56 Diciembre

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Nota: Hay una serie de producción mexicana (muy buena) que se llama PARAMÉDICOS y al verla, tuve la idea de que María José ejerciera esa profesión y me enamoré del personaje de Damián (por eso lleva ese nombre). Entonces como tipo homenaje a esa serie (y para tener un poco de ayuda en esta parte) lo que leerán a continuación lo tomé del capítulo 6 - temporada 1. En general, es la idea principal.

Qué más da recordar quién eras o de quién yo me enamoré

Aranza continuaba cubriendo el turno matutino y María José el turno vespertino y en ocasiones el nocturno, pero al término de uno e inicio de otro, las chicas se encontraban. Esa tarde y antes de que Aranza se retirara, salieron a atender un servicio junto a Jacobo Rodríguez, un paramédico novato. Se requería su asistencia en un caso de violencia doméstica, pero el agresor resultó herido por los vecinos, cuando lo descubrieron golpeando a su esposa en el interior de la casa. Al llegar, notaron que la policía intentaba contener a la gente, que, sin descanso, quería seguir golpeando al hombre y dentro del domicilio estaba la señora, también con heridas y dos niños lloraban mientras veían a su madre tirada en el sofá.

Como pudieron, lograron dispersar a la muchedumbre y subir al hombre golpeado a la ambulancia. La señora fue llevada al hospital en otra unidad.

—¿Hay algún familiar de los niños aquí?— preguntó María José en voz alta, algunas personas seguía observando.

No obtuvo respuesta.

—¿Al menos me pueden ayudar a cuidarlos?— insistió y fue cuando se acercó a ella una señora de edad avanzada.

—Nadie los conoce, llegaron a vivir aquí hace dos meses.

—¿Usted me podría apoyar?

—¿A cuidarlos? No, mi hija está trabajando y yo cuido a mis nietos.

Y al no tener respuesta positiva por parte de algún vecino, María José optó por hablar con los pequeños, quienes permanecían abrazados entre sí. La niña tendría alrededor de siete años y el niño cuatro.

—¿Tienen a algún familiar que viva cerca?

—Mi tía— respondió la niña— pero está trabajando.

—¿En dónde?

—No sé, se va muy temprano.

—Sus papis estarán bien, ¿okey? No tengan miedo. La vida es tan bella como ustedes la quieran ver y esto, solo es un recuerdo que pronto olvidarán.

Aunque no era la mejor opción para ellos, decidió subirlos a la ambulancia para llevarlos a una institución de gobierno dedicada atender niños que padecían maltrato familiar. Estaban por retirarse, cuando se aproximó una mujer. Pareciera que llegó corriendo por lo agitada que estaba su respiración.

—¡Son mis sobrinos!— le dijo al policía que detuvo su andar— ¡son mis sobrinos!

Los pequeños la reconocieron.

—Ella es mi tía— volvió a tomar la palabra la niña mayor.

María José le pidió al policía que le permitiera acercarse. De inmediato abrazó a los menores.

—¿Cómo está mi hermana?— cuestionó.

—Fue llevada a la clínica uno y nosotros llevamos al esposo. ¿Puede quedarse con los pequeños?

—Sí, por supuesto.

—Nos retiramos.

María José conducía la ambulancia mientras que Jacobo y Aranza iban en la parte trasera atendiendo al hombre.

Cometas por el cielo [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora