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Celos.

Sus manos fueron un blanco, sus cachetes fueron una explosión. La reacción del señor Park no fue la mejor ante la confesión de la señorita Lee sobre la ayuda de un tipo que poco conocía.

Cuando se enteró lo primero fue enardecer, Lee se encontraba por primera vez maravillada y no por él sino por un extraño que de casualidad le había salvado la vida. Sí bien esto no debía afectarle, era cierto que la última vez que dejo que un hombre se acercara y la encantará término de la peor manera.

— Debió llamarme — dijo  notoriamente celoso — ese tipo pudo hacerle daño, ¿debemos demandarlo? Pagará si le a hecho algo.

— No, todo lo contrario a eso — habló maravillada — pago mi deuda y sin pedir nada a cambio. Además no cualquier reportero hace eso por ti.

— Puede amenazarla a futuro — siguió — esos tipos nunca saben cuando parar con el chisme.

— Eso no pasara. — aseguró firme — no diré que es diferente a los demás hombres que me ha presentado mi padre, pero él tiene algo que me llama la atención.

Jimin no podía evitar sentir una extraño deja vu, como si aquello ya lo hubiera vivido tiempo atrás.

— Debe tener cuidado, no debe fiarse de cualquiera — soltó

Alejar a Yonhae del peligro era todo un trabajo, la chica amaba salir de noche, le gustaba pasar sus días fuera cuando las personas no estaban murmurando o paseándose, era difícil para un hombre como Park alejarla de personas maliciosas.

El hombre soltó un suspiro de fastidio, subió sus gafas con molestia y sin mucho que hacer decidió retirarse en una leve reverencia que mostraba su amargura en 3D. La voz dulce y amable de Lee lo detuvo y eso fue lo que provoco que el volcán estallara en su cuerpo.

— Quiero que investigues dónde vive, Necesito saberlo para regresarle el dinero que gasto y agradecerle en persona.

— quiere decir que... ¿está interesada en ese tipo? — se mostró incómodo.

— Hum... yo lo llamaría intriga.

Por un momento a el secretario se le salió un pequeño bufido, como debía tomarse aquella desición. Era como una estaca en su corazón, desde aquel coma Lee no había notado tanto interés por un hombre que no fuese él y eso porque él solo era un empleado más de ese lugar.

— No creo que debamos contactarlo.

— ¿por qué? ¿lo conoces? — Park negó inmediatamente — entonces, no juzgues antes sino sabes quién es.


Sin opción alguna accedió y de mala gana acepto, saco su tabla y con un bolígrafo comenzó a escribir las características del sujeto al cual tenía tan encantada a Yonhae.

— Bien, lo haré—  suspiro

— Gracias



— Claro, hum... Por donde comienzo — giró en su silla — es alto, más alto que usted como por 6 cm o 5 cm — Jimin la fulminó con la mirada mientras ella sonreía fascinada — su voz es un misterio, es como dulce y ronca a su vez, tiene esa pequeña cicatriz casi por debajo de su ojo izquierdo y no mentiré cuando digo que tenía un cuerpo bien trabajado.

El hombre no tuvo opción que apuntar mientras su sangre le hervía, en esta ocasión podía sentir como aquella canción llamada Diamonds are Forever de Sabrina Carpenter le quedaba a la perfección a Yonhae. Ella era un diamante que no podía tomar porque siempre quedaba en segundo lugar por su brillo.

— Eso no me importa — continuó — quiero saber cosas importantes, no que tipo de cuerpo tiene o si es un símbolo sexual para usted.

— Eso es importante para mi señor Park, usted necesitará reconocerlo si no sabe como es físicamente, además le recuerdo que dije que anotara cada detalle.

Molestó bajo su pluma y guardo su libreta.

— Solo diga el nombre, buscaré en los numerosos reporteros de Seúl para encontrarlo.

Nuevamente por costumbre Yonhae sonrió embobada, mordió su labio inferior y con una voz dulce dijo el nombre del hombre que comenzaba agrandarle sin tener un dato en específico sobre él.

— Jeon Jungkook — río — Su nombre es Jeon Jungkook...

TRAICIÓN 반역 Completa✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora