Capitulo 5

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Me quite los lentes y los puse sobre el escritorio, pase mis manos por la cara y solté un suspiro de frustración, estaba muy molesta con Raúl, como se le ocurría hacer un compromiso con Sebastián y al final salirme con que iba a ir con Omar al juicio, y para colmo yo tenía que atenderlo, en ese momento el timbre sonó y yo volteé a ver mi reloj, estaba segura que era el pues era justo la hora en la que había quedado en venir, de pronto alguien tocó la puerta.

-señora, la busca un joven llamado Sebastián Córdova, dice que tenía una cita con el señor.
-bajo enseguida Margarita, ofrécele algo de tomar.
-si señora.

Margarita se retiró y yo puse todo en su lugar, cuando llegue a la sala pude ver a Sebastián sentado en el sofá de espaldas a mi, tenía el cabello desordenado y ropa cómoda, de pronto un recuerdo invadió mi mente.

9 años atrás

-hola ____-dijo Edson sonriendo mientras cerraba mi casillero-te traje un regalito.
-no me interesa nada de ti-le dije dándome la vuelta pero el jalo mi cabello.
-no seas mal educada-yo le tire un manotazo para que me soltara-te lo hizo Sebas con mucho amor-dijo el entregándome una hoja de papel, pero no la hice bola y se la lancé a Sebastián en la cara, ya sabía que se querían burlar de mi-váyanse al diablo par de idiotas-me di la vuelta para caminar pero sentí como alguien jalo mi mochila y yo caí sentada.
-vaya que tienes fuerza Sebas-dijo Edson mientras ambos reían-lograste tirar a ___.
-imbeciles!-les grite pero vi como Sebastián me levantó el dedo de en medio mientras ellos se alejaban riendo por el pasillo.

Presente

Me acerqué a Sebastián y en cuanto el se dio cuenta de mi presencia se puso de pie y me sonrió.

-hola ____-dijo acercándose para darme un beso en la mejilla-estoy esperando a Raúl.
-hola Sebastián -le di una sonrisa fingida-Raúl no está, tuvo que ir a un juicio muy importante para el bufete y me pidió que te atendiera.
-bueno-dijo el encogiéndose de hombros.
-ven, te voy a mostrar el jardín-el asintió y camino detrás de mi.
-sabes, te ves mucho mejor con lentes-soltó de pronto y yo volteé a verlo-te da ese toque de nerd que tenías en el colegio.
-que? Ahora me vas a decir que en el colegio me veía bien de lentes?-el nego.
-la verdad no-dijo el y yo fruncí el ceño-pero no se, creo que ahora te va bien con tu porte de abogada.
-si, supongo que es eso-le dije sin darle importancia-este es el jardín-le dije cuando salimos-Raúl quiere que en el cuadro aparente que estamos sentados justo donde está la fuente-le dije y le di la fotografía-si quieres comenzar desde hoy mismo está perfecto o si gustas puedes comenzar mañana-le dije sin darle importancia.
-te molestaría mostrarme el jardín?-dijo el de pronto-es muy bonito.
-no, para nada-le dije y comencé a caminar con el por un camino.
-y tienes hijos?-me pregunto.
-no, aunque Raúl se muere porque tengamos uno-le dije-y tu?.
-si, bueno no-dijo de pronto y yo volteé a verlo.
-si o no?-le dije sin entender.
-mi ex-esposa y yo esperábamos a nuestro primer hijo hace un par de años-dijo el mirándome-en cuanto nació yo me enamoré del pequeño, era la luz de mi vida-dijo sonriendo-pero ella y yo nos divorciamos hace un año-dijo mirándome.
-y déjame adivinar, ella no te deja verlo-el negó.
-lo veo de ves en cuando pero no es mi hijo-yo pare en seco y volteé a verlo-nos divórcianos porque descubrí que el niño no era mi hijo-yo no sabía que decirle-a pesar de todo yo lo quería como si en verdad lo fuera y el me consideraba su papá asi que decidimos que yo podría verlo por el bien de el.
-lo siento-le dije apenada-creo que no debí preguntar.
-no te preocupes-dijo sonriendo-es algo del pasado-yo volteé incomoda a todos lados sin saber que decir-y como conociste a a Raúl?.
-yo comencé a trabajar en el bufete con el-le dije sin darle mucha importancia-y después de un tiempo comenzamos a salir-le dije.
-parece mayor que tú-dijo el metiendo sus manos a los bolsillo de su pantalón.
-si, solo unos cuantos años-le dije encogiéndome de hombros-pero eso me gusta, lo hace un hombre maduro y detallista.
-yo creo que eso es más de la personalidad que de la edad-dijo el.
-tal vez tengas razón-le dije-el siempre fue un caballero conmigo, siempre me a tratado muy bien.
-supongo que no te diviertes mucho con el-dijo y yo volteé a verlo.
-claro que me divierto con el, que te hace creer lo contrario?-le dije a la defensiva.
-no me malinterpretes-dijo levantando las manos es señal de paz-parece un buen tipo.
-lo es-le dije un poco molesta.
-alguna vez has recorrido la ciudad en motocicleta?-dijo el-o has hecho algún tipo de locura con el?-yo lo mire con el ceño fruncido.
-para ti eso es la diversión?-le dije mirándolo mal-vaya que estás mal-dije volteando a otro lado.
-las cenas en lugares finos y elegantes son bonitas-dijo el de pronto-pero hay otro tipo de cosas que también te pueden hacer feliz-de pronto un mensaje entro a su teléfono y el me miro-me tengo que ir, nos vemos mañana para comenzar con lo que tu novio pidió-dijo el.
-te acompaño-le dije pero el negó.
-no te preocupes, conozco la salida-dijo y camino de regreso a la casa, de pronto cuando creí que ya se había ido sentí su respiración en mi nuca-sabes, hacer el amor en lugares inesperados también es algo muy divertido-dijo el, podía sentir como su respiración chocaba con mi oreja y la piel se me ponía de gallina-deberías probarlo.

Yo cerré los ojos y sentí como se alejaba dejándome con una sensación inexplicable por todo el cuerpo.

Un Giro Inesperado (Sebastián Cordova y TN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora