Harriet

CAPITULO 75

Dra. Harriet Freeman🔥

Vean esta bellísima ilustración de nuestra Ama, esa mirada es tan Harriet🔥🖤

Fue hecha por @soy_lucyk en Instagram.

CAPITULO 75

Harriet.

El calor que siento por todo el cuerpo me hace despertar, no tengo idea de que hora es, debe ser muy temprano porque no he escuchado la alarma sonar. Aline, que parece un maldito mono, se pega más a mi cuando me muevo queriendo apartarla. Es la razón por la que tengo tanto calor.

A las malas quito el brazo que rodea mi cintura y me quito haciendo que su cabeza, que estaba sobre mi pecho, rebote en la cama. Me vale mierda si se despierta, solo quiero quitarme el calor, me bajo de la cama sintiendo el frio suelo. Miro la hora, cuatro con treinta. Me quito el vestido quedando solo con las diminutas bragas, me recuesto en la cama que está frente a la que Aline duerme.

Estamos en el psiquiátrico, volví después de salir de casa de mis padres, pues me llamaron por una emergencia con un paciente. Poco a poco siento el calor y sudor desaparecer, intento dormir, pero ya no puedo. ¿Qué hago mientras? Es muy temprano para salir y comenzar a lidiar con la gente. Me levanto tomando mi bolso, saco el objeto de color rosa mientras deslizo las bragas por mis piernas, vuelvo a la cama.

Abro las piernas llevando una mano a mi vagina, la cual comienzo a tocar con mis dedos medio e índice, deslizándolos por mis pliegues semi húmedos, no estoy lo suficientemente lubricada como para meterme algo y se la manera más sencilla de mojarme en nada. Cierro los ojos y traigo a mi mente la enorme mano que amasa mis senos mientras la otra suelta una tanda de nalgadas contra mi culo que me dejan un rico ardor en la piel, la boca que devora la mía con afán, los gemidos mezclándose con los gruñidos y respiraciones agitadas. Lo mejor de todo, el orgasmo que me pone a dar vueltas la cabeza...

Dejo de tocarme y tomo el lush llevándolo a mi entrada, ya estoy empapada, lo deslizo dentro. Tomo mi celular enlazándolo con el objeto, abro la aplicación y lo pongo a velocidad media. De inmediato empiezan las vibraciones que desencadenan olas infinitas de placer por todo mi cuerpo, me muerdo los labios guardándome los sonidos de placer.

Subo la velocidad a lo más alto a la vez que llevo una mano a un seno estrujándolo y la otra se aferra a la sabana de la cama. Clavo la punta de los talones en la cama mientras el artefacto hace magia entre mis piernas y me vuelve un río, me pellizco los pezones dándome más placer, me retuerzo en la cama sintiendo cada maldita vibración más intensa y placentera. Aprieto las sábanas, mis senos, muerdo la almohada... me muevo de aquí para allá en la cama con las piernas temblando y el orgasmo cada vez más cerca. Presiono la cara en la almohada dejando salir los gemidos contra ella...

Me giro quedando boca arriba y siento una mirada sobre mí. Volteo encontrándome con Aline, quien me observa con la boca y los ojos muy abiertos, prendió la pequeña lampara que está al lado de la cama, la tenue luz que proviene de ella le deja ver parte de mi cuerpo desnudo. Sus lo recorren, el deseo haciéndose más intenso en ellos.