Matrimonio Matriarcal (PARTE I) [GL]

Capítulo 27: Solo otro día.

Los empleados de la tienda se arrastraron desde el suelo uno tras otro. No podían creer lo que oían sus propios oídos; ¿Cómo acaba de llamar esta persona a su jefe?.

¡¿Esposa?!.

El magistrado Li se aclaró la garganta. Era demasiado mayor para tal escena, pero como magistrado de la ciudad de Luo, no podía dejar de celebrar un juicio cuando alguien presentaba una denuncia por una injusticia. Como todos estaban aquí, el magistrado Li golpeó el mazo y luego dijo:

-Silencio en la corte.

Aún sonrojada, Lin Buxian dijo en voz baja:

-Primero suelta tu mano. Hablaremos de ello en casa.

-Ah, bien.

Yun An siguió su consejo fácilmente. Lin Buxian dio unos pasos hacia adelante, luego se arrodilló en el pasillo. Ella dijo:

-Esta mujer común de la familia Lin, saluda al Señor magistrado.

-La cortesía está exenta. Alguien venga, arregle un asiento.

-Gracias al señor.

Youyi ayudó a Lin Buxian a levantarse, luego la ayudó a sentarse al lado de la sala del tribunal.

El magistrado Li se aclaró la garganta y luego dijo:

-Los empleados de la tienda de empeño de Tongguang han presentado una queja de que alguien se peleó, provocó problemas en la tienda, rompió una serie de artículos vendidos, lo que resultó en una pérdida total de trece mil liangs ... ¿Es así? .

Preguntó el magistrado Li a los aturdidos empleados de la tienda en la sala del tribunal.

Al escuchar ese número, Yun An encogió un poco su cuello. Ella no pudo evitar desviar su mirada hacia Lin Buxian. Según el poder adquisitivo de esta dinastía, mil liangs de plata equivaldrían a seiscientos sesenta mil renminbi. Entonces trece mil liangs serían ... ¿ocho millones quinientos ochenta mil renminbi?.

Yun An tomó un aliento frío; finalmente se dio cuenta de lo serio que era esto. Si hubiera sabido que las cosas en el estante eran tan caras ... habría peleado más lejos de eso, y ... de todos modos, no se la podría culpar completamente por esto. Esos empleados de la tienda rompieron más de unas pocas cosas cuando también estaban moviendo sus palos.

Yun An miró a Lin Buxian con la conciencia vacía, luego pensó para sí misma: se había casado matrilocalmente, pero era un fraude. Le causó tantos problemas a su esposa el día después de la boda, ¿qué debería hacer?.

Lin Buxian estuvo observando en silencio a Yun An todo el tiempo. Naturalmente, no se perdió los cambios en las expresiones de Yun An. En solo un instante, la expresión de Yun An pasó por algunos cambios, desde la conmoción a la culpa, a un rostro lleno de lucha, luego sus ojos negros y su boca comenzaron a moverse hacia arriba. Claramente estaba pensando en formas de lidiar con la situación.

La expresividad era un gran tabú en el comercio. Como dicen, un temperamento tranquilo trae riqueza. Un comerciante debe sonreír incluso si internamente está hirviendo de rabia. Incluso si tuvieran un plan en mente, deben realizar una expresión de sinceridad. Alguien como Yun An, que escribió todo en su rostro, se jugaría sin remedio en el mundo de los negocios.

Trece mil liangs de plata eran solo una gota en el cubo de la finca Lin. No importaba cuánto se rompiera, pero Lin Buxian recordó algo que Yun An mencionó anteriormente ... ¿La casa de empeño parecía haberle robado su reliquia?. Eso tendría que ser investigado. Embolsarse la prenda de un cliente era un tabú para las casas de empeño; destrozaría la reputación de la casa de empeño de Tongguang si esto se extiende.