Fernando
Hola bonita, te he estado llamando desde ayer pero no me respondes ¿todo bien?
Lucero
Hola, si, sigo en casa de mi papá, yo te llamo después.
En realidad no era así, no quería verlo y estaba en la casa de Andrés, para ser específicos en la misma cama que llevaba meses durmiendo, abrazada a sus rodillas procurando no aplastar su diminuto vientre.
El día anterior después de que Rodrigo la besara, no supo que decir ni hacer, sólo le pidió que le diera un tiempo para meditar las cosas aunque le dejo claro que eso no significaba que era segura su reconciliación.
Estaba perdida en sus pensamientos cuando escuchó su celular sonar de nuevo pero esta vez era una llamada, no quería responder pues creía que era Fernando, pero no, era Anette.
-Amiga ¿Cómo estás?- Escuchó decir enseguida del otro lado.
-Bien, estaba descansando un rato.- Ni siquiera sabía como se sentía en esos momentos.
-Lucero...-
-¿Mande?- Contestó sin muchos ánimos.
-Dime la verdad, Andrés me llamó y dijo que desde ayer que llegaste a la casa no has querido salir de la habitación, tampoco has querido platicar con nadie ni comido bien, sabes que puedes confiar en mi.- Le pidió su mejor amiga. -¿Te peleaste con Fernando?-
-No, con Fernando todo iba bien.- Respondió.
-¿Iba? ¿Cómo que iba? ¿Qué pasó?- Conocía a Lucero y algo en su tono de voz no estaba bien.
-Rodrigo nunca me engañó.- Se limitó a decir.
-Pero si su propia secretaría te lo dijo y te lo demostró.- Le recordó.
-Todo fue cosa de ella, hizo todo eso para que yo dejara a Rodrigo y ella pudiera tener algo con él...- Lucero trató de explicarle a resumidas cuentas lo que había pasado el día anterior y lo que Rodrigo le había mostrado.
-Es que no puedo creerlo.- Contestó después de escucharla.
-Yo tampoco, lo peor es que me siento tan estúpida de no haberlo escuchado.- Soltó un par de lágrimas.
-¿Y ahora? ¿Qué piensas hacer? ¿Ya hablaste con Fernando de esto?- Preguntó Anette.
-Ni siquiera he tenido el valor de contestar sus llamadas, no sé que hacer estoy muy confundida, si lo hubiera escuchado antes nada de esto estuviera pasando.- Secó sus mejillas .con el dorso de su mano.
-El hubiera no existe y aunque lo hubieras escuchado estoy segura que algo no habría cambiado...- Comentó.
-¿Qué?- No entendió a lo que se refería.
-A tu embarazo, tuviste relaciones con Fernando el mismo día que él se fue, sí lo hubieras escuchado cuando regresó y te quiso explicar, de todos modos te hubieras embarazado y aunque no es seguro que tu bebé sea de Fernando, tampoco es seguro que sea de Rodrigo.- Dijo Anette.
-En eso tienes razón.- Resopló.
-¿Entonces? ¿Vas a volver con él?-
-No sé, ni siquiera sé cómo va a reaccionar cuando le diga que estoy embarazada y que no sé si es el papá porque he estado con otro hombre.- El día anterior ni siquiera se había atrevido a decírselo.
-Pues deberías empezar por ahí, dile y depende cómo reaccioné tomas una decisión.- Le recomendó.
-No es tan fácil, no puedo decidir con quien estar cómo si fuera elegir un sabor de helado.- Se negó. -Además no quiero lastimar a ninguno de los dos, tengo muchas emociones encontradas, sentimientos confundidos, todo es tan complicado que no sé realmente qué es lo que siento por cada uno de ellos.-
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A la deriva
Fanfiction- Lucero Hogaza es una mujer de 32 años parece tener una vida tranquila, hija única, con un sólido matrimonio desde siete años atrás, tiene una licenciatura en artes pero no ejerce ya que trabajó un par de años y después sólo se dedicó a su hogar, s...