ii. 23. aquel extraño sueño

4K 328 65
                                    

Capítulo 23: Aquel extraño sueño

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Capítulo 23: Aquel extraño sueño.


—Tranquila, estás bien —intentaba calmar Draco a Sarah, abrazándola y acariciando su cabeza—. No pasa nada.

Sarah se sentía en su propio refugio cuando estaba entre los brazos de Draco, y más en un momento así. Siguió llorando un rato, no queriendo por nada del mundo separarse del chico, y poco a poco comenzó a respirar con normalidad otra vez.

—¿Estás mejor? —le preguntó Draco, cogiendo la cara de la chica entre sus manos.

Sarah asintió y se limpió las lágrimas con torpeza.

—Lo siento —murmuró.

—¿Cómo que lo sientes? —saltó Draco—. No tienes nada de lo que avergonzarte.

—Por haber pasado de ti estos días. Soy una mierda...

—No, no, qué va —contradijo el Slytherin—. Me lo merecía por ser tan cretino. ¿Eso significa que estoy oficialmente perdonado?

Aquel comentario le sacó una sonrisa a Sarah, la primera en varios días. Había echado tanto de menos a Draco. Nunca más quería volver a separarse de él.

—Te quiero —fue la respuesta de Sarah.

Draco reaccionó besándola: ya no se iba a aguantar mucho más, llevaba días sin hacerlo. Y como los dos se echaban tanto de menos, rápidamente la cosa se empezó a calentar. Decidieron hacerle una visita a la Sala de los Menesteres.

Para Sarah, Draco era mejor que cualquier ansiolítico que Madame Pomfrey pudiera recetarle.

· · ·

—¿Sarah?

La voz de su hermano la sacó de su ensimismamiento. Se giró y vio los ojos de sus tres mejores amigos mirándola con atención. Había sido un detalle por su parte acercarse a verla a la mesa de Slytherin a la hora de la cena, pero aquello empezaba a ser incómodo. Draco, que estaba conversando con Crabbe y Goyle, se calló y miró con desprecio a los de Gryffindor.

—Queríamos saber si estabas bien —dijo Harry poniéndole la mano en la espalda.

—Sí, gracias.

Sarah lanzó una mirada nerviosa a los de quinto curso de Slytherin que se hallaban cerca. Todos y cada uno miraban mal a Harry, Ron y Hermione. Sarah decidió que lo mejor era poner distancia.

—Voy a cenar a mi mesa —anunció a Draco, que asintió sonriéndole.

Se levantó y los cuatro se fueron a la mesa de Gryffindor, donde se sentaron apartados del resto de estudiantes.

—¿Q-qué te ha pasado? —preguntó vacilante Hermione.

—Yo..., me he empezado a acordar y... —Sarah cogió aire para continuar—. Digamos que no lo llevo demasiado bien.

SARAH'S HISTORY - DRACO MALFOY / SH#1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora