Pov Ana
—¿Desde cuándo? -es la única pregunta que sale de mí.
—Ya tengo 6 meses con ella -fue suficiente, le tiro una bofetada lo más fuerte que pude.
— ¿Seis meses? Seis putos meses, Antoni. No sé si reírme -suelto una carcajada amarga- y yo pensando en que fue lo que hice para que tengas esa actitud conmigo y tú solo te estabas revolcando con otra.
—Tú tienes la culpa de todo -dice serio.
—Ah, ¿yo? Sabes que me largo -voy hacia la habitación mientras pienso «no voy a llorar aquí, no», aunque me duela, pero me tengo que ir agarro mi maleta, coloco todo lo que traje gracias que es poco.
—Sabe ¿por qué terminó contigo? -sonríe de lado.
—No, tampoco me importa -digo agarrando mi ropa.
—Esa actitud que tienes por eso, eres tan no sé, mis amigos dicen por qué estoy contigo si puedo estar con todas y tienen razón -dice frío con aire de superioridad, me duele sus palabras.
— Nada más te voy a decir esto, si tus «amigos» te lo dicen y tú crees que está bien. Por mi normal, pero te recomiendo que no te creas el papel del Bad Boy que no te queda.
Salgo de ese lugar, el cual pensé que sería una motivación, pero me equivoque, cojo el primer taxi que aparezca, el único lugar al que puedo ir es a Noelia, espero que este despierta por la hora.
A los minutos llegamos, solo tengo en mente los momentos que pase con él. Voy hacia la puerta antes que toque la puerta, Noelia sale alterada.
—Hola -mi voz sale cortada, solamente me abraza- se fue todo a la mierda, dos años al tacho.
Entramos, me sienta para ir por las maletas, yo estoy perdida en mis pensamientos.
—Escúchame, no voy a permitir que llores por alguien como él -dice acompañándome.
— Pero me duele, me duele lo que dijo, me duele como puede terminar tan fácil las cosas -lloro todo lo que aguante.
— Te entiendo, aunque no puedo decir que sé cómo te sientes porque te mentiría, escúchame -me cojo de la cara- el día de hoy llora todo lo que quieras o el día de mañana, pero no más.
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Al levantarme solo me dirijo al baño, me cruzo con mi reflejo; mis ojos rojos e hinchados, mi cabello hecho un desastre. Me fijo en la foto que está pegada a la pared.
Salgo para no pensar en nada más, pero es innecesario, todo el'cuarto está lleno de sus regalos, las cartas que me enviaba aún siguen por los suelos.
Me echo a la cama para hacerme una bola, creí que nunca más volvería a sentir este dolor, pero mírenme, veo su camisa en la cama y me abrazo a ella.
Observo las fotos que están pegadas a la pared, donde estamos abrazados o haciendo cualquier gesto a la cámara, recordé que tenía una botella de alcohol en este cuarto, voy hacia el ropero y bingo una botella llena.
Mi mente me decía que tenía que llamarlo, pero mi orgullo no me lo dejo, Ana tocaba la puerta, pero no quería que me viera de esta manera, solo abrí un poco ocultándome en la puerta.
Al parecer lo entendió porque solamente pasó un plato de comida para luego irse, todo el día me la pase en mi cuarto llorando esos recuerdos hasta quedarme dormida.
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El día de hoy al mirar mi reflejo estaba peor que el día de ayer.
—Ana, no puedes estar así por un hombre, lo quieres sí, pero él no te supo valorar, eras más que él, somos más que él -dice la voz de mi cabeza.
Decido darme una ducha fría para salir y poner un buzo con cualquier polo que sea de mi propiedad.
Abrí mis cortinas dejando entrar la luz a este oscuro lugar, agarró una bolsa para recoger todo lo que esté en el suelo, y sacar las fotos más sus playeras
salgo al pasillo sacando las bolsas que aún tengo adentro.
—¡Noelia! - gritó ella como si estuviera en peligro vino corriendo a mi
—¿Qué pasa Ana?, ¿tienes algo, dime? -dice alterada.
—Quiero que me ayudes a botar todo, esta mierda que tengo en mi
cuarto -dije lo más calmada.
Ella me ve con una sonrisa y me abraza.
—Sabía que no ibas a estar mucho tiempo, así ahora vengo capitana, voy por bolsas-dice tierna.
—Gracias por estar aquí, yo que tú me hubiera golpeado, pero no estás aquí -dije abrazándola - vamos a limpiar.
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En lo que me convertistes【En edición】
Teen FictionEstoy corriendo sin rumbo, no pienso ir a casa, no sé donde irme justo en estos momentos, a pesar no tengo muchas opciones, este vestido no me deja nada de movimiento. Mi mente me traiciona haciendo que varias preguntas pasen por ella, ¿Cuándo se co...