Han pasado diez años desde que finalizó la edición más surrealista de Operación Triunfo y la vida no ha sido igual de dulce para unos que para otros.
Diez años después del boom que supuso su paso por el programa, Samantha se reencuentra con un Flavi...
El rodaje del reencuentro empezaba el lunes uno de abril.
Unos días antes, Samantha recibió un correo de Gestmusic con el billete de AVE desde Atocha hasta Sants, algo más de dos horas con parada en Zaragoza. Coche cinco, asiento 12A. No ponía nada de acompañantes, así que supuso que Flavio habría recibido su correo con su billete correspondiente. Decidió hacer de tripas corazón y ponerse en contacto con él.
No habían vuelto a verse o hablar desde la discusión en la calle, algo que, obviamente, había trascendido a los medios. En esa ocasión, Samantha había intentado no leer en demasía lo que se decía de ellos, pero la noticia era clara: estaban juntos y habían tenido su primera discusión de pareja en público. Cuando lo vio, quiso meterse debajo de una piedra por hacerle pasar ese bochorno público a él, cuando en realidad todo lo que le había dicho era para ayudarla.
[10:55h] Samantha: Buenos días. Te ha llegado el correo de Gestmusic con la información del transporte?
Envió el mensaje y se sorprendió incluso a sí misma de lo descarada que era a veces. Llevaba cerca de veinte días sin hablarle al zagal y le escribía únicamente para eso y como si no hubiera pasado nada.
Flavio no leyó el mensaje hasta bien entrada la tarde, y cuando el teléfono de la valenciana pitó con el sonido de la notificación, ya no recordaba ni que estaba esperando una respuesta.
[19:11h] Flavio: Sí, lo he recibido. Todo correcto. ¿Tú?
Advirtió que el chico se mostraba más frío que de costumbre. No le había devuelto el saludo y escribía sin emoticonos. No se le podía reprochar que siguiera enfadado, la verdad.
[19:12h] Samantha: También. Tengo el asiento 12A, imagino que tendrás el 12B...
[19:12h] Flavio: No te lo ha dicho Pablo?
[19:12h] Samantha: El qué?
[19:12h] Flavio: Le pedí que me cogiera un vuelo al final.
Samantha leyó el mensaje atónita.
[19:14h] Flavio: Es más cómodo.
Lo fácil habría sido contestarle alguna evasiva, algo como "ah, pues nos vemos allí", pero Sam no era fácil, ni se andaba por las ramas.
[19:15h] Samantha: ¿Has pedido el cambio para no ir conmigo?
Flavio no contestó inmediatamente, pese a haber leído el mensaje al instante porque ni siquiera había salido del chat. Parecía estar pensando una respuesta, o una mentira.
[19:17h] Flavio: Claro que no.
[19:17h] Samantha: Mientes fatal, Flavio.
[19:17h] Flavio: Piensa lo que quieras.
Samantha volvió a mirar el teléfono como si no fuera capaz de leer bien lo que ponía en él.
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