En lo que me convertistes【En edición】

Capítulo 63 ✔

Pov. Luis

Me levanto por un rayo de sol en mi ojo joder, me olvidé cerrar las cortinas, siento una presión en mis brazos, me giro, encontrándome con una hermosa vista, los recuerdos vienen a mi mente, cosa que me alegra.

Ver a Ana durmiendo en mis brazos, con el cabello enredado, su labio salido, cada pequeña cosa que veo es perfecta para ella y me encanta.

¿Qué me has hecho?

En otras ocasiones me estaría yendo de aquí, pero no, quiero ser el primero que vea a su lado.

—Vas a seguir mirándome, una foto te va a durar más.

Me espanto al escuchar su voz atrapándome mirándola, veo sus ojos que están de un marrón claro, su sonrisa latente.

—No prefiero verte todas las mañanas -me encojo de hombros -se escucha su risita que me vuelve loco.

Me acercó a ella para besarla, pero me detiene, se para, su espalda, su cintura, su culo; esa forma de reloj de arena que tanto me calienta hace que me caiga a sus pies.

Joder es una diosa, está enfrente mío desnuda sin ningún pudor de que me quede embobado viéndola, camina a la ducha y se escucha un chorrito de agua.

En menos de un minutos sale del baño puesta una bata, se acerca a mí dándome un beso.

Me río al entender, la cargo a mí sentándola en mi cintura, mis manos van dentro de la bata agarrando su piel, siento que se estremece ante mi tacto.

—Tenemos que ir a clases.

—Yo no quiero ir, prefiero estar aquí contigo.

—Nada de eso, te espero abajo, no me hagas subir de nuevo.

Me regala una mirada juguetona, sale del cuarto, mierda, en mis planes no está esto, si no, bueno, tampoco tenía planes, pero definitivamente no cambiaría lo que pasó por nada del mundo, sentirla, tocarla, ser yo, YO quien la haga venirse como ayer.

Recuerdo sacar fuerza de donde sea para no caer encima de ella, sentirá, apretando, pidiendo por más.

Es una jodida diosa, no mentiría, he tenido sexo con algunas mujeres, pero nadie puede compararse, al callarme así, sintiendo lo húmeda que estaba fue la mejor manera de cerrarme la boca.

Ver en sus ojos el deseo de mí, mierda de solo volver a recordar hace que me ponga de nuevo.

Camino al baño sin darle importancia a mi pequeña erección, busco mi bóxer, me lo coloco, todo huele a ella, su baño, su cama, todo ver esa tina me hace seguir fantaseando.

Flashback.

Veo a Ana levantándose después de mi pregunta yendo al baño.

—Te espero -con esa jodida respuesta me prendió de nuevo, estaba en la tina completamente mojada, su cabello amarrado para no mojarse, con una mano el jabón sobando sus piernas.

—¿Hay lugar? -se aparta y me siento atrás de ella.

El agua estaba tibia con un toque de espuma, al sentarme Ana, se recuesta en mí, sin importar mi jodida erección.

Se mueve en círculos a mis costados, no sé en qué momento me doy cuenta de que tenía la cabeza para atrás, que casi me atraganto con mi propia saliva por recibir unos besos alrededor de mi cuello, está con esa sonrisa que me prende, ella lo sabe.

—Me sobas -está a punto de pasarme el jabón cuando se cae de sus manos, va a su búsqueda, lo que agarra no es el jabón, suelto un pequeño gemido.