Icarus Rose |1D| [Omegaverse]

𝑷. 𝑰𝑰: 𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝒔𝒆𝒔𝒆𝒏𝒕𝒂

Cuatro horas antes.

Golpes de manos pequeñitas fueron lo que despertaron a Liam y a Zayn, sus pequeños cachorros ya estaban más que despiertos y preparados para empezar el día. Zayn se fue directamente a su oficina, pues tenía todavía algunos pendientes antes de desayunar, no sin antes, por supuesto, besar a su alfa.

—Buenos días, aquí Malik, ¿está todo en orden en la entrada?—empezó Liam a reportarse como todas las mañanas con los guardias de la entrada, su voz aún seguía un poco ronca pues todavía no se terminaba de despertar, pero un llanto hizo que su atención se dirigiera a su hijo—¿Por qué llora, mi hermoso príncipe? —dijo cambiando su tono de voz a uno más amigable y caminó hasta tomar a su bebé en los brazos.

Dejó el Walkie-talkie en el pequeño tocador y se olvidó completamente de que no había recibido una respuesta por parte de los guardias de la puerta principal.

Respuesta que nunca llegaría pues los únicos que habían sido testigos de aquel mensaje habían sido los cuervos que volaban en círculos sobre la casa, siendo los mensajeros de la muerte y testigos de los cadáveres que yacían en la entrada de la mansión.

Tres horas antes.

Alfas y omegas habían empezado el día a primera hora de la mañana, se habían puesto sus tan característicos trajes negros a juego. El desayuno ya había sido servido en la mesa del comedor y la familia estaba sentada en silencio, sintiendo la misma tensión que todos habían percibido el día anterior, incluso Bárbara, que en los momentos más tensos era capaz de aligerar el ambiente, estaba callada aquella mañana.

El llanto de la pequeña River rompió la atmósfera lúgubre del momento en familia, una incomodidad por estar acostada en el pequeño moisés que Anne les había regalado cuando nació fué lo que había causado aquel llanto; Harry se puso de pie y se acercó a su hija para cargarla y calmarla, puesto que si seguía llorando los mellizos la secundarían.

—Voy a llevar a los mellizos al cuarto de juegos —dijo Liam de repente, levantándose de la mesa y dejando la servilleta que descansaba sobre sus piernas a un lado del plato en donde estaba comiendo. Se acercó hasta las sillas de sus hijos y los levantó, finalmente antes de salir miró al omega de ojos verdes— ¿Me acompañas, Harry?

El mencionado asintió y tomó el biberón de River a un lado del plato de Louis y dejó un suave beso sobre su cabeza antes de salir del comedor siguiendo a Liam en silencio.

Los demás siguieron comiendo por unos minutos más, Zayn revisaba su teléfono de vez en cuando y Niall jugaba con uno de sus anillos por debajo de la mesa. Casi nadie tocaba su comida, y todos se intercambiaban cortas miradas de vez en cuando.

—Omega, tenemos que irnos, se nos hace tarde para el ultrasonido —anunció Niall mientras dejaba su servilleta sobre su plato y se ponía de pie, Shawn asintió y ambos se fueron, no sin antes agradecerle a la omega que estaba parada junto a la puerta que llevaba a la cocina en caso de que necesitaran algo.

El comedor volvió a quedarse en silencio, solamente con el sonido de platos siendo retirados y cubiertos chocando contra la fina porcelana de los platos de la casa, todo aquello solamente le ponía los pelos de punta al omega.

—Chicos, iré a hacer las compras, no me tardo —anunció la omega y se retiró, a pesar de que ya no era su trabajo, le gustaba hacerlo.

Zayn se levantó de la mesa en silencio, dejando la servilleta sobre el plato y se retiró a su oficina mientras miraba la pantalla de su teléfono, y minutos después Louis hizo lo mismo.

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