Harriet

CAPITULO 13

CAPITULO 13

Dorian.

Erlik mantiene su mano sobre la de Harriet apretándola ligeramente, debo admitir que estoy confundido por eso, el no soporta que nadie se le acerque, solo su hermana en algunas ocasiones, pero nadie más. Harriet también parece estar confundida, es que esto es sorprendente.

En el tiempo que lleva aquí jamás ha dejado que lo toquen, el simple hecho de que se acerquen a él lo altera. Alex mantiene la vista fija en la escena, el pendejo como si no lo supiera toco a Erlik, lo que lo altero e hizo que saliera corriendo.

El pendejo de Elian observa la escena con el ceño fruncido, el pendejo y Harriet iban, estaban cogiendo. Harriet lo disimula, pero el no. Se acostó con él y conmigo no, se pierde de mucho, nadie le hará sentir lo que yo.

-Ven -le susurra Harriet.

Esta se pone de pie, me es imposible no mirarle el culo cuando lo hace. Trae consigo a Erlik, quien se pega a ella como si así se sintiera seguro, Harriet pasa el brazo sobre sus hombros, son más o menos de la misma altura, comienza a caminar con él a su lado, aun sostiene su mano.

El detective, quien se quedó en la puerta para que Erlik no saliera, se hace a un lado dejando que salgan, camino detrás de ellos con el detective a mi lado, el vestido que lleva resalta todas sus caderas y es imposible no mirarle el trasero, todas las cosas que podría hacer con él me vienen a la mente poniéndomela más dura.

El detective también la está mirando, si quiere disimularlo lo está haciéndome pésimo. No lo culpo, es imposible no hacerlo, pero eso no hace que me agrade que la vea.

Nos detenemos frente al ascensor para subir al tercer piso, Erlik toma varias respiraciones profundas apretando la mano de Harriet, esta se gira un poco hacia el susurrándole que todo va a estar bien, este sigue dudando varios segundos antes de entrar, se va a una esquina. Entramos después de ellos, parándonos en la esquina contraria a ellos, marco el tercer piso, las puertas se cierran.

Apenas dura unos segundos en llegar, salimos de él, caminos un poco más hasta detenernos en la habitación, el detective la revisa antes de dejar que entren, lo hacen, dentro Erlik suelta la mano de Harriet, se sienta sobre la cama mirando a la pared frente a él, lagrimas comienza a deslizarse por sus mejillas, no dice nada, solo llora, siempre es así.

Un celular suena, el del detective, este sale corriendo sin decir nada. Harriet sale, cierro la puerta con seguro.

-El mejor psiquiatra, te está quedando grande -murmura comenzando a caminar hacia el elevador.

Me meto en este antes de que se cierren las puertas, en cuanto estas lo hacen presiono el botón para detener el ascensor, Harriet sonríe mordiéndose el labio, en un rápido movimiento me acerco a ella tomándola del cuello, la pego a la pared acercándome a su boca, mantiene la sonrisa.

-Yo no fui el estúpido que lo dejo salir.

-Pero si eres el estúpido que no puede lograr que su paciente confié en él, tus dones de psicópata también están fallando.

La estúpida sabe cómo hacerme enojar, que me hagan menos de lo que soy me molesta y mucho.

-No por nada soy el jefe de doctores y el mejor psiquiatra. Y, Harriet, estas retando a un psicópata.