//La huella es tuya//

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Había pasado un par de horas en esa maldita sala con el psicólogo. Dios hasta me quitó mi celular. Por suerte ya estábamos terminando porque llamó a mi madre que se sentó a mi lado.

- ¿Recuerdas las imágenes que te enseñé hace rato?

- Si.

- ¿Por qué no hubo alteraciones en tu pulso al verlas?

- ¿Por qué lo debería haber?

- Porque son imágenes fuertes para la mayoría de las personas. Violencia al límite.

- No son la gran cosa- lo miro- Es algo que pasa.

- Elena- mi madre pone su mano sobre mi brazo.

- Está bien, señora Adams, ella debe ser sincera respecto a sus respuestas. -voltea a verme- La próxima sesión será llena de más exámenes, estás lista?

- Terminemos con esta mierda de una sola vez.- me levanto.

- Me quedaré un segundo hablando con tu madre, ¿puedes esperar afuera?

- Si si- tomo mi teléfono de su escritorio y salgo. Mierda ya eran las 7 de la noche, duré en realidad más de 3 horas ahí.
Al mirar las notificaciones tenía 7 llamadas perdidas de Jacob, la última fue a las 5. Algo malo pudo pasar.
-Maldición, todo por tu estúpida sesión- le marqué de vuelta...no contestó. Hice lo mismo unas 8 veces y no hubo respuesta.- Demonios!

- ¿Que pasa?- mi madre recién salía del consultorio.

- Nada- me pongo mi abrigo- Vámonos, necesito llegar ahora.
Ambas bajamos y nos dirigimos a casa, fue un viaje tan lento.

-Debemos hablar- estaciona el auto.

- Luego- me quito el cinturón y salgo del auto.

- Elena?! Vuelve aquí! Ya es algo tarde!

- Ya regreso!- corrí a casa de Jake. Las diminutas gotas de la naciente lluvia mojaron mi frente. Cuando llegué a la cuadra me detuve y caminé para sostener mi respiración, noté que algunas personas estaban en sus porches, juntos o separados pero ahí estaban. <<¿Que mierda está pasando?>>, me pregunté. Hasta que lo vi, la casa de los Barber estaba rodeada por policías, al acercarme uno me detuvo.

- No puede pasar jovencita- me sostiene de los hombros.

- ¿Que está pasando?- miro alrededor.- ¿En donde está?- titubeo mientras trato de seguir caminando.

- No es algo de su incumbencia- me empuja suavemente.

- Si lo es!- me trato de soltar.

- ¡No puede acercarse!- rodea sus brazos sobre los míos y me alza dejándome inmóvil.

- ¡¿En donde mierda están los Barber?!- pataleo. -Suélteme!

- Elena?- volteé mi cabeza, eran Andy y Laurie, asomándose desde la parte de atrás de su casa.- Oficial, déjela, es familia.

- Lo siento- me baja.

- No pongas tus tontas manos sobre mi de nuevo!- voy con ellos casi corriendo.

- ¿Estás bien? ¿Te hizo daño?- Andy pone su mano en mi cabeza.

- No no am- tanteo los ojos en todas partes- ¿Y Jacob? ¿Donde está Jacob?

- No lo sabemos- contesta Laurie.- La última esperanza era que estuviera contigo.- sus caras lucen tan pálidas y preocupadas, la de ella era más como si fuera a llorar.

- Yo- agarro aire- yo me despedí de él en el centro y de ahí no sé más- la abrazo, se ve que lo necesita- Lo siento mucho.

- ¿Intentaste llamarlo?

•Secreto Criminal• //Jacob Barber//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora