Pov. Ana
—Cuidado que te cambia rápido.
Lo miramos y no es ni más ni menos que Yoshi, corro a él tirándome encima de él, me agarra la cintura para no caernos.
—No es cierto, nunca cambiaría -apretó sus cachetes hasta que queden rojos.
—Si aja más de dos semanas que no me hablas -pensándolo bien es cierto no he hablado con él mucho tiempo, he estado más tiempo con Michel.
—Es que tenía que ayudarlo, mira -señalo a Michel- tenía que hacer un cambio con este chico. Yoshi -lo digo con una voz aniñada, un sonido nos separa y veo a Michel queriendo preguntar algo.
—¿Yoshi el de Mario Bros? - pregunta tímido
Miro a Yoshi y está más rojo que un tomate y me rio en su cara, como me voy a aguantar cuando está rojo y Michel esta que le dé una parálisis, sujeto mi estómago parando las risa.
—Cuántas veces te dije que no me digas así -regaña.
—Oh, vamos el tuyo, es adorable, ni te imaginas a del él, es ... -me agarran tapándome la boca impidiendo hablar.
—Hey tenemos que ir a clases adiós -me arrastra sin soltarme.
—¡Oh, vamos, ya sabes el mío, tampoco creo que sea tan malo! -grita.
Me suelto un poco para gritar ¡Abuelin!, desde aquí se escucha la risa rompe vidrio de Yoshi cuando miró a Michel regañándome con la mirada, solo le sonrió entrando a clases, suspira y se sienta conmigo.
Así pasamos toda la clases hasta que me quede dormida en el brazo de él, me levantó por un ligero toque en mi cabeza y ahí está Michael con una sonrisa.
—Oh, no me mires, así que me matas -escucho su risa y me suelta un golpe, veo y no está el profesor.
Arreglo mis cosas para irme, Michael me dice que va a ser algo que me espera en la cafetería, asiento y se va, estoy tan metida en mi pensamientos que no me di cuenta de que ya no hay nadie en el aula sino Luis.
Agarro mi maleta, camino a la puerta, pero me agarra de la muñeca, pero logró soltarse.
—¿Qué es lo que quieres? -Me siento en la silla más cercana.
—¿A qué estás jugando? -se acerca a mí, pero algo le detiene.
—Yo a nada, ¿a qué jugaría? -no sé dé que habla.
—¿No sé? -es como si estuviera en un juego de palabras, solo me enoja
—Basta de preguntas, contesta de una vez que me están esperando aparte no estoy jugando a nada, creo que ya he hablado de esto Luis -me paro para irme cuando me detiene.
—Lo de ayer no cuenta ... -lo callo, claro que cuenta-
—Claro que cuenta, mira, estamos en un lugar no adecuado que te parece si en la salida hablamos está bien -asiente y salgo de ahí.
Lo dejo ahí parado mirándome con un pavor por, lo que pase después, pero vamos, esto se ha vuelto en una relación algo tóxica y no me apetece repetir lo mismo, ya he estado en una, no quiero repetirlo y menos con él.
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En lo que me convertistes【En edición】
Novela JuvenilEstoy corriendo sin rumbo, no pienso ir a casa, no sé donde irme justo en estos momentos, a pesar no tengo muchas opciones, este vestido no me deja nada de movimiento. Mi mente me traiciona haciendo que varias preguntas pasen por ella, ¿Cuándo se co...