005.

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005. C H O C O - C A F É

elaine prewett

La temporada de Quidditch estaba por comenzar y no estaba muy entusiasmada. Amo el Quidditch, no me mal interpreten, pero los entrenamientos acaban conmigo.

Ser la cazadora no era nada complicado, sólo debía tener buena puntería y vaya que la tenía. Aunque Flint decía que debía ganar un poco de peso si no quería que el aire me derribara.

Los entrenamientos habían estado siendo aplazados gracias a Draco y su bracito, yo no me enojé. Aún no me sentía lista.

—El siguiente partido no será hasta que Malfoy sane del brazo—comunicó Flint al final de uno de nuestros entrenamientos—, pero esto no significa que haremos de haraganes y no entrenaremos hasta eso. Vendremos una vez por semana, los jueves. Ya reservé el campo esos días. Aliméntense bien y manténganse enfocados.

Disolvió la reunión y esperé a que todos terminaran de ducharse para hacerlo yo. No me gustaban las duchas de la escobera, el piso era barro -agradecida de que estuviera encantado y no me embarra los pies- y el agua salía completamente helada.

Me puse mi abrigo, un pantalón viejo y medias de colores distintos bajo la túnica. Estaba por oscurecer así que apresuré el paso.

Entré a la sala común y había más gente de lo normal. Busqué a mis amigos que estaban jugando con un comecocos. Me acerqué a ellos mientras me quitaba la túnica y me senté.

—Dice que... Te quedarás calvo cuando envejescas—dijo Michelle con gracia.

—Vaya mierda—se quejó Theodore.

—Hola chicos ¿Saben que hay allí?—pregunté señalando al tablero donde habían varios estudiantes arremolinados.

—Primer fin de semana en Hogsmeade—susurró Crabbe mientras me regalaba un cromo de Dumbledore.

—¡En Halloween!—comenté.

—Hola perdedores—saludó Draco tomando asiento cerca de nosotros.

—Di un número—pidió Michelle enseñandole el comecocos.

—No jugaré esa tontería—se burló Draco.

—Yo sí, 6—respondí.

—¿Rojo o Amarillo?

—Rojo.

—Uhm, dice que tu suerte está por comenzar.

—Dile que venga en los examenes—murmuré quitandome los zapatos ganandome una mirada de Goyle por mis medias de diferentes colores. Lo ignoré y me acomodé en la alfombra apoyando mi espalda sobre la parte baja del sillón de cuero; poco a poco mis ojos se iban cerrando mientras aún podía escuchar cómo Michelle le preguntaba a todos en la sala común un número.

• • •

La mañana siguiente tuvimos herbología, mi curso favorito por si preguntan.

—Ten cuidado—le reproché a Draco quién tomaba una vaina como si fuera una bomba a punto de explotar.

Coloqué el balde cerca y las habas empezaron a caer. Sonreí y me tomé el tiempo de apreciar mejor la Vainilla de Viento.

—Es asquerosa—murmuró Draco ganadose un golpe de mi parte, obviamente se quejó.

—¿Sucedió algo?—preguntó la profesora Sprout.

—Nada—sonreí apretando la muñeca de Draco que parecía a punto de acusarme con ella.

La Profesora Sprout volvió a plantar semillas y yo a apuntar cosas en mi libreta.

𝐆𝐎𝐎𝐃𝐍𝐈𝐆𝐇𝐓 𝐍 𝐆𝐎 -𝗱𝗿𝗮𝗰𝗼 𝗺𝗮𝗹𝗳𝗼𝘆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora