La rubia estaba sentada en la orilla de su cama llorando desconsolada. Las lágrimas descendían por sus mejillas humedeciendo todo a su paso, mientras que Jughead, su esposo, solo la miraba contra la pared con un cigarrillo entre sus labios.
- ¡No me importan tus estúpidas excusas, Jughead! -exclamó la rubia.
El pelinegro volvió a su casa muy cansado después de tener un terrible día con las serpientes, por lo que solo quería llegar y poder dormir junto a su esposa, pero por cómo iban las cosas, sospechaba que ya eso no podría ser así.
Betty explotó cuando el llegó junto a su hijo de diecisiete años lleno de moretones y golpes por toda la cara, igual Jughead, pero menos grave.
- ¡Golpearon a nuestro hijo! Casi lo matan, ¿Y tu estas tan tranquilo? -preguntó incrédula, mientras más lágrimas se deslizaban por sus mejillas.
- A ver, Elizabeth, nos atacaron en el White Wyrm... Quise protegerlo y alejarlo de todo, de hecho le dije que bajara al sótano ¡Pero el no me hizo caso! -exclamó lo último. - También es mi hijo, y también estaba preocupado pero no le pasó nada muy grave, ya lo curamos y está bien, yo solo quería llegar aquí y dormir junto a ti pero parece que la tranquilidad no es posible hoy en esta casa. -dijo serio.
- Todo esto por unirlo a las serpientes ¡Sabia que era mala decisión! ¡No voy a permitir que Allison también se una! -negó ella, hablando de su hija menor, la cual tenía quince años.
- Se que los quieres proteger, pero esa ya no es nuestra decisión. -negó. - Ellos deciden si se quieren unir o no. -se encogió de hombros.
- Oh no, Forsythe... -negó. - No voy a permitir que mi hija también se ponga en peligro de esa manera.
- Betty, me importa muy poco lo que digas y a ellos también. -el le dijo apagando el cigarrillo y tirándolo en el cesto. - Nosotros mismos les dimos la opción de elegir, ¿Recuerdas? -enarcó una ceja. - Ellos quieren eso, así que no podemos hacer nada. Se han preparado toda su vida para esto.
El caminó hacia la puerta del baño y la abrió. Antes de entrar, habló. - Ahora me voy a dar un baño, cuando salga quiero dormir en paz porque estoy hecho mierda, no quiero más discusiones. -le dijo y se dio media vuelta, cerró y minutos después Betty escuchó la ducha.
Ella solo sollozaba en su cama preocupada de la seguridad de sus hijos y esposo, solo quería mantenerlos a salvo y que nada les sucediera, pero parecía algo difícil.
Jughead salió del baño con una toalla en su cintura, la quitó y se puso sus boxers mientras Betty limpiaba sus lágrimas.
El se acosto a su lado y ella le dio la espalda. Trató de pasar sus manos por su cintura pero ella se alejó.
- No me toques. -pidió ella cortante.
- Vamos Betty. ¿De verdad te vas a comportar así? Te dije que solo queria llegar y dormir junto a ti... -bufó. - Pero está bien. -se dió vuelta en la cama y también le dió la espalda.
Al día siguiente la primera en despertar fue Betty. Se levantó y entró al baño, ya lista salió directo a la habitación de su hijo mayor donde lo vió dormido en su cama sin camisa, con todo el abdomen lleno de moretones y contuvo sus lágrimas. Lo despertó para curar de nuevo su herida en el brazo ya que lo habían cortado y tenía que limpiarla cada tanto para evitar infecciones.
- Ethan, hoy no irás a la escuela, no puedes ir asi. -negó mirando a su hijo mayor.
- No mamá... Debo acompañar a Alisson. -el murmuró. - Los diablos nos amenazaron con hacerles daño y no quiero eso. -dijo el con una mueca de dolor al sentir el acohol contra su herida.
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Once upon a time || One shots Bughead y Sprousehart || • +18
FanfictionOnce upon a time. Libro de One shots 1. • One shots. • Historias cortas de Bughead y Sprousehart. || Hot || Historias 100% de mi autoría. No acepto copias ni adaptaciones.