La señorita Alicia me hizo parar frente a uno de los hoteles más importantes de Madrid – Pero Alicia... por Dios... -.
- Por Dios nada Ismael... aquí nos quedamos – le di un beso en la mejilla y me bajé del coche.
Llegamos a recepción, reservé una habitación y subí junto a mi guardaespaldas. Una vez dentro – A ver, acomódate -.
- Señorita, preferiría irme a mi casa y mañana la recojo – dije convencido de que era lo mejor después de lo que había pasado.
- ¿Por qué no te sueltas eh? Y dejas esa pose rígida, está claro que te gusto como tú me gustas a mí – me acerqué a él lentamente, pasé mis brazos por su cuello y antes de que pudiera reaccionar, empecé a besarlo de nuevo. Esta vez me respondió, puso sus manos en mi cadera y me besó con mucha dulzura. Me separé dejando varios piquitos en sus labios - ¿Duermes conmigo? Llevo soñando con que me abraces desde el día que te conocí – le dije y lo volví a besar.
- Alicia... - con el poco de cordura que me quedaba, intenté separarme de la señorita.
- Por favor... - respondí besando de nuevo sus labios.
- Está bien... - fui yo quien la besó en esta ocasión, haciéndolo con mucha dulzura y delicadeza.
Al final nos metimos en la cama entre besos, tenía un poco de miedo a que Ismael quisiera seguir más allá, ya que podía sentirlo excitado.
- Preciosa... - beso – mejor te abrazo y dormimos ¿te parece? – la estaba notando temblar un poco e iba a demostrarle que aunque la deseara, no era ese tipo de hombre.
- Sí, por favor – metí mi cara en su cuello, muy abrazadita a él y me dejé envolver por su calor.
Desperté junto a mi princesa, era bastante temprano pero no había un minuto que perder. Hoy era el gran día... iba a ser mi mujer... iba a ser mía para siempre. Le dejé un beso en la frente, me duché, le dejé una nota a Macarena, me puse algo de ropa y salí para la casa de Saray en la que me arreglaría para la boda.
Sentí los rayos de sol sobre mi rostro, aún podía sentir el perfume de mi reina mora aunque no la sentía a mi lado. Abrí los ojos y me encontré con una nota:
Te espero en el altar, prohibido arrepentirse.
Te quiero
Zulema.
Me fui a la ducha y todo pasó muy rápido, en nada tenía a Rizos y a varias estilistas dando vueltas por mi habitación y ayudándome a arreglarme. El vestido de novia era muy sencillo, no obstante, era precioso. Color blanco roto, corte de palabra de honor y pedrería sutil desde el pecho a la cadera, con caída de tul tipo princesa.
- Comadre, joder... estás preciosa... si no fueras tan hija de puta me casaría contigo jajajaja -.
- Eres una... pero bueno tienes razón, a veces lo soy -.
- De verdad, estás muy guapa, espero que la rubia no se desmaye -.
Llevaba un vestido muy sencillo en blanco con destello champagne, pegado al cuerpo de tirante fino y caída con un poquito de vuelo.
- Vamos Zule, que tienes que esperar a la novia en el altar -.
- Jajajaja bueno, aunque es una boda civil, por razones obvias, quería que fuese lo más parecido al altar de una iglesia. Sé que a Macarena le hace mucha ilusión -.
- Está bien... comadre es lógico y normal, además, las fotos van a quedar divinas... yo me encargo de eso -.
- Esooo, que no se diga por ahí que mi mejor amiga no es la mejor fotógrafa de Madrid -.
- Jajajaja idiota... anda vamos, antes de que me arrepienta y te tengas que ir andando -.
Amanecer entre los brazos de Ismael fue mágico, pero o nos levantábamos o mi hermana cavaría nuestra tumba con sus propias manos. – Vamos, tengo que ir a arreglarme para la boda y tú también -.
- Mmmmm – al mirarla recordé dónde estaba y con quién – Eh... Sí, sí, claro señorita, vámonos – seguro no se acuerda de nada porque estaba borracha.
- Oye, pero – me acerqué a sus labios y lo besé con mucha dulzura – creo que tenemos una conversación pendiente ¿no? – le acaricié la mejilla y me quedé mirándolo a los ojos.
- Señorita, esto es un error. Lo mejor es que salgamos ya para casa de su hermana – me levanté de la cama y me puse a esperarla en la puerta.
Me quedé un poco desilusionada, sin embargo, lo entiendo. Conociendo a mi hermana seguro lo tiene amenazado si se acerca a mí o a Macarena. Poco a poco me iré ganando su confianza y le haré sentir que no es un capricho, si no que me gusta de verdad.
Llegamos al lugar en el que se celebraría la ceremonia, estaba nerviosa no iba a negarlo, pero el pensar en Macarena... en mi princesa... hacía que todos mis temores se disiparan, que mi alma se iluminara y que mi corazón diese saltitos de emoción. Me situé en el altar, no paraba de pasarme una mano por encima de la otra, veía a los invitamos acomodarse, Sole, Armando, Román, la madre de mi rubia... todos me miraban con emoción. Y un poco tarde, para mi gusto, pero entró Alicia y se colocó con las demás damas de honor.
Estacionamos frente a la puerta del lugar en el que se celebraría la ceremonia, miré a mi padre y me sonrió con aprobación. Era hoy, el día el que me uniría para siempre a la mujer de mi vida. A mi más esperado anhelo. Porque dicen que lo del hilo rojo es tan solo una leyenda, y yo digo que las leyendas se forman de vivencias. Y es que lo único que puedo decir que no había sido nadie antes, porque era ella. En algún lugar del tiempo y el espacio era ella, la mujer que se iba a convertir en la razón de mi existir y en el motor de mi vida.
Entré junto a mi padre y la vislumbré al pie del altar. Me emocioné un poco e intenté en la medida de lo posible guardar la compostura. Sin embargo, hoy en día solo puedo dar las gracias porque me la hayan puesto en el camino. Porque me salvó y porque la salvé, por salvarnos mutuamente.
A día de hoy, lo único que puedo hacer es dar las gracias al destino por dejarme conocer a esta mujer, que se ha robado mi corazón, mi alma y cada uno de mis pensamientos. Agradecer el ser correspondida y la felicidad de la que somos partícipes y de la que vamos a tener en un futuro. Gracias destino por ponerla en mi camino, porque hoy más que nunca, sé que es ella. El verdadero y único amor de mi vida.
Disculpen la tardanza, pero aquí lo tienen. Espero que os guste! Gracias por los comentarios y favs!
Intentaré en la medida de lo posible actualizar pronto :)
Les recomiendo que pasen por la historia "Bajo Hipnosis" de Mas_QueLetras
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Zurena - Tóxica
RomanceDos almas rotas unidas por el destino, una necesidad de sanar que lleva casi a la obsesión y una negativa a dejar lo acostumbrado atrás por miedo a una nueva desilusión, serán las claves de esta historia. Los personajes pertenecen a la serie de Fox...