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Él se está Sacrificando por Amor

Nakuru llega a su departamento con el celular en sus manos, en todo el camino fue manejando nerviosa, agradeció no haber provocado un accidente.

Está asimilando todo lo que ese hombre le ha dicho, pero lo más importante es que Yue es el verdadero dueño de la compañía Ferback, la misma que proveyó las medicinas y la misma que lo mandó a la cárcel.

Se está creando una teoría pero primero debe hablar con Kurogane y enseñarle esa prueba. Ese día su empleada está de día libre, es por eso que está completamente sola, llama a Kurogane pero su celular está apagado.

Ansiosa sigue tratando de comunicarse pero es inútil. Incluso se olvidó de comprar las cosas para la cena. Está perdida con respecto a no saber qué hacer.

Escucha el audio varias veces y en eso recuerda al hombre del audio. Era la mano derecha de Shaoran en el hospital, él le llevaba los papeles para que los firmara. Nakuru pasa saliva no puede ser que hasta ese hombre haya traicionado la confianza de su alguien que lo considero mucho solo por unos cuantos billetes.

Busca en su laptop todo lo relacionado con la compañía Ferback, pero no hay mucha información, solo tiene poco tiempo. La teoría de Nakuru es más fuerte. Yue creó esa compañía exclusiva para hundir y destruir a su propio primo.

Sigue navegando y entra a ver sobre la situación de Shaoran, lo que también la ha dejado muy pensativa es no ver a Sakura. Se supone que como novia de él estaría a su lado.

Kurogane no le ha explicado muchas cosas que envuelven a todo ese caso. Ve su reloj y han pasado varias horas, decide salir a comprar. Sigue intentando marcar a Kurogane pero es inútil.

Después de comprar las cosas regresa a su departamento pero al entrar lo que ve la hace gritar de la impresión. Todo su departamento está hecho un desastre, revuelto y algunas cosas rotas. Su rostro se vuelve pálido y un presentimiento se apodera de su ser.

Corre escaleras abajo y rápidamente se sube a su auto, y como lo sospechaba un auto negro de lunas polarizadas la está siguiendo. Nakuru se llena de pánico, tanto que teme ocasionar un accidente, logra entrar a una pista de doble sentido y se pierde con otros autos, afortunadamente el color de su auto es parecido a muchos que pasan en la carretera.

—¡Maldición la perdimos!—el hombre que conduce el auto negro se lamenta, porque Yue ahora ira contra ellos—. Tenemos que ubicarla para obligarla a darnos la grabación.

—Pero todo en su casa está terrible, eso quiere decir que ella lo tiene y debemos quitarle a la fuerza—el otro hombre solo asiente y siguen buscando a Nakuru.

Al otro lado de la pista, Nakuru llega aturdida y aún con algo de miedo. Vuelve a marcar a Kurogane para decirle lo que ha pasado pero sigue sin contestar. En eso presiente algo malo.

Yue, está queriendo quitarle esa información, eso quiere decir que él lo sabe todo. Y de hecho busca venganza hacia su persona. No debe permitir que ese audio llegue a manos de él, debe buscar a alguien para que lo tenga hasta que llegue el momento.

Pone en reversa el auto y sale a buscar a la persona que podrá guardar esa pista valiosa.

Cuando Kuro llegó al departamento y encontró todo como si un huracán hubiera pasado con furia rápidamente llamó a Nakuru, pero al ver que no estaba ahí, tomó su móvil y al ver cantidad de llamadas perdidas se golpeó la cabeza mentalmente, no se dio cuenta cuando puso el teléfono en modo silencio.

Al no obtener respuesta sale como loco, la busca por todos lados, en eso se pregunta algo que lo estremece¿Y si fue secuestrada? Sigue marcando su móvil pero no hay respuesta.