Nuestra Hibrida (Quilates)

🦋 cap 46: La puerta de la vida 🦋

Después de haber hablado con los chicos y haberles contado un poco más de mi historia, volví a casa ya que debía hacer algunas cosas.

Al llegar fui directamente al cuarto que les hice a Venus y Blanca. Ambas dos estaban durmiendo, así que simplemente les deje su comida para mañana y les recarga el agüita.

Baje y me hice una ensalada, me llene una botella de agua y baje a la biblioteca… creo haber descubierto la respuesta que me faltaba.

Creo que la última llave será Rosa, ya que es otro de mis colores… pero que me poderío mostrar esta llave...?

Entre en mi biblioteca, y me dirigí a la mesa dejando allí mi comida y bebida. Mire las llaves y después al libro que estaba abierto en otra página de donde lo había dejado.

En ella decía algo, a lo cual mi respiración se volvió tensa y nerviosa.

“Falta poco pequeña hibrida”

Como mierda lo lograba? Como mierda lograba estar en todas partes? Era definitivamente la persona más molesta y psicópata del mundo… aparte de Peter Hale.

Volví a la página en donde me había quedado, era la página alado de la puerta que ya abrí… además descubrí que podía ver aquella “imagen” cuando quería.

La puerta alado de la puerta de la verdad  ya tenia su nombre…

“La puerta de la Vida"

Ahora si que estaba perdida… que color debía abrir la puerta de la vida… Verde? ¿Rojo?

Amarillo… amarillo felicidad, supuestamente se dice que la vida ahí que vivir la con felicidad…

Agarre la llave y con algo de nervios y tensión, la puse sobre la cerradura dibujada y después la giré… para nuevamente ver una luz cegadora...

Al cabo de unos segundos, me encontraba en la cabaña que antes era mi casa en Argentina. Pero esta vez estaba una mujer gritando y pujando, con ayuda de otras dos mujeres.

Me hacer que un poco más para reconocer a mi abuela, Abigail Reyes. Unos minutos mas de gritos, para después escuchar el llanto de un bebe.

La limpiaron y se la dieron a mi abuela, quien la recibió con una sonrisa cansada y de puro amor.

Abigail: mi hermosa hija, te llamare Olivia ~dijo y después se durmió con ella en brazos~

Acababa de presenciar el nacimiento de mi madre…

De un momento a otro empecé a ver todo borroso, para después aparecer en la misma cabaña, pero ahora con más personas…

Abigail: Robert, Olivia, es hora de comer ~grito mu abuela desde la cocina~
Robert: ahí vamos mama ~grito mi tío~

Unos segundos después aparecieron dos niños, uno de unos 8 años y una niña hermosa idéntica a mi de unos 5 años.

Se sentaron a comer junto a mis abuelos, Abigail y Marcus Reyes. Hablaban muy divertida mente, como si lo que pasaría dentro de unos años no fuera nada ahora.

Nuevamente vi todo borroso para encontrarme afuera de la cabaña, podía ver ahora a un niño 11 años y una niña de 8.

Olivia: mira Robert, ya puedo controlar mi poder ~dijo con una gran sonrisa~
Robert: eso es genial pequeña ~le dijo revolviendo su cabello~
Abigail: ¿Robert, ya preparaste tus cosas para Hogwarts?
Robert: si mama.
Olivia: ¿en serio te debes ir? ¿Que hare mientras no estés? ~pregunto con un puchero adorable la niña~
Robert: volveré pronto, ya veras.