31 diciembre

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Cada uno salió en la foto familiar de la manera que quiso. Después de la foto, Niall y yo hablamos con los famosos para saber al cien por cien si iban a marcharse o no. Afortunadamente, todos coincidieron en que la familia debía permanecer si más no junta, pese a que se estuviera desuniendo. Tom Hiddleston tenía planeado quedarse hasta que el rodaje de Loki empezara y se fuera con Andrea y conmigo, así que por él no suponía un problema.

—Alguien tendrá que vigilaros a Andrea —había dicho.

Y tal y como había anunciado el día anterior, yo y Niall nos reunimos en mi habitación en la sede de Denerim para hablar sobre quien se quedaría al mando cuando yo me fuera, a parte de él.

—No te voy a mentir, la primera persona en la que había pensado ha sido Cailan.

—¿Yo y Cailan trabajando juntos? —preguntó Niall casi riendo.

            —Exacto, así que lo he descartado de inmediato. Mi segundo candidato, que es quien se quedará, es JD.

—Ah, o sea no lo vamos a decidir entre los dos, lo vas a decidir tú.

—Claro... A ver, si habías pensado en alguien tú puedes decirlo igualmente.

—Mmm... Bueno la verdad es que no había pensado en nadie.

—Pues ya está. Vamos a buscar a JD.

Antes de dedicarnos a dar vueltas por todas las instalaciones, Niall llamó al chico y nos reunimos con él en la sala de estar.

—Enhorabuena, has sido el elegido para ocupar el puesto de representante en funciones, sobre todo, de la familia hasta nueva fecha. Ya sabes de que va la cosa así que no vamos a explicarte nada —sonreí.

Niall me miró divertido. JD le echó una mirada al irlandés y éste levanto las cejas.

—Si ves que no puedes hacerlo, puedo pensar en otra persona.

—Es una gran responsabilidad —confesó—. Está claro que no llevo el mismo tiempo que Theron en la familia, y que tengo diez años menos.

—Los veintiuno son los nuevos dieciocho.

Ahora era yo la que miraba a Niall divertida.

—Bueno a ver, aún no tengo los veintiuno, este año he cumplido veinte.

—Bueno... lo que sea. ¿Te apuntas o no?

—Mmm, vale, será complicado, pero creo que puedo hacerlo.

—¡Perfecto! —exclamé interviniendo de nuevo—. Voy a escribir el mensaje en el grupo.

LA GRAN FAMILIA GROUP CHAT

A petición de la mayoría de la familia e insistencia de mí, que soy la que manda, de no cambiar a Theron como representante, sino darle unas vacaciones, os comunico que JD será el representante en funciones. Si no os gusta, primero os vais a la mierda y seguidamente me podré a pensar en otra persona.


Ya fuera por no llevarme la contraria o porque de verdad les parecía bien, todos estuvieron de acuerdo.

Por primera vez desde que podemos celebrar las vacaciones navideñas en Thedas, toda La Gran Familia iba a reunirse en Feudo aquella noche para celebrar el año nuevo. La mayoría de nosotros pululábamos por allí todo el día mientras que otros solo venían a la hora de cenar. Harry Styles y Tom Hiddleston eran los únicos hasta la fecha que se habían quedado allí para celebrar el año nuevo, los demás, siempre se iban después de la foto. Ese año para uno de ellos las circunstancias era diferentes, Cristian Portugués también se quedaba con nosotros cada año, pero él vivía en Girona ya que jugaba en el equipo de ahí. Aquella temporada el jugador había decidido irse, pero últimamente pasaba más tiempo en Girona que en San Sebastián, donde vivía ahora. Pere Pons también se había cambiado de equipo, aunque el suyo era vecino del de Portu, y también solía venir mucho. Le habíamos sugerido al jugador de Murcia que aprovechara los pisos nuevos que se habían hecho para que se comprara uno, ya que la vivienda donde se alojaba mientras jugaba en Girona la había vendido y muchas veces venía con Judith, que se quedaba con él en la sede a falta de una casa propia, pero no lo tenía muy claro. Era muy temprano cuando nos levantamos todos para la foto, y después de cumplir nuestros deberes como jefes, yo fui a desayunar al gran salón de Feudo, también conocido como el salón del trono, o gran comedor, mientras que Niall se quedó en la taberna.

Pese al frío que hacía allí, fruto sin duda de la nieve de invierno (porque Feudo estaba situado en mitad de las Montañas de la Espalda Helada y el paisaje permanecía nevado todo el año, pero no hacía frío siempre) Nelika y Natasha iban en manga corta. Las rusas estaban acostumbradas a un frío como mínimo el doble del que hacía allí, así que estaban bien. Desde primera hora, Feudo estaba lleno de juegos de mesa, así que los que pasábamos allí todo el día no nos aburríamos. Niall tenía planeado comprar más para dejarlos allí, y no tener que ir cada año para arriba y para abajo con las cajas de los juegos que eran muchos, y de todos los tamaños que podían existir. Nelika y Natasha estaban sentadas con más gente de la familia, la diferencia era que la humana estaba jugando y Nelika no. La enana se alejó de allí un momento y mientras volvía, sintió un hormigueo muy fuerte en la columna vertebral que casi hace que pierda el equilibrio, aunque no tardó en recomponerse. Corrió de nuevo al lado de su mejor amiga y la obligó a mirarla a los ojos.

—¿Qué pasa? 

Un escalofrío recorrió el cuerpo de Natasha de arriba abajo al ver la mirada preocupada que mostraba Nelika. Notaba como si alguien se hubiera acercado a su oreja para susurrarle algo, pero aquello era imposible, allí no había nadie lo suficientemente cerca como para causar un sentimiento así, y la enana no podía ser porque la tenía delante y no movía la boca. Apartó sus ojos de los de su mejor amiga para probar si sus poderes estaban causando dicha sensación, pero no lo eran. Y de repente, lo escuchó. Un susurro que no venía en absoluto, ni de Nelika, ni de ninguno de los presentes en el salón, pero cuya voz le resultaba escalofriantemente conocida.

—Sus vidas están a punto de cambiar... para siempre.

 para siempre

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