I

4.9K 97 14
                                    

- ¡Maldita sea! ¿Dónde están mis llaves?- Dije enojada buscando por todos lados.

Derrepente un pequeño recuerdo llegó a mi memoria de que estaban en la mesa.
Corrí a la mesa, pero nada...

Volví a buscar en mi mochila y ahí las encontre.

Era el primer viernes de mi último semestre de preparatoria, tengo las mejores calificaciones y las cosas deben de seguir así si quería impresionar a la universidad de medicina dónde próximamente estudiaría una carrera.

Cuando llegue al salón Fernanda quitó su mochila de la butaca frente a ella para darme el lugar.

- Es tarde. - Dijo hojeando su revista.

- Ya se, no encontraba mis llaves.

- Que raro. - Dijo de forma irónica. Ya que para ser sinceros los olvidos eran parte de mi día a dia.

El profesor entro al aula y me concentre en todas las clases hasta el final del día.

- Hay una fiesta en la tarde, ¿Vamos? - Dijo Fer emocionada.

-No creo que sea buena idea, tengo que estudiar.

- Es todo lo que haces, también ocupas salir, ver otras cosas, distraerte.

- Está bien, dormiré un rato llegando al depa y te digo si tengo ganas. - dije mirando la hora.

- Te alistas temprano!

Al llegar al depa, lo primero que hice fue ir a dormir un rato hasta que me desperté aburrida.

- Tal vez Fer tiene razón... - Susurré al notar que no tenia nada que hacer.

Busque un outfit cómodo pero bonito y le dije a Fer que si iría con ella. A los minutos llegó Enrique por nosotras.

Cuando llegamos a la fiesta el lugar estaba lleno, había muchos autos lujos y gente muy bien vestida.

- ¿Fernanda? ¿De quién es la fiesta?

- De un amigo de Enrique.

Mire extrañada a la multitud mientras Enrique estacionaba su camioneta.

En cuanto nos bajamos Enrique camino hacia Fer con una sonrisa en el rostro para después rodearla con sus brazos y darle un piquito rápido.

- Bien, entremos. - Dijo Enrique con una sonrisa tomando a Fer de la mano.

- Si - Dije amable, la verdad no podía decir si me agradaba Enrique o no, no sabía casi nada de él, incluso era poco lo que Fer sabía de él, así que todavía no podía formular una idea. Pero parecía hacer feliz a Fer, y por lo menos desde que se conocieron nunca la había escuchado quejarse de su relación Así que si ella era feliz, yo era feliz.

- Pasen, ¿Que quieren tomar? - Dijo un joven saludando con un fuerte abrazo a Enrique. - Me alegra que vinieras, mi amor.

- No me podía perder tu fiesta, amors. Mira, te presento a tu socia... O que diga, mi novia.

El chico mostró una amplia sonrisa, realmente es guapo, tanto que comencé a ponerme algo nerviosa a su lado.

Fer también sonrió. - Así que tú eres el famoso Marco.

- ¿Que te ha hablado mi mujer de mi?

- Pura cosa buena. - Dijo Fer.

- Oye y quién...

- Bueno, ahorita venimos, iremos por algo de tomar. - Interrumpió Fer a Marco.

- Pero...

Antes de que terminara Fer me tomo de la muñeca y me arrastró hacia la barra.

No me olvides Markitos Toys -Terminada- Parte IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora