23 julio

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Llevábamos casi un mes de vacaciones en mi chateau de las Tumbas Esmeraldas (bueno, para aquel entonces era el único que tenía), pero no nos cansábamos de las vistas. Y menos ese día que celebrábamos los nueve años de One Direction y el castillo estaba lleno de ajetreo debido a los preparativos.

—¿A qué hora es la fiesta? —preguntó Melissa.

—Si te soy sincera, ni idea —respondí.

—¿Cómo que no tienes ni idea, Asha Horan? —rio Vik.

—¿Sabes? Ha llegado un punto en el que llamarme Horan ya no es por Niall.

Melissa y Vik me miraron incrédulos.

—A las cinco empezará a venir la gente —dije haciendo una mueca.

—¿Van a venir los otros Wolves también?

—No.

—Menos mal que no tenías ni idea —sonrió Melissa.

—Sí, bueno, es que no me acordaba.

—Ya...

—Pero antes de empezar la fiesta oficial del noveno aniversario de la banda, haremos una pre fiesta.

—¿Cómo que una pre fiesta? ¿Eso es algo que se hace en tu mundo? —preguntó Jordan Howe dirigiéndose a nosotros.

—No —me carcajeé—. Es que los de One D llegarán los últimos y mientras cantaremos y bailaremos otras cosas. Pero no mucho rato.

Jordan era el sobrino de Nate, tenía dieciocho años, el pelo negro y los ojos grises azulados de su tío. 

—Promete la noche Horancita.

—Sí, mucho.

El veintitrés de julio, la banda de la que provenía mi tutor legal cumplía nueve años desde su creación, y toda La Gran Familia, junto con los chicos fereldenos que estaban de vacaciones con nosotros, íbamos a celebrarlo en el Château de Horan.

Lo que ninguno de nosotros sabíamos, ni mucho menos nos esperábamos, era que además de hacer una pequeña fiesta antes, la cosa se alargaría hasta después de las doce con la llegada de una emocionante noticia.

Tal y como se había planeado, a las cinco llegaron las primeras personas, que eran, ni más ni menos que: Chris Hemsworth, Tom Hiddleston y Tom Holland.

—Bienvenidos chicos. Welcome —sonreí—. Que pronto habéis llegado, son las cinco en punto.

—Sí —Tom Hiddleston, que era el único que dominaba el idioma al cien por cien, fue quien tomó la palabra—. Teníamos ganas de bailar.

—¿Ah sí? —Melissa abrió mucho los ojos sorprendida.

—¿Ha sido idea vuestra lo de la pre fiesta, verdad? —imaginó Vik.

—Exacto —sonrió Tom.

—Pues seguidme, os llevaré a la sala de baile.

Vik y Melissa se quedaron cerca del vestíbulo por si venía más gente.

—¿Los otros Wolves vendrán también? —Tom Holland aún no tenía el mismo nivel que Hiddleston hablando español, pero había estado estudiando el idioma y los progresos que había hecho desde que lo conocimos eran muy grandes.

—No Tom, no podrás ver a Emma hoy —puntualicé.

Los otros dos actores de Marvel miraron a su compañero y luego se miraron entre ellos.

But... No he preguntado co...

—¿Concretamente?

—What?

—Specifically.

—Yes, that is the word —sonrió—. No he preguntado concretamente por ella— dijo, pronunciando el «concretamente» con un poco de dificultad.

—Yo sé que en el fondo sí —no quise que se me escapara una sonrisa, pero fue inevitable.

17:45h

No mucho rato después, el chateau fue llenándose de gente. Y por fin, los invitados de honor. La tarde transcurría con alegría y poco a poco se iba haciendo de noche. Siguiendo el plan, aunque no siempre cantaban los de One D, solo sonaba música suya, como seguramente era de esperar. Una de las escenas más bonitas, fue, sin duda, cuando cantaron la canción de Moments y los cinco integrantes escogieron a una chica para bailarla, quién al final también sumaba su voz a la de ellos. ¿Las elegidas? Fácil de deducir, Harry escogió a Evelyn; Liam a Melissa; Zayn a mi prima Laura; y para sorpresa de todos, Niall escogió a Kate, lo que a Louis le vino perfecto para escogerme a mí. Toda La Gran Familia estábamos allí, de fiesta, de celebración, sin duda, era la ocasión perfecta para una noticia del calibre como la que íbamos a recibir.

La Gran Familia. El otro ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora