Por favor, regresa y quédate

Juntos hasta el final

Después del encuentro de Kennedy con Camile las cosas han ido mucho mejor, tanto que ella accedió a volver al conservatorio y otra vez estamos ensayando juntos, además de que pudo presentar sus exámenes para aprobar grado y aunque no en todas las asignaturas le fue excelente logró pasar este año sin complicaciones.

Mónica también la autorizó a seguir con el juicio y ayer presentaron sus testimonios la doctora Hill, Jane, otra vez yo, la directora Jones y Camile. Camile solamente dijo cosas horribles de Kennedy como esperábamos y aunque dijo cosas buenas de Arthur no negó en ningún instante que él no hubiera drogado y violado a Kennedy. Esa fue su venganza para con los dos. Kennedy no quiso presentar cargos contra ella, pero las otras chicas quieren presentar cargos y nosotros reiteramos nuestro apoyo.

Hoy declara mi abuelo y nuestras chicas sorpresa, Kathy, Melissa y Maisy. Milton fue ayer al juzgado para presentar a nuestras chicas sorpresa, Martin ya nos ha jugado muy sucio es nuestro turno de contraatacar. Lo único que no me gusta es que justo hoy, catorce de diciembre es el cumpleaños de mi bella Kennedy y lo pasaremos metidos en el juzgado, en teoría hoy se define todo.

Levantamos a Kennedy con la canción de Happy Birthday y un enorme pastel de fresa que Rita ha hecho. Kennedy se levanta sonriente y mi abuelo le hace miles de fotos. Desayunamos con mucha alegría, no puedo creer que mi rubia preciosa ya tenga dieciocho años, ha pasado todo muy rápido.

—Déjale la nostalgia a los viejos, hijo —mi abuelo me palmea el hombro.

—Lo haré...

Cambio mi expresión nostálgica, la verdad es que mi vida está mucho mejor, sin la presión del despacho las cosas han mejorado mucho, incluso estoy yendo a terapia para controlar un poco mis impulsos locos y también para poder dejar ir todo el rencor que he acumulado desde la muerte de mis padres.

Jane y yo hemos vuelto a ser amigos y Pierce, bueno él se muda la semana entrante y le ayudaremos a empacar. Nos alistamos para ir al juzgado, Milton realmente está positivo con el resultado de hoy, así que eso nos mantiene más tranquilos y si por alguna misteriosa y jodida situación no declaran culpable a Arthur, entonces lo encerraremos por las otras violaciones, pero ese bastardo pisará la cárcel cueste lo que cueste.

En el juzgado ya están los amigos de Kennedy, está Jimmy con su buen humor y Sophie tan coqueta como siempre. Vemos a lo lejos a Pierce y Jane, Pierce está sosteniendo la mano de Jane y en cuanto nos ven se sueltan avergonzados.

—¿Interrumpimos algo? —Dice Kennedy con una gran sonrisa.

—¡Feliz cumpleaños Collingwood! —Grita Pierce en un intento desesperado de desviar la atención.

—Ya me felicitarás después —Kennedy le guiña un ojo y se ríe.

—¿Estás lista? —Jane se acerca con un bonito rubor en las mejillas y nos abraza.

—Sí, estoy lista para todo —dice Kennedy con una seguridad que hace mucho no le oía.

—¡Esa es mi chica! —Pierce toma el brazo de Kenne y lo levanta en señal de triunfo.

Entramos a la sala y nos sentamos detrás de Milton, nuestros amigos llenan toda una fila. Kennedy toma mi mano y yo la aprieto con cariño, se tensa un poco cuando ve aparecer a Arthur con su familia y su abogado, no los pierde de vista e incluso su labio tiembla ligeramente.

—Hoy es nuestro día dulzura –le doy un suave beso en la mejilla y ella se relaja un poco.

—Lo sé.

Empieza la sesión, mi abuelo es llamado a declarar. Se alisa el traje, aunque no tenga ninguna arruga y se dirige honorable como siempre al estrado.