En lo que me convertistes【En edición】

Capítulo 64 ✔

Pov. Ana

Luis ya se fue como quedamos hoy, tenía que hacer algunas cosas como él, también falta poco para el viernes, estoy tan perdida que me sorprendo cuando se escucha un golpe en la cochera, voy discretamente donde hay una nota en el limpiaparabrisas de mi coche.

Lo agarro, es una carta, no está escrita, solo está pegado recorte de periódico formando una oración, al principio no lo entiendo, pero me doy cuenta de que es una dirección.

No se me hace conocida, saco mi celular para buscar la dirección, pero es un descampado, no sé si ir o no, busco un número que no quiero llamarlo, pero él sabe de esto al segundo timbre contesta.

—¿Ana?

—Sí, es verdad lo que me ha dicho esa vez quiero que veas donde es esta dirección, me llego recién -cuelgo y le envío la dirección, no sé quién es, pero está cerca muy cerca.

Voy a la zona de cámaras, pero justo esa cámara está tapada por una estampa, voy a sacarla, pero antes miro el video. Es un hombre con una capucha negra, no se ve nada, el único que es tan infantil para hacer esto es él, voy a sacarla cuando recibo un mensaje pidiendo que vaya, que es urgente.

Me sorprende, agarro la moto, salgo de ahí, no sin antes cerrar toda la casa, manejo hasta el mall, pero cambió de vehículo a una camioneta blanca con lunas polarizadas.

Escondo la moto en el mall ya estoy llegando a mi destino, veo si no me persigue nadie, si es como lo espere, nadie está a mi atrás bajo tapándome con la capucha, cuando estoy por tocar la puerta la abren rápido haciéndome entrar en ella.

Me veo a mi alrededor quedándome congelada.

—Ja Jazmín -me duele al nombrarla, más su aspecto.

No sé en qué momento he comenzado a tartamudear, mi voz está entrecortada, siento una presión en mi pecho, un nudo que no me deja hablar.

Siento mis ojos cristalizarse por lo que veo, ella volteó a verme para romper a llorar, se arrastra a mí, corro a ella para abrazarla, no la he visto más de dos años y encontrarla así.

Está con el cabello enredado, rastros de sangre en su cuerpo, su ropa está sucia, sus manos tiemblan a cada rato, su mirada perdió el toque que la representaba.

— ¿Qué te paso?

—Ana está aquí, él fue quien me trajo, te encontró, por eso no me necesita, ya no me necesita, me juro que yo tú ibas a pagar por lo que le hiciste Ana, yo no te traicione, nunca te traicionara cuando mire que Eric, te traiciono corrí por decepción a él. Caer tan bajo, pero ese fue mi mayor error huir, en ese momento me secuestraron, él me secuestró, me tuvo, intenté huir como tú me enseñaste, pero está con dos tipos, siempre está con dos tipos si-em-pre.

Después cae rendida en mis brazos, llamó a Eric, que venga para ayudarla al escucharme, viene corriendo a mí.

—Tenemos que llevarla a un hospital

—¡No!

—¿Cómo que no Ana? ¡Va a morir!

—Llévale arriba, voy a llamar un médico.

—Joder Ana, mira con esta, no va a necesitar un solo médico.

—Eric, son buscados en todo el puto país, los van a agarrar, voy a llamar a un grupo de Médicos y van a venir rápido, Quieres estar con ella o pudrirte en una puta prisión -solo asiente para subir a un cuarto, voy en busca de mi celular y lo llamó. Voy en busca de mi celular para llamarlo, no tengo precisión, siento que me voy a derrumbar.

—Cora... -lo interrumpo.

—No estoy para idioteces, quiero ahora un grupo de médicos de los mejores, ahora te mando la dirección -cuelgo, en menos de cinco minutos está aquí un grupos de Médicos más él.

—¿Qué es lo que pasó?

—Ya la encontramos Yoshi -rompo en llanto en sus brazos.

—¿A Quién?

—Jazmín -se arrodilla llevándose las manos a su cara, cuando se levanta, me sujeta de los hombros apretándome.

—Dime que es verdad.

—No jugaría con eso.

—Ana encontramos a mi hermana por fin.

Se recuesta llorando en mi hombro, sé que debo estar feliz, pero no es lo contrario, me entra una angustia enorme, tengo que hacer que todas las personas que quiero se vayan de mí lo más rápido posible.