Icarus Rose |1D| [Omegaverse]

𝑷. 𝑰: 𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒊𝒏𝒄𝒆

Al entrar en la oficina se encontraron con Zayn, quién decidió ignorar el rojo rostro de Louis aunque le dolía el alma de solo pensar por lo que su hermano estaba pasando, una vez la puerta estaba cerrada no perdió tiempo y comenzó a explicar lo que habían encontrado.

—Uno de los de seguridad dijo que había un encontrado movimiento cerca de un edificio abandonado a una hora de aquí— le mostró a Louis la dirección del lugar y caminó hasta la puerta sin pensarlo dos veces.

—Maldita sea Louis, espera —dijo Niall sin obtener respuesta, por lo que se dispuso a seguirlo, no permitiría que Louis saliera lastimado también.

Ambos abandonaron la casa y se dirigieron a la dirección. Louis no dijo nada, mantuvo su mirada fija en la carretera y poco a poco aumentaba la velocidad.

Ágilmente evitaba los pocos autos que había afuera y que en su mayoría les pertenecían. Una vez Louis llegó a la autopista principal Niall se relajó un poco sabiendo que no chocaría con algo.

—Vamos a encontrarlo, Lou, no te preocupes. No hay razón para que le hagan daño— trató de tranquilizarlo, pero Louis estaba metido en su mundo, no quería saber nada.

La velocidad del auto aumentó, los brazos de Louis se tensaron mientras sus pensamientos inundaban su mente. El solo creer que Harry estaba en peligro le partía el alma, y el saber que había roto la promesa que le había hecho a Jane lo desmoronaba.

¿Por qué no pude protegerlo?, se repetía incontables veces.

Lágrimas comenzaron a llenar sus ojos nublando su vista, su pie presionó el acelerador aún más y el motor del auto resonaba por todo el lugar.

—Louis, detente —pidió sin obtener respuesta, lágrimas caían por las mejillas del castaño y sollozos escapaban de su boca—. Lou, para— pidió de nuevo, pero el alfa lo ignoró. —¡Louis detén el auto! —gritó asustado. Louis ya no estaba ahí, no era consciente de lo que hacía y solo iba a provocar que ambos murieran. —¡LOUIS WILLIAM TOMLINSON, DETÉN EL AUTO! —gritó una vez más y Louis soltó el acelerador y presionando el freno con fuerza, deteniéndose de golpe y provocando que ambos alfas se balancearan hacia enfrente.

Estaba en shock, su respiración era agitada y su llanto inconsolable. Niall puso su mano sobre el volante y se acercó a Louis.

—Vamos a cambiar —Louis asintió y se movió con cuidado hasta el asiento del copiloto, Niall se sentó y tomó control del vehículo, bajando la velocidad a una más estable pero sin dejar de apresurar el paso.

Sollozos se escapaban de la boca del alfa mientras trataba de controlarse, jamás había sufrido tanto en su vida, y lo odiaba. Era un dolor que iba más allá de su comprensión, le dolía el pecho, le dolían las costillas, le dolía el corazón.

Pero por un momento pudo percibir el olor de Harry.

—Niall— habló en un susurro. El rubio lo miró momentáneamente y regresó sus ojos a la autopista.

—Niall— repitió un poco más fuerte mientras sentía como el aroma se intensificaba. —¡Niall! —gritó.

—¿Qué pasa? —preguntó preocupado.

—Es por aquí, puedo olerlo, acelera— el rubio hizo caso a las palabras de Louis y aceleró.

Sintió como el olor aumentaba considerablemente mientras avanzaban, se estaban acercando a la dirección que les habían dado y Louis sabía perfectamente que Harry estaba ahí. Niall dió vuelta en un camino de tierra y se encontraron con un enorme edificio. En cuanto se detuvo el auto Louis bajó y respiró profundamente.