Icarus Rose |1D| [Omegaverse]

𝑷. 𝑰𝑰: 𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝒄𝒖𝒂𝒓𝒆𝒏𝒕𝒂 𝒚 𝒖𝒏𝒐

TW. Mención de temas delicados, uso de drogas sin consentimiento, mención de aborto espontaneo, etc. Lee con discreción, y si has pasado por algo así, que sepas que no estás solx, y mucho menos fue tu culpa. Eres valiente, estrellita, ánimo. <3

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El primer aniversario de Harry y Sebastian fué la celebración más grande en todo Cambridge, los amigos adinerados del alfa realizaron una fiesta en una de las fraternidades y la mitad del campus había asistido a la fiesta. El omega se sentía sobre las nubes, quería casarse, ser marcado y tener hijos con su alfa, aunque por alguna extraña razón Sebastian siempre se negaba a marcarlo sacando como excusa que eran muy jóvenes y aún tenían toda una carrera universitaria por delante.

La música resonaba por todas partes, se podían sentir las vibraciones en el suelo y las paredes; el lugar estaba lleno de un aroma a alcohol y feromonas, así como más de cien estudiantes bailando uno sobre el otro al centro de la pista. La pareja se encontraba en uno de los sillones disfrutando de unas bebidas, Harry estaba sentado en el regazo de Sebastian y este último descansaba su mano territorialmente en la cintura del rizado.

—¿Cómo te sientes, conejito? —preguntó el alfa al oído de Harry.

—Algo mareado, pero bien —se acercó al cuello de Sebastian y empezó a repartir algunos besos, haciendo que las personas a su alrededor gritaran alegres felicitando al alfa por haber conseguido a un omega tan dedicado y... fácil.

—¿Por qué no lo llevas arriba, King? Dale lo que quiere, ¿no ves que casi se derrite por que lo hagas tuyo? —espetó uno de los alfas ganándose una sonrisa socarrona por parte de Sebastian. Negó con la cabeza y separó el rostro de Harry de su cuello para llevarlo a sus labios, depositando un suave beso y la multitud volvió a soltar un grito alegre.

—¿Qué dices? —susurró al oído del omega— ¿subimos para darle al público lo que quiere? —el omega no se encontraba completamente consciente de lo que sucedía a su alrededor, de lo único que estaba consciente era de que su celo estaba aproximándose y que tenía a un alfa a su lado. Unió sus labios a los de Sebastian nuevamente y el alfa tomó eso como un rotundo sí.

Se puso de pie con el omega entre sus brazos y comenzó a caminar hasta las escaleras que daban al segundo piso, la mayoría de los invitados gritaba cosas mientras ellos pasaban, pero lo ignoraron por completo, esa noche era para ellos.

—¿Has estado esperando esto por mucho tiempo, verdad conejito? —el omega empezó a besar el cuello del alfa nuevamente y este sonrió maliciosamente. Llegaron a la primera puerta que encontraron y el alfa la abrió con fuerza.

Sebastian recostó a Harry sobre la cama y se abalanzó sobre él, dejando besos apasionados por todo su cuello. Sin perder mucho tiempo se deshizo de su camisa y la lanzó al suelo, e hizo lo mismo con la del omega; el alcohol se había apoderado de la situación, Harry estaba muy apenas consciente y el alfa se aprovecharía de eso para hacer de las suyas.

—Te ves tan lindo, conejito —dijo mientras empezaba a desabrochar el pantalón del omega. Había un aroma peculiar en la habitación, algo que Harry nunca había olido en su vida, tal vez era el hecho de que estaba a punto de tener relaciones por primera vez en su vida... ¿o sería otra cosa? —Voy a necesitar que te des la vuelta.

—Seb... No creo que debería de hacer esto, no me siento muy bien —las palabras de Harry salieron con delicadeza, era consciente de que si hablaba con un tono fuerte Sebastian se molestaría con él, pero en el fondo se decía a él mismo que el alfa lo comprendería.

—Claro que deberías hacerlo, conejito, ¿no es esto lo que quieres? —su voz era demandante y tosca, no parecía ser el mismo Sebastian que estaba con él hacía tan solo unos minutos. El alfa se deshizo de su pantalón y lo lanzó al suelo, ambos estaban solamente en ropa interior; llevó sus manos a las caderas del omega y lo hizo girar con un movimiento brusco, provocando que un jadeo involuntario escapara de los labios del rizado—. ¿Ves como si quieres? ¿Vas a gritar para mí?