DESHACER AL ÁNGEL. (El Club De Los Desterrados 4)

Capítulo 51

Dos meses y medio habían pasado desde su llegada a Irlanda, donde a lo único que se había dedicado juntos a sus amigos era a estudiar el castillo de arriba a abajo, analizar cada salida y ruta de escape para conocer su territorio. 

    Sus amigos repasaban cada día lo que harían el día en que Parker entrara, la manera en que lo harían y sobre todo la manera en que lo cuidarían. Para todos estaba claro que debían protegerlo y a la vez protegerse entre ellos. 

—Este es el lugar por donde entrarán —dijo Blake—. Estaré en la reunión pero voy a asegurarme de que las puertas estén abiertas para ustedes.

—¿Por qué por ahí? —inquirió Hurs—. Entrar por ahí es un largo recorrido hasta aquí —señaló la parte dentro del croquis. 

—Eso daría tiempo a que los guardias estén sobre nosotros —dijo Chris. 

—No —respondió ella—. Ese lugar está libre de cámaras y vigilancia—. Me he asegurado. 

    Los amigos miraron a Melina quien era la única que había entrado al lugar con el pretexto de ser la nueva asistente de Blake.

—No estoy del todo segura —dijo Melina—. Me parece que así es, pero nada garantiza que el día en que el rey esté en la sala de reuniones el palacio no esté plagado de guardias. 

—Estoy investigando el número de elementos de seguridad que habrán y las zonas en que estarán colocados pero mi opinión es que sigue siendo la posibilidad que los hará avanzar más —dijo con determinación. 

—Si entran por aquí no pasarán del segundo borde —Señaló una parte—. La seguridad estará armada hasta los dientes dado que es el recorrido del rey. Sí siguen el camino que digo, avanzarán libres hasta aquí. —Volvió a señalar un punto antes de que todos volvieran a mirar a Parker. 

—Vamos a seguir la ruta de Blake —dijo y el resto asintió sin decir nada más. 

—Faltan solo un día —dijo Melina—. No tenemos aún el número de personas de seguridad, no sabemos lo que vamos a encontrar, estamos yendo a ciegas. 

—En un par de horas tendré el dato correcto —dijo Blake—. Me aseguraré de que las entradas estén libres. 

—Siento que es demasiado riesgoso —añadió Maddox mirando a Parker e ignorando a Blake. 

—¿No crees que nos estamos apresurando? —dijo Max—. En dos meses no hemos podido terminar de entender todo el palacio, es gigante y sin contar que desconocemos cuánta seguridad habrá, si estarán los medios de comunicación, no sabemos nada y hay que tomar en cuenta eso. 

—Si espero la siguiente reunión pasaré cinco meses más —dijo Parker—. Entiendo los riesgos pero es ahora o nunca. 

—Bien entonces hay que trabajar duro estos dos días —dijo Chris y el resto no tuvo más que seguir. 

    Escucharon de nuevo atentos a Blake que señalaba el camino a seguir una y otra vez mientras ella se encargaría de mantener la atención de todo los reunidos para evitar que alguien alertara. 

     Planearon la hora de llegada de Parker exactamente, la interrupción y después pensaron en lo que venía.

—He avisado a los medios —dijo ella—. Estarán ahí apenas entres y yo me encargaré de filtrarlos cuando todo estalle. 

    Las siete personas se quedaron viendo entre sí y después asintieron. 

—¿Estás segura de que no sospecha? —preguntó Melina.

—Completamente segura —respondió—. Habla de montar la fiesta más grande de la historia ahora que por fin va a obtener el poder absoluto. 

—Creí que ya era rey —dijo Maddox.