Brothers In L(ove)aw

Capítulo 2: ¡Ataca!

Al dia siguiente desperté de la mejor forma posible, Fortuna lamía toda mi cara sin descanso, yo me incorporé acariciandola para relajarla y una vez se calmó me levanté de la cama para ir a uno de los espejos y peinarme, como hacía cada día. El ambiente estaba tranquilo y yo disfrutaba del silecio, pero no duró mucho ya que unas criadas entraron para limpiar mi habitación y hacerme la cama. -Señor, lamento molestarle pero Fortuna esta tumbada en la cama y no puedo hacerla con ella encima- La chica que me lo dijo parecía realmente asustada de hablar, yo sonreí intentando mostrarle que no debia temerme y me acerqué a la cama para quitar a Fortuna de encima. La sonreí de forma cortes y me fui de alli con Fortuna ya que ambos debiamos desayunar.
Lleve a mi perra a uno de los salones, que era donde comúnmente desayunabamos y me senté en la mesa esperando mi desayuno que no tardó en llegar, y que por supuesto dividi para que Fortuna tuviera que comer, ella estaba en el suelo comiendo tranquilamente cuando mi padre llegó. -Sabes perfectamente que no debe comer aquí- Le ignore completamente y seguí desayunando. Justo cuando me levanté para irme porque habia terminado me choqué con Fernando. Él se disculpo de inmediato por supuesto, pero yo no queria verlo, mi hermana no le habia elegido para casarse con él. -¿Cuando vuelves a tu castillo?- Él pareció sorprendido ante esa pregunta, luego miró a mi padre y ambos permanecieron en un silencio bastante incomodo. Yo miré a mi padre esperando una respuesta, y después de ignorarme durante unos segundos suspiro y me pidió que me sentase. Yo me senté obedeciendolo y Fernando sentó a mi lado algo nervioso. -Hijo, Fernando se marchará mañana... Se marchará y tu hermana le acompañará- Yo abrí la boca pero ninguna palabra salió de mi boca, no podía creerme que Anna se fuese a marchar al día siguiente, se conocían de dos dias. -¿Cuando será la boda?- Miré con rabia al futuro marido de mi hermana pero este no se atrevió a responder, asi que mi padre respondió por él.
Iba a llevarse a mi hermana y ni siquiera se atrevía a responderme. -La boda no tiene fecha todavía, Anna va allí para que se conozcan más y para organizarla... Serás de los primeros notificados cuando haya fecha, te lo aseguro- Mi sangre se calentó al escuchar eso, iban a mandar a mi hermana a un castillo ajeno sola. Miré a Fortuna y sonreí para levantarme, me iba a marchar pero antes de hacerlo me acerqué a Fortuna y susurre esperando que obedecería. -¡Ataca!- Ella se enfureció y se lanzó sin pensarlo contra la persona que tenía delante, que evidentemente era mi cuñado. Fortuna comenzó a morderle el brazo mientras Fernando gritaba e intentaba apartarla, yo sonreía mirando esa escena hasta que mi padre se acercó a ellos y tiró a Fortuna contra la pared. Yo fui corriendo a comprobar que estaba bien, por suerte estaba perfectamente, al girarme vi como ni Fernando ni mi padre estaban, debian haber ido a por doctores. Yo acaricié a Fortuna y me la lleve al jardín real, comenzamos a jugar a que yo le tiraba un palo pero la diversión se vio interrumpida cuando mi padre y Fernando aparecieron, claro que este ultimo apareció con el brazo vendado. -Disculpate ahora mismo, nunca debí permitir que te quedases a esa bestia- Mi padre estaba realmente muy enfadado, yo solo podia mirar el brazo de Fernando, tampoco habia sido tan cruel, sabía que Fortuna no le haría tanto daño. Solo era una advertencia.
-Estoy bien, seguro que ha olido la comida de mi mano y por eso me ha atacado... Dudo que Mateo se atreviera a hacer eso- Fernando intentaba calmar a mi padre, cosa que no entendí, si a mi me mandaban a un perro para que me mordiese nunca respondería asi. Yo sonreí nervioso a Fernando ya que me sentía estupido por no entender porque se comportaba asi, mi padre no tardo en irse asi que nos quedamos solos. Quise preguntarle porque me habia encubierto pero mientras pensaba si hacerlo él se acercó a mi muy serio y susurró. -Vuelve a atacarme con la perra y no solo la mataré, sino que me encargaré personalmente de que te la comas- Luego sonrió despeinandome y se fue, no me arrepentía para nada, gracias a eso habia visto la faceta peligrosa de Fernando. Acaricié a Fortuna por su buen comportamiento y seguí jugando con ella, su pelaje cada dia era más brillante. Era realmente una perra hermosa, mientras jugabamos alguien nos interrumpió de nuevo, era mi hermana Anna.
Por alguna razón ella parecía realmente muy enfadada, se acercó a mi muy seria y comenzó a regañarme. -No puedes mandar a Fortuna a atacar a mi prometido- Esa frase me hizo dudar, ¿acaso le habia pedido la mano? Mi cara se puso palida al ver que habia un anillo en la mano de mi hermana. -¡No puedes casarte con él!- Yo cerré mi puño con fuerza intentando contener mi enfado por esta boda. Anna sonrió negando con la cabeza y simplemente suspiró. -¿Porque no?- Esa pregunta realmente me impactó, yo pensaba que ella no quería casarse con aquel chico. No me dio tiempo a responder porque ella siguió hablando. -Fernando es un joven hermoso, es gracioso y si, tal vez no es el hombre perfecto para mi. Pero padre y madre me han explicado desde niña que a los 15 contraeria matrimonio con un hombre... Siempre pensé que sería un hombre mayor, orondo y tan feo que me darian ganas de vomitar cada mañana... Pero Fernando no es asi, y eso realmente me hace feliz- Yo agaché la mirada avergonzado, estaba defendiendo a alguien que no quería ser defendido. Anna me hizo sentir tan mal que fui a buscar a su prometido después de dejar a Fortuna en mi habitación. Al llegar a su habitación él estaba tomandose las medidas para un traje. -Tranquilo, no es para el traje de la boda- Él sonreía muy molesto por mi presencia, yo dude unos segundos pero finalmente le pedí perdón, él al oirme pedir perdón echo al sastre y después de vestirse de nuevo se acercó a mi sonriendo y luego miró su cama.
-Sientate- Yo no solía dejarme controlar pero en este caso obedecí, Anna tenia razón, él era bastante guapo. -Mi brazo ahora duele, y tú harás algo para compensarme si quieres mi perdón- Mi rostro se tensó lleno de miedo y mantuve la respiración incoscientemente de lo asustado que estaba. Desde la amenaza de antes realmente habia comenzado a intimidarme. Fernando me miraba en silencio, parecía estar decidiendo mi destino... O más bien, el castigo que me haría pasar por haber echo a Fortuna atacarle. -Esta tarde saldremos a cazar- Al oir eso mi miedo solo aumento, sabia que mi padre habia matado a varios señores que conocía con la excusa de ir de caza. Luego volvía y decía que habia habido un accidente de caza, pero era obvio que no era asi. Fernando se marchó de la habitación y yo me quede allí sentado envuelto en mis pensamientos y sobretodo lleno de miedo...