Capítulo 91 ✔

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Pov Ana

Estábamos comiendo hasta que tocan la puerta, Yoshi va, pero es tumbado por Noelia, veo a Michel, caminar para ayudarlo a parar, pero ella es más rápida, le hace un llave noqueando.

—Calma fiera que estoy bien.

—¡Tu insensata! Sabes lo preocupada que he estado pensando que estabas -su voz se corta, voy para abrazarla.

—Lo se disculpa, aunque no me tienes que gritar, yo soy inocente de todo cargo -me mira mal- ¿Qué? Yo recién desperté hace dos horas, no es mi problema que estos niños no te hayan escrito algo, pero con esos golpes ya está más que dicho.

Veo a Yoshi moverse y lo ayudo hasta la sala ¿Cuándo mejoró su fuerza la niña?

—Hey Yoshi quieres helado -abre sus ojos de golpe parándose, pero se queja- tranquilo yo te traigo.

—Vale ¿Qué te pasa Noelia casi me matas?

—No me tientes que ganas me sobran.

—¿Qué te hice? -dice con tierno puchero

—No me has dicho nada de la salud de Ana, no sabía si estabas aquí, rastree toda la zona y nada ¿Quieres que siga?

—Está bien, me lo merezco, perdón.

Solo resopla, camina a mi siervo tres vasos con dos bolas de helado, pero me lanza un documento de identidad más un pasaporte.

—¿Me quieres lejos?

—El mío está en mi maleta, nos vamos de aquí.

—¡¿Qué?! -grita Yoshi.

—Ya que estas mejor podemos irnos, tus cosas están en la maleta de la camioneta.

—Noe porque irnos si ya no hay de quien escapar, a pesar te dije que estas cosas lo hacía yo.

—Ana, no quiero excusas, sé que no quieres estar aquí por muchas razones para una nueva vida, terminamos la carrera de seguro, buscamos un trabajo más lo que tenemos podemos irnos.

—Vas a dejar a Agustín

—Él ya no es nada para v... -dice triste, aunque lo disimula muy bien, pero a mí no me miente.

—Ya terminaste de mentirte.

—An...

—Joder dejar a alguien que moriría por ti, eso es cruel.

—Él me traicionó.

—No te equivoques, él no te mintió aún de eso, estoy completamente segura.

—A no ¿Y con todas esas zorras que se acostó?

—Se las mandé yo -me encogí de hombros.

—¿Tú?

—Cuando tenía una bala en la pierna, en la pelea de él y Luis en el comedor, cuando dormites de la nada desde la primera vez que te vio se enamoró, pero no podía y cobardemente te quiso olvidar de la peor manera lo admito

pero con todas no pasaba como tú, decía tu nombre, se emborrachaba llorando tratando de olvidarte, pero nada lo soluciono hasta que se dio por vencido y estuvo contigo sin importar que quizás meterse con la hermana del «Jefe» aunque él no lo supiera era su cavar su propia tumba.

Y pensarás que porque te digo, pues fácil, yo vi todo eso, pero no te lo dije por qué te habías vuelto a enamorar después de Eric, te lo mereces, no te digo si vas a estar con él o no solo te digo piensa un momento en ti conversa con él y arregla o simple nos vamos.

—Tú como vas a ver a Luis...

Esa misma pregunta me la hago, lo quiero ver siquiera una vez y ver qué va a suceder pero no puedo.

Estaba por contestar cuando el cuerpo de Michel vibra levantándolo, contesta el teléfono poniéndolo en altavoz.

—¿Alo?

—Bebe, estás bien -se escucha como si estuviera llorando

—Sí que paso porque lloras

—Vinieron unos chicos a buscarte, solo dije que estabas en la casa acampar, pero no dirección me asustaron mucho.

—¡¿Qué?! Ahora mismo voy y le parto ...

—Hey grandulón cálmate.

—¿Cómo quieres que me ...?

—Yoshi -él asiente y le mete una cuchara de helado a la boca.

—Disculpe, señora, me podría decir como son.

—Anita, si uno es un chico de ojos verdes claros y ... -con solo eso ya sé quien es.

—Ah, sí lo conocemos, son unos tontos disculpe -se escucha su suspiro- no se preocupe.

—Ana cuida a mi bebe de recompensa, te daré un paquete de galletas.

—A sus órdenes aquí cuido a su príncipe.

—Hasta luego que voy a iniciar con las galletas.

—Vale adiós.

Solo niego lo único que no quería hacer era escucharlo.

Lo llamo conociéndolo, estará volviéndose un loco, contesta al segundo tono.

—¿Noe...?

—Hola Luis -solo se escucha un suspiro que me mata, no puedo más.

—¿Ana?

—Sí, estás con Agustín -si sigo no voy a poder con las lágrimas y eso es peor.

—Sí, está aquí -suspiro, sé que tengo que arreglar con él, pero no ahora.

—Pásamelo, por favor -se demora hasta que se escucha como si lo lanzarán.

—¿Dime?

—Joder Agustín, se puede saber por qué están ahí cuando sabes que Noelia ya está aquí.

—Pasaron tan rápido que no me di cuenta.

—Salgan de ahí a la señora, casi le da un infarto por ustedes. Mañana estamos ahí sabes donde dejar las llaves.

—Está bien -cuelgo

Tengo que pensar bien, no solo me sebo llevar por las emociones o quizás si no sé lo que puede pasar en un futuro, solo sé que no quiero lo que estoy pensando o quizás sí.

Noelia está a mi lado, pero no siempre debe estar ahí, ella tiene que hacer si vida y bueno, a pesar de ser su mejor amiga tiene que ser libre, ya lo encontró, tengo que dejarle que haga su vida.

—¿En qué tanto piensas?

—En una nueva receta para mejorar el helado.

—¡En serio! -salga Yoshi empujando a Michel.

—Sí, pero no para ustedes.

—Oh, vamos -niego sabiendo que esto es momentáneo.

—Los quiero chicos.

Todos voltean a verme como si hubiera dicho algo anormal.

—¡¿Qué?!

—Ash nada vamos a comer.

—Nosotros también te queremos, apapacho.

Todos vienen a abrazarme qué haré si están locos.

En lo que me convertistes【En edición】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora