Pov Ana
No sé cuánto tiempo estoy aquí, podría decir que el tiempo se me hizo largo, pero no, he gozado cada minuto que estoy aquí, me he preguntado varias cosas.
Quizás fue algo egoísta, no haberme quedado a esperar, pero no aguantaba toda la ansiedad, estoy más tranquila aquí, sin saber, sin conocer, se podría decir que es como un retiro, pero es un lugar más especial.
Que al apagarse las luces refleja la hermosa luz de la noche que me acompaña con una línea completa de constelación, el cual al frente se traslada un camión sin miedo alguno de pasar por la completa oscuridad, pequeñas luciérnagas van alumbrando el camino como un laburo y que solo ellos pueden cumplirlos.
Es toda una velada encantadora, sería mejor si estuviera acompañada, su imagen pasa como un rayo por mi mente, termino mi taza de café, el cual su sabor amargo pasa por mi garganta como una dicha.
Observó el camino de adelante, que solo hay una luz pequeña y sencilla, seguro serán los campesinos terminando su jornada laboral.
Este es un lugar mágico en toda su trayectoria, solo el reflejo de la luna me acompaña, las estrellas se van desalineando para compartir con todo el cielo.
Se escuchan los ladridos de los perros regañando a todo aquel que pase por su territorio, las ramas rugen por el escaso viento que molesta su descanso, ya no se logra a escuchar completamente nada.
Está comenzado pasar viento, estaba por ingresar a la recámara cuando soy alumbrada por una fuerte luz que me deja en ceguera por unos escasos segundos, trato de disuadir de quien se trata, pero soy acorralada entre sus brazos.
No hay duda de quién es, puedo reconocerlo con solo el olor de su cuerpo, me estrujé entre sus brazos como si fuera a correr, pero hoy entendí que yo también lo necesito.
Juraba que cuando le iba a volver a ver ya no sentiría absolutamente nada, que no me movería un solo pelo, pero no es así.
Con solo su presencia me hace delirar, hace que mi cuerpo disfrute de su toque, cosa que antes me asustaba, pero ahora ya no me importa nada, ya no me importa la elegancia o la formalidad, solo me importa los dos.
Como si fuera irreal me besa, esos labios, los cuales no toque casi medio año, los cuales extraño con esa pasión que juraba que nunca volvería a sentir, que con un solo beso puede marcar el fin de todo problema que alguna vez tuvimos.
Las mentiras, traiciones, engaños y demás se fueron al carajo por completo, no pienso separarme de él, ni hoy, ni nunca.
Al separarme tocó sus mejillas que estaban bañadas por sus lágrimas.
—No me vuelvas a dejar, por favor.
—No me voy a ir a ningún lado esta vez, Amor -me mira sorprendido por lo que acabo de decir hasta yo misma estoy igual de sorprendida.
—Joder, te extrañé tanto, qué me estaba volviendo un demente, no sé qué hubiera hecho si no estabas aquí -me abraza, su sollozo es una puñalada para mí.
—No volveré a escaparme de esa manera, pero entiéndame, no sabía lo que tenía que hacer, tenía un mundo en mi cabeza... -me calla.
—Te extrañé como no tienes idea, Amor.
No aguanto estar separada de él más tiempo, me lanzo sobre él, él no se queda atrás, me coge de la cintura enrollándome a su cintura.
El día de hoy he comprendido que:
En el amor absolutamente nada es de color rosa, nunca es de color de rosa, siempre es una lucha de dos personas que pierden en una batalla manchando toda la superficie de un color rojo intensó.
El rojo representa el amor por la lucha de los dos egos de la pareja, el cual es un rojo puro sin ningún daño colateral, solo rojo.
Pero es sometido en varias localizaciones, solo hay que intentar ganar para perder, ganar esperanza y perder en la locura de tu acompañante.
No existe un manual que nos describa que tenemos que hacer para encontrar un amor de revista ni un amor verdadero y qué hacer con él.
Y si existiera cómo sabríamos que es completamente garantizado, porque su matrimonio o relación es una maravilla, puede que sean felices a los ojos del público, pero a escondidas donde nadie los mire cómo sabríamos que son felices.
Exacto no se sabe en su totalidad, solo es aceptar que el amor es una lucha que ninguno va a ganar, sino perder, pero perder juntos ahogándose en la locura del tan llamado Amor.
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En lo que me convertistes【En edición】
Teen FictionEstoy corriendo sin rumbo, no pienso ir a casa, no sé donde irme justo en estos momentos, a pesar no tengo muchas opciones, este vestido no me deja nada de movimiento. Mi mente me traiciona haciendo que varias preguntas pasen por ella, ¿Cuándo se co...