La Gran Familia. El otro lado

5 noviembre

No todos los Wolves formaban parte del grupo desde el principio. Los Wolves originales (por así decirlo) eran, Alba, Adri, Emma, Pau, David, Mel, Vik, Iker, Kris, Marce y yo. Porque íbamos al mismo instituto, al mismo curso, y porque fuimos los que actuamos en el festival de Navidad que nuestro antiguo instituto organizó en el auditorio de la ciudad. Uno de los hechos que nos marcó como grupo, fue la casi disolución que sufrimos a menos de una semana de la actuación. Ya llevábamos mucho tiempo acumulando tensión, y al final, todo explotó.

Ribas y Alba no podían ni verse, y el chico también estaba peleado con Melissa, con quién no se hablaba, y con David. Alba no se hablaba con Adri, y me tenían a mí en medio, odiándolo y queriéndolo constantemente. Kris tampoco se hablaba con David. Emma no se llevaba bien con Marce, y ella iba a su bola.

Estuvimos, no solo a punto de cancelar la actuación, sino también de disolver el grupo, que para aquel entonces aún no tenía ni nombre (nos conocían simplemente como: «la pandilla»), pese a que poco le faltaba. De no ser por Pau, a quién lo llamamos desde ese día, nuestro salvador, el mal hubiera reinado sobre el joven grupo. Pese a ser probablemente el caso más crítico, haciendo honor a su personalidad y forma de ser, Ribas nos reunió a todos una mañana justo antes de entrar al instituto, y el discurso que pronunció, inventado sobre la marcha, además de salvar la que fue la primera actuación oficial del grupo, y que casi estaba cancelada, sacó a los Wolves hacia delante y solucionó los problemas internos que teníamos entre nosotros.

Aquel hecho quedó grabado a fuego en nuestras mentes y corazones. Puede que aquella noche, se creara el grupo de Wolves de manera oficial (ya que fue el título de la canción que bailamos y cantamos lo que le dio el nombre al grupo) pero la verdad, es que los Wolves se crearon gracias a él, cosa por la cual le debíamos mucho. Por desgracia, los problemas no se evaporaron como el agua.

Después de que Adri confesara su amor eterno por Alba, las tornas cambiaron; yo y Adri no nos hablábamos, y Alba era la que estaba metida en medio, intentando mediar sobre algo que solo él y yo podíamos solucionar. Aquella pelea, junto con un explorador de Evelyn que Adri mató, fue lo que lo condenó fuera de La Gran Familia, cosa de la que se arrepentiría toda la vida. Pero aunque Adri y yo acabamos por solucionarlo, después de mucho trabajo de por medio, claro, los problemas de los Wolves no acabaron ahí.

A pesar de que la relación de Pau con Melissa se había suavizado, las cosas con Alba seguían tensas, cosa que al final, también acabó por solucionarse. Algo que nunca pasó con Marce.

El poco interés que la polaca mostraba por los que se supone que éramos sus mejores amigos, acabó por agotar la paciencia de todos. Sobre todo, lo que más nos molestaba era que pese a que (a excepción de Alba, Liam, David y Kris) la conocíamos de toda la vida, fue imposible hablar del tema con ella. Siempre estaba a la defensiva y ponía como excusa que tenía muchos problemas. Problemas que ninguno de nosotros sabíamos de qué iban, por lo que tampoco podíamos hacer nada para ayudarla. Si tantos problemas tenía, que no se hubiera apuntado a la causa.

Ribas y Marce no formaban parte del grupo, fueron ellos mismos los que quisieron unirse. Entonces, si Marce tenía tantos problemas desde siempre como decía ella, que se lo hubiera pensado antes. Un día, los Wolves fuimos a la entrega de premios de un concurso de booktrailers al que los profesores nos habían apuntado. Después de hablarlo durante mucho tiempo, aquel día aprovechamos el tiempo libre antes de entrar en el cine, (dónde se hacía la entrega y se visualizaban los trabajos) para hablar con ella, y comunicarle no viniera más a entrenar, y que la echábamos del grupo. Marce juró que seguiría por su cuenta, aunque nadie la creyó.

En junio de ese mismo año, las tensiones amorosas que había habido siempre entre Iker y Lola llegaron a su punto culminante, y en las fiestas del barrio, se liaron. Después de hacerme hacer varias veces de intermediaria, por parte de ambos, por fin decidieron empezar una relación. Y aquello acabó por que Lola se uniera al grupo.