Immortals /Bucky Barnes/

Capítulo 42

July despertó en otro cuarto de metal, se estaba acostumbrado a todo esto, parecía un celda, más bien, era una celda. Una cama pegada a la pared y un excusado a un lado, pero no parecía una celda como cualquier otra, estaría parecía diseñada especialmente para no escapar.

Pero la pregunta que ni siquiera quería decir a lo alto, era: ¿Qué hago aquí? ¿por qué estoy aquí? ¿y cómo salgo para salir de aquí? July suspiró cansada mientras iba a sentarse recargada a la pared mientras cerraba los ojos.

Debía de irse acostumbrando a esto, pero a pesar de todos los errores que cometiera, parecía simplemente no hacerlo. Frotó sus sienes cansada, pero en cuanto abrió los ojos, vio a un hombre de traje frente a ella con los brazos en la espalda y las piernas abiertas, militar, pensó ella.

July esperaba a que el hombre dijera algo, normalmente gente como él amaba regodearse y demostrar su autoridad con comentarios sarcásticos e hirientes así que ella solo se le quedó viendo a esos ojos que parecían no tener vida.

—Me gusta verla ahí, sentada y abatida. —Ahí estaba el comentario hiriente. —Pero parece ser que su conciencia está tranquila, ¿a qué se debe eso, señorita?

July no dijo nada, no tenía nada que aportar a esa conversación.

—Ahora dime, ¿por qué lo hiciste?, ¿acaso te pagaron? ¿O solo fue tu retorcido pasatiempo?

El hombre frente a ella estaba entrando en ansiedad por cada segundo que pasaba y ella no le respondía.

—No sé de qué está hablando. —July por fin respondió. —Pero creo que están equivocados, no sé cómo llegué aquí, tienen a la persona incorrecta.

—Creeme, te hemos seguidos por un años, no eres la persona incorrecta. Es más., déjame refrescarte la memoria. —De su espalda, sacó un folder demasiado extenso con lo que parecían ser fotografías.

Tomaba una, la ponía frente a la celda de cristal de July y luego la tiraba al piso. Así como 15 – 20 fotos, todas y cada uno mostraban a personas que July jamás había visto en su vida, pero todas tenían algo en común, estaban muertas.

Era increíble que una persona hubiera causado tanto dolor pero sabía que esa persona no había sido ella, ella no había matado a nadie, en efecto, lo último que recuerda es haber ido en busca de M.O.D.O.K. pero en su mente, ella jamás había podido encontrarlo.

—No los conozco, ahora, me gustaría que fuera a buscar a la persona que causo eso para que yo pueda irme. —July dijo tranquila pero el hecho de su reciente falta de memoria y el no saber qué fue lo que pasó durante un año le causaba una cosquilla en su mente de que tal vez...había sido ella la causante de todo eso.

—Es obvio que no los conoces, para ti solo eran nombres en un expediente, tus objetivos, pero el dolor que causaste este último año ha terminado.

—¡Basta! —July gritó corriendo directo para golpear el vidrio que se encontraba frente a ella y se sorprendió al ver que con un solo puñetazo había agrietado el cristal. Generalmente, ella no era así de fuerte. No desde su último incidente con HYDRA, pero los rastros de su fuerza se habían esfumado aunque algunas veces regresaban, al no haber terminado el procedimiento, no podía controlarlos.

—Agentes, repito, agentes, necesito refuerzos ahora. —El hombre con el que anteriormente estaba hablando comenzó a gritar por un radio y desde arriba de su celda una compuerta demasiado pequeña para que una persona cupiera se abrió dejando salir un bomba de gas que explotó en cuanto tocó el piso.

July como pudo, evitando ahogarse con el gas, corrió de nuevo hacia el cristal, esta vez golpeando con sus dos puños a la vez y pudo ver como las grietas se agrandaban, otro golpe más y ese vidrio caería en mil pedazos, así que lo hizo pero por el impulso terminó en el suelo respirando el aire relativamente fresco que esa prisión brindaba.