Harriet

CAPITULO 37

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CAPÍTULO 37

Horas antes...

¿?.

El olor a tabaco y alcohol me recibe cuando entro al bar, estoy acostumbrado a eso. Son olores muy comunes en mi día a día. Realmente no se si este aquí, pero ansío verla, necesito verla. Cada vez la veo menos seguido, han pasado semanas desde la ultima vez que lo hice, es hora de verla de nuevo.

No tenia idea de que ella venia aquí, un día simplemente me dio curiosidad este lugar y decidí venir sin saber que me encontraría con esa mujer de belleza inefable que ahora es la dueña de mis pensamientos.

Deambulo por el lugar en su búsqueda, no se mucho sobre ella, es muy reservada con su vida. Se algunas cuantas cosas de las que hace, entre ellas lo que hace en este lugar. Todos los días que puedo vengo aquí con la esperanza de encontrarla.

Lo que siento por ella va más allá de una simple atracción, tanto que e echo por ella cosas que jamás pensé que haría, todo por ella y ella no lo valora. Ni siquiera lo nota. Maté a ese hombre en el psiquiátrico para atraer su atención, para mi mala suerte no funcionó. Me esmeré tanto en hacerlo y planearlo, busqué entre cientos de artículos de asesinos seriales como mataban a sus víctimas, tomé las ideas que creí que llamarían su atención y fallé terriblemente.

Después de eso me recriminé, realmente no la conozco en nada. No hay información sobre ella en internet, le pague a alguien para que averiguara lo que fuera, no encontró nada. Estoy frustrado, no se que más hacer para llamar su atención.

¿Matar a otro? Si tuviera la garantía de que eso la atraería hacia mi con gusto lo haría, pero no la tengo y solo me arriesgaría a ir a prisión. Más de lo que lo hago ya.

¿Ir directamente con ella? No, definitivamente no. En primer lugar, no tendría por qué estar aquí, debería estar en ese lugar haciendo lo que se me pide, pero no puedo evitarlo.

¿Finjo que me mandaron a hacer algo aquí y que me la encontré por casualidad? Sabría que estoy mintiendo, me pongo muy nervioso con su presencia, ella es muy astuta y comenzaría a sospechar.

¿Y si mejor no me acerco a ella y continúo admirándola como hasta ahora? Eso seria mucho más sensato.

Además, jamás tendría una oportunidad con ella. Somos completamente diferentes, nunca se fijaría en mí, eso lo a dejado muy claro en varias ocasiones.

Justo eso me enfurece ¿Por qué no darme una oportunidad? ¿Por qué lo primero que haría seria fijarse en mi físico e ignorar todo lo demás? Tengo sentimientos muy fuertes por ella, sentimientos reales. Yo daría todo por ella, moriría por ella. ¿Por qué ella no podría hacer, aunque sea un poco de esfuerzo por mirar más allá del físico?

No la estoy juzgando, ella es perfecta tal cual es. Por dentro y por fuera.

No la conozco en lo absoluto.

Esto es tan frustrante, no la conozco, pero estoy loco por ella. ¿Por qué?

No niego que lo primero que me atrajo de ella por supuesto fue su físico. Tiene una belleza inefable.

Mis pensamientos quedan a un lado cuando la veo, la reconocería a kilómetros. Lleva una peluca pelirroja, esta de espaldas, pero nadie más podría tener esas curvas.

Esta parada frente a una mesa con objetos no alcanzo a distinguir. El antifaz que lleva le cubre la mitad del rostro, en sus muslos hay manchones de sangre, así como en los brazos. Eso me hace fruncir el ceño. ¿Qué le pasó? La sangre me hierve al pensar que alguien pudo hacerle daño.

Observo a mi alrededor en busca de algo que me indique que fue lo que pasó, detrás de ella, en el suelo hay un charco de sangre, uno muy grande. No parece ser de ella, ¿entonces porque esta manchada? Me quedo estático cuando se gira y veo su boca y barbilla embarradas de sangre.

¿Qué carajos?

Eso deja de importarme cuando me hipnotizo por sus preciosos ojos azules. Son brillantes y hechizantes. Estas muchísimo más oscuros de lo normal dándole una sombría mirada. La magia se rompe al momento que vuelve a girarse.

Se limpia el abdomen, por este escurren gotas de lo que parece ser agua, con un pedazo de papel. Lo deja sobre la mesa, alza la vista mirando a su alrededor, fija su vista en dirección a donde estoy yo y por un instante una parte de mi se alegra pensando que por fin me ha notado, tan rápido como lo hace, se esfuma cuando da la vuelta en dirección contraria.

Se mete en uno de los espacios donde hay algunas personas teniendo sexo. Manteniendo la distancia me acerco solo un poco para ver que hace, un hombre que va asomándose por esos espacios se atraviesa haciendo imposible que la vea. Lo maldigo. Va con el pene de fuera, que asco.

En ese momento ella sale parándose detrás del hombre que le da la espalda. Supongo que le dice algo porque este se gira, mis puños se aprietan con furia cuando ese idiota la recorre con la mirada comiéndosela con los ojos. ¿Qué le pasa a ese pendejo?

Lo de <<¿Y si mejor no me acerco a ella y continúo admirándola como hasta ahora?>> Lo mando a la mierda, es preciosa y todos quieren poner sus asquerosas manos sobre su hermoso cuerpo. Me dan ganas de vomitar al pensar en alguien que no sea yo tocándola. No, ella tiene que ser mía, solo mía, de ningún otro pendejo.

Contoneando sus generosas caderas se acerca al estúpido ese pasando sus brazos por los hombros de él, acerca su rostro hasta casi besarlo. Su linda y delicada mano baja al pene del hombre rodeándolo. Aprieto la mandíbula con enojo. Se dicen algunas cosas que no logro escuchar por la distancia y la música.

Le suelta el pene y lo empuja en uno de los espacios vacíos, en estos hay camas. Podría decir que son como habitaciones, en lugar de una puerta tienen una cortina. No la cierran, solo necesito acercarme un poco para verlos. Rodea el abdomen del hombre con sus piernas, el la sostiene por el trasero mientras se besan. La escena me asquea.

El hombre se la lleva contra la pared, con un solo movimiento mete su miembro dentro de ella embistiéndola con fuerza, los gestos de ella me hacen saber que lo disfruta. La ira, como nunca antes la había sentido, invade cada parte de mi cuerpo.

Está engañándome, frente a mis ojos.

Está dejando que otro toque lo que es mío.

No puedo permitir eso.

Ella tiene que ser solo mía.

Ella va a ser solo mía.