Esta es la historia de una chica que es buscada por Alice Cullen, para ayudarla a que no lastimen a su familia. Alma Smith una chica hibrida que al llegar a Forks no solo encontrará un lugar donde quedarse sino también a 8 personas para amar. Pero...
Ya habían pasado 5 días desde que mi querido primo y ahora su esposa Cora, se habían ido a su luna de miel en Colombia.
Por ahora todo estaba tranquilo aquí, la manada Mccall ya se había vuelto a Beacon Hills. Y mis parejas volvieron a dormiré conmigo como ya nos habíamos acostumbrado.
Con el tema de las llaves y el libro, no había vuelto a bajar a mi biblioteca desde la discusión con mi primo… pero sabia que debía seguir con eso.
Albus había contestado mi carta unos días atrás, y como de costumbre su sabiduría me tranquilizo por completo.
Querida Alma: Entiendo tu preocupación, pero tal y como te dije e su entonces solo cuando abras las 7 puertas sabrás que te a preparado el universo… Con respecto a su magia y poderes… no se que decirte querida pero intenta practicar cada tanto y no hacer mucho esfuerzo para hacerte daño. Espero que mis palabras te hallan servido de ayuda, y cualquier cosa estoy aquí para ti linda.
Con cariño Albus Dumbledore.
Sus palabras siempre me sacaban un suspiro de tranquilidad… a pesar de que no me dijo nada que pudiera ayudarme en concreto.
Hoy había quedado con los chicos de ir a comer en algún restaurante de la reserva, para pasar un poco más de tiempo juntos.
Además debía empezar a prepara la sorpresa para Paul y Jared, no faltaba nada para sus graduaciones y todavía no me puse a pensar exactamente lo que haría…
Ahora mismo me estaba preparando para ir a una dirección que me mando Leah, era el restaurante donde nos encontraríamos.
Me duche, peine y cambie para después ir dirección a mi amada moto.
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Al cabo de unos 10 minutos ya estaba entrando en la reserva. Fui a la dirección que me mando mi chica y entre al restaurante y en menos de 19 segundos ya pude ver a mis parejas.
Me acerque t abrazo por detrás a Quil, que era el más cerca que tenia, le di un beso por atrás. Se dio la vuelta y me sonrió.
Salude al resto con un abrazo y un beso en la coronilla de los labios. Me senté entre Embry y Jacob, quien el último paso un brazo por mis hombros dándome un beso en la mejilla.
Jacob cada tanto era muy mimoso, el todavía estaba arrepentido con lo que hico meses atrás, y me demostraba todos los días lo tanto que me quería.
Leah: ¿como estas Alma? Alma: bien… tengo que hacer un par de cosas, pero bien ~dije dedicándole una sonrisa~ Paul: ¿que cosas? Alma: es un secreto ~dije y le giñe un ojo~ Quil: nos dejaste con intriga ~dijo y todos asintieron~ Alma: solo puedo decir, que es una sorpresa para Paul y Jared. Jared: que es?
No dije nada y me puse a ver el menú, mientras que todos intentaban sacarme que era aquella sorpresa tan secreta que escondia.
Al cabo de unos minutos llego un mesero de no más de 20 años, nos dedico una sonrisa coqueta a Leah y a mi, la cual se la devolvimos de forma neutra.
Mesero: buenas mi nombre es Matt y seré su mesero este día ~dijo intercalando su mirada entre nosotras dos~ Sam: si, bueno por ahora queremos bebidas ~dije serio igual que el resto de los chicos~ Matt: ¿bien, que quieren? ~nos pregunto primero a nosotras dos~ Leah: yo quiero un jugo de naranja. Alma: Yo Agua por favor. Matt: ¿genial, y para ustedes? ~dijo cuadrando los hombros y mirando a los chicos~
Los chicos pidieron lo suyo de forma de seria, el muchacho se fue y los chicos nos miraron a nosotras dos con algo de seriedad y molestia.
Quil: pir fivir ~dijo burlón a lo que dije antes~ Paul: muchas sonrisas y miraditas ~dijo igual~ Embry: un idiota. Sam: concuerdo. Leah: ay por favor, simplemente fue amable ~dijo divertida y yo asentí~ Alma: no se pueden poner así por cada camarero que nos atienda ~dije recordando a la chica de la cafetería~ Jacob: no nos hagas recordarla ~dijo de forma seria aunque me dio ternura~ Alma: bueno ya.
5 minutos después, llego el camarero con las bebidas nos tomo la orden de lo que queríamos comer y después de otros 15 minutos llego con toda nuestra comida.
Comimos entre risas y algunas conversaciones neutras de todo tipo de cosas. Pagamos la cuenta 6 nos fuimos a caminar un rato por el parque sentía de la reserva.
Básicamente pasamos toda la tarde juntos haciendo todo tipo de cosas, y recuperando tiempo perdido.
Cuando llego la noche, ellos vinieron a dormir a casa como ya de costumbre. A veces se hacían listas estúpidas para ver quien dormirá conmigo y el restos en los cuartos de invitados…
Si soy honesta, esto para mi ya era pura costumbre… y eso que lo llegábamos haciendo más menos 2 semanas.
Esta vez me tocaba dormir con Jacob, así que después de cenar y ver una película nos despedimos de todos y cada uno se fue a dormir.
Mientras que me cambiaba (con pura confianza), Jacob estaba acostado en la cama mirándome como bobo enamorada.
Alma: que tanto vez? ~dije divertida recortando me a su lado~ Jacob: lo afortunados que somos en tenerte ~dijo para después darme un beso esquimal~ Alma: te pones cursi? Jacob: cada tanto…
Después de esa conversación divertida y burlona, nos dimos un beso tierno y algo intenso. Que claramente subió de nivel cuando yo me subí encima de el.
El tenia sus manos en mi trasero y las bajaba a mis muslos apretandolos con delicadeza, mientras que yo las tenia en su pecho y cada tanto las subía a su nuca.
Pero decidí ser un poco mala con uno de mis chicos... antes de bajarme movi un poco mis caderas en su regazo y después me separe de el y para depositar un pico en sus labios y me recosté nuevamente en la cama dándole la espalda.
Podía sentir su confusión… y algo más que eso en sus shorts.
Jacob: en serio? ~dijo frustrado el lobito~ Alma: que? ~dije divertida pero sin darme la vuelta~ Jacob: Alma ~dijo en tono de queja~
No conteste y me hice la dormida… para después dormirme de verdad…
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