Capítulo 2 ✔

8.8K 380 11
                                    

Pov. Ana

Pasamos limpiando casi todo el día porque mi cuarto estaba lleno de cosas, de Antoni tenía ropa de él y más cosas, Noelia estuvo conmigo en todo.

—Ana, ya es hora -dice saliendo con un bote de basura.

—En serio Noe ¿por qué no la dejamos en un cajón?

—Porque si no lo quemas no vas a superar, te conozco más que a mí misma, sé que cualquier día que veas estas fotos vas a entrar en depresión -menciona acercándose para quitarme las fotos.

—Aunque quisiera, no puedo, aún lo amo. Sé que va a venir a pedirme disculpas, que va a venir arrodillándose a pedirme perdón.

A veces deseo que le duela todo el cuerpo y que no tenga opción y venga a mí para que lo cuide, pero al rato me siento peor, me arrepiento porque sé que no lo debo perdonar.

Pero no puedo obligarme a que olvide todo lo que pasamos en solo dos días, fueron dos años en los cuales me entregue a él y él no lo supo valorar -la voz de mi cabeza me dice estúpida por llorar de nuevo.

—Aunque no lo creas, estoy tratando de entenderte, pero antes que todo debes quererte a ti misma y sé que me debes odiar ahora por decirte todo esto.

Pero yo soy consciente que te entregaste a él, no solamente sexualmente hablando si no entregaste lo más valioso que es tu alma y no lo aprecio.

Si te sigues aferrado a esos recuerdos no vas a poder superarlo, no pienses que no me di cuenta de las cartas que tienes escondidas en el cuarto, no te voy a obligar a hacerlo, pero no aguanto verte encerrada llorando por alguien que no lo vale. -cuando termina me abraza.

—No quiero sentir esto, no quiero volver a depender de su presencia -limpio mis lágrimas- sabes tráelas, ya sabes dónde están, yo te espero aquí.

—Segura no quiero que lo hagas porque te esté obligando Ana -dice agarrándome.

—Sí, estoy segura, ya basta, me juré que nunca iba a estar a si por un hombre -digo con toda mi seguridad.

Ella sube con rapidez antes de cambiar de opinión, la vocecita de mi cabeza celebra por mi decisión.

Pensar en las cosas que puedo hacer, una de ellas son ir de fiestas, cosa que a Antoni no le gustaba porque, según él, varios se me acercaban.

Voy al patio para prender el contenedor que tenemos para cualquier cosa.

—¡Aquí están! -grita-

—Ya era hora -digo sujetando la caja.

—¿Estás lista? -dice sobando mi espalda.

Al abrir la caja son reveladas las primeras cartas de nuestra relación, en las cuales juraba amor eterno, ahora solo me río de todo esto.

Las palabras falsas que eran dedicadas, cada foto demuestra el amor que existió, se me escapa una lágrima antes de tirarlo.

—ya está gracias, me siento mejor, mañana también me vas a ayudar en algo.

—ante todo te tengo que contar algo y es importante, quiero que te enteres por mí a que te cuente los demás -dice triste.

Mi mente solo me dice que ella es con la que me engaño Antoni, pero otra cosa me dice que debo escucharla.

—Eres tú con la que me engaña Antoni -digo desesperada.

En lo que me convertistes【En edición】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora