C̾a̾u̾t̾i̾v̾o̾ d̾e̾ t̾u̾ C̾u̾e̾r̾p̾o̾

Familia

Shaoran:

Al fin, después de seis horas de viaje estoy de regreso en mi natal China, reconozco que lo he he extrañado. Mentiría si dijera que a mi familia también porque no es cierto.

A las únicas rescatables que puedo mencionar son mis tías las gemelas Sora y Sonomi, así como mi tía favorita Nadeshiko.

Mamá me dijo que volvió a recaer en depresión, lo cual me pareció raro ya que cuando hablé con ella la última vez la escuché fresca y dulce.

Se parece tanto a ella.

—Cerezo, como me gustaría que estés conmigo en este momento y presentarte ante todos como lo que eres para mí. Mi persona especial.

Cuando la ví partir de mi departamento sentí un vacío en mi ser completo, durante todo el viaje solo pensé en ella. Mi mente la tiene a cada rato y a cada instante.

La tomé entre mis brazos y la besé con intensidad y con lo que siento por ella. Siento que también siente lo mismo. El día de su cumpleaños la llevaré al mar, tendré muchos detalles para ella, haré que pase el mejor cumpleaños de su vida.

—Joven Li—un tipo de negro interrumpe mi monólogo—. El auto está afuera para llevarlo a la mansión.

Suspiro, mi madre cumplió lo que me dijo. Pensé que había exagerado pero no, un grupo de periodistas estaba en la puerta de cristal esperando sacar información de mi vida privada.

Paso rápidamente pero no evito que me sigan, escucho algunas preguntas, pero no contesto ninguna ni mucho menos los miro.

Joven Li ¿Cuándo se casará? ¿Ya tiene la candidata para su futura esposa?¿ Piensa quedarse en China?¿ Va tomar control de las clínicas y hospitales del país?

Me sentí mareado, eran demasiadas preguntas. Los hombres de negro todo el tiempo me protegieron. Al llegar al inmenso auto sentí un poco de alivio. Siento que avanza y no evito mirar la ventana.

Los rascacielos en Hong Kong son como colosos que intimidan con su sola presencia. Las noches en la ciudad son de mucha algarabía, color y sobretodo música y discotecas por doquier.

Eso es lo que aman Eriol y Mei cada que saliamos los fines de semana. Pero al mudarme a Japón y Eriol irse a Inglaterra para Mei no fue lo mismo.

Con mis primos por parte de mi madre que son Yue, Kaito y Yukito casi no hemos salido. Los tres son hermanos, hijos de la prima de mi padre y su esposo Jang Tsukishiro. Es por ello que somos primos.

Mei es Li porque su padre es hermano del mío. Y Eriol es Hiraguizawa Li. Su madre es hermana de mi padre también.

Mi padre sólo tuvo dos hermanos, talvez por eso es que me llevo mejor con ellos y tenemos tanto en común. Los tres somos hijos únicos.

El auto entra a la inmensa campiña que está dividida en varias villas. La principal es mi casa, está al centro de todas, el resto están a dos kilómetros de distancia cada una. El auto se detiene, uno de los guardaespaldas abre la puerta y bajo mirando todo a mi alrededor, inhaló el aire que se respira en este lugar, es un aroma dulce y delicioso.

Me recuerda a ella.

Estoy seguro que le encantaría todo esto.

—Xiao-Lang—mi madre está parada en la puerta, me acerco sin prisas y la reverencio con respeto—. Bienvenido hijo.

—Gracias madre—respondo en el momento que llevan mi maleta al interior de la casa.

—Debes estar cansado—me dice mi madre con su acento serio—. Instalate y luego tomamos un té.