cuerpo pero al auto ha estado en llamas al menos unas 16 horas. Un peatón lo reportó en la mañana. Así que el cuerpo ya no debe de estar.

—Gracias. —Dijo Mirts anotando lo que le dijeron. —¿Algo más?

—Nada. No sabemos de quién es el auto, no hemos podido abrirlo ya que el fuego estaba todavía haciendo de las suyas además de que casi comienza un incendio forestal.

Mirts asintió y se adelantó a ver el auto que en esos momentos ya estaba apagado mientras su compañero seguía anotando lo que el otro oficial decía.

Cuando alcanzó una suficiente distancia frente al auto, fue cuando se dio cuenta de quién era, nadie debía de decírselo o confirmarlo, a pesar de estar completamente destrozado y lleno de cenizas lo conocía a la perfección. Era de July.

Su cara se puso pálida llegando a tonos verdes, sintió como sus piernas dejaban de funcionar y cuando vio estaba en el suelo tratando de levantarse, todo se había vuelto borroso, como si estuviera distante. Sintió su estómago querer vomitar a pesar de no haber desayunado nada esta mañana por estar buscando a July y al parecer la había encontrado.

Immortals /Bucky Barnes/Where stories live. Discover now