Atrapada por el duque (Completa )

Episodio 14: Una pequeña conspiradora.

15 de Junio de 1827 

Durante todo junio, Helena había estado demasiado ocupada llevando de un lugar a otro a Ethan, siendo aceptados en bailes extravagantes y opulentos. Después de algunos años la familia Hawthorne volvía a Londres y todos esperaban un buen desenlace de la relación entre los duques, pero el ansiado heredero era lo que no veían, sospechando que esta pareja sufría de algún tipo de impedimento.

Ahora con Ethan de regreso toda madre casadera planeaba tener un nieto duque entre su familia, por lo que aun cuando la sociedad le recriminara a Helena la falta de un heredero, la aceptaba con gusto y esperanza por su gran influencia sobre el hermano del actual duque.

Lo que las ambiciosas matronas no contemplaban era que ella tenía un plan, guiando y escudriñando los planes del gemelo perdido. Hasta el momento había tenido una predilección por la familia de un par de jóvenes y ambiciosas americanas, las cuales se sorprendieron al verlo, sin duda reconociéndolo.

Sus pequeños ojos y oídos habían encontrado que a pesar que el gemelo del duque era bien recibido, evitaba los círculos cercanos a estas jóvenes, se devenía por los círculos más discretos y escandalosos de Londres.

Sin duda un habito que Lena odiaba, pero hasta ahora solo parecía interesado en aquellas jóvenes americanas de una familia mercante en el sur de los estados unidos. Algunas fuentes habían asegurado que perseguía a las Studle, no tenían un noble pasado, pero una de sus hermanas mayores había pescado a un Barón Alemán que radicaba ahora en Inglaterra.

Aunque claro, solo eran sospechas, pero sus oídos casi nunca se equivocaban, también habían encontrado sospechoso que Ethan no se relacionara con el Sr. Studle o Lord Maxwell, gente afable según decían. 

Pronto una voz la distrajo de sus pensamientos cuando Odette rio de forma poco discreta y repitió la frase al ver la cara de desconcierto de su amiga.

- Y qué opinas de Amie? Es algo joven, pero parece encajar bien con Ethan ...- murmuro Odette, quien parecía algo emocionada, pese a estar en medio de una fiesta de té en casa de los Addinton

Levantando una ceja Lena observo el alegre rostro de su amiga, quien comentaba aquello con jocosidad. Definitivamente parecía ansiosa intentando parecer relajada.

- Acaso has escuchado algo? – pregunto la duquesa

- No realmente ... - susurro Odette, aun emocionada.

Lena ya lo podia ver, la pequeña Bladell había caído prendada por Ethan y como muchas damas muy probablemente tendría el corazón roto para finales de temporada, claro si todo salía como estaba planeado.

- Es una opción, pero tengo entendido que ella ya tiene un arreglo previo... - murmuro Helena contemplando con curiosidad a su rubia amiga

- Oh minucias, el sujeto ni siquiera está en el continente y ella debería estar libre de cualquier compromiso si es como se rumorea ...

- ¿Un crápula? – pregunto Emma, quien lucia interesada en el pequeño chisme.

- Un erudito ... no le interesan nada mas allá que máquinas y piezas de relojería ...- respondió Oddie con una sonrisa llena de burla.

- Mm entonces seguro se llevaría bien con el crápula que tengo en casa... - mascullo Helena

Una risa abordo la sala, discreta y cínica entre las jóvenes presentes, llamando la atención de las otras dentro de aquel salon. Acercándose a ellas, su anfitriona se sentó en un sillón cercano, junto a su caballeroso hijo mayor, uno que lucia muy interesado en la distraída Odette.

- Cual es el chisme tan jugoso que están compartiendo queridas? – murmuro la anfitriona

- No es un rumor, solo hablábamos de los hombres...– afirmo Helena riendo con despreocupación, viendo como Emma se sonrojaba a su lado.

- Oh tan rápido ha empezado a hablar mal de su futuro esposo Srta. Fairchild? – bromeo Lady Addinton- uno creería que un próximo matrimonio por amor como el suyo duraría en miel un poco más.

Sonrojándose Emma quien se había comprometido apenas hace un mes, lucio totalmente perdida sobre como contestar. Cuando la pálida y alta figura de Lady Sachs apareció como su caballero blanco.

- Oh Ana, porque intimidas así a la pequeña Srta. Fairchild, no es más interesante hablar sobre el desamor que ocasionan en este mundo?- rio la alta mujer, sentándose junto a Odette- aunque debo decir que mi tema favorito es la inexistencia del amor, no puedo dudar que mi linda Emma es sincera con sus sentimientos

- Entonces dice que para usted no existe el amor?- pregunto Emma, recomponiéndose.

Las damas presentes parecieron divertidas por la conversación

- Mas que su no existencia, yo creo que el amor ha muerto ... - murmuro Lena viéndola con ojos brillantes y contemplando la confusión ante sus palabras – no fue Dios o el alma humana, solo hemos perdido la capacidad de amar de verdad, claro solo si alguna vez existió...

- Yo creo que el amor si existe – contesto Emma riendo suavemente- Aunque el amor en el que creo no sea realmente algo sentimental, sino más bien una perdida. Perder quién eres para buscar quien puedes ser...

Las elocuentes palabras parecieron sorprender a las mujeres a su alrededor, mientras en un parpadeo Odette prácticamente se arrimó a Lady Sachs, cuando el mayor de los hijos de la anfitriona se sentó en un silloncito a su lado.

- ¿Una fuerza invisible que arrastra y entrega al todo?- pregunto con cierta ironía una de las mujeres cercana a ellas.

- Mm es más como creer que el sol saldrá mañana y que esa persona se quedará un día más ... - susurro la pelirroja, sonriente y viéndolas tímidamente.

Riendo las damas parecían entrar en cierto debate sobre aquel tema. Mas una incómoda señorita recibió un pequeño murmullo por parte de George Addinton.

- Yo me quedare todos los días que desees... - murmuro con una mirada de cordero degollado, viendo a Odette sonreír con educación.

- Ya quisiera que el mañana no llegara...- mascullo para sí misma, pegándose nuevamente a Lady Sachs.