Un Giro Inesperado (Sebastián Cordova y TN)

Capitulo 26

Me subí al auto de Sebastián y me puse el cinturón de seguridad, al otro lado se subió Sebastián y me sonrió.

-y que tal te pareció el tratamiento que nos hicieron?-me pregunto el.
-me encanto-le dije sonriendo-siento mi piel más fresca y el verdad me relaje-le conteste sonriendo.
-bueno pues creo que fue un buen premio el que escogieron Sofi y Edson-dijo el poniendo en marcha el auto-por cierto vamos a casa de Jorge y Linda-me dijo y yo volteé a verlo.
-porque?-le conteste pues no me había dicho nada.
-es que hoy va a haber partido y siempre nos juntamos para verlo juntos-me contesto-y las chicas me dijeron que tenías que ir si o si-yo reí al escuchar esas palabras que estaba segura que eran de Linda.
-no pensaba negarme-le dije sonriendo-así que vamos.

El puso música mientras se encaminaba a casa de los chicos, la verdad necesitaba despejar la mente por un par de horas pues estos días habían sido difíciles, había intentado comunicarme con Raúl pero siempre estaba "ocupado" y sinceramente no sabía que pensar pues en otras ocasiones las cosas eran así pero ahora al saber que Daniela estaba en ese viaje y el no me había dicho nada todo me hacía desconfiar, cuando llegamos Jorge nos abrió la puerta y nosotros entramos.

-hola a todos!-dijo Sebastián cuando entramos a la sala donde ya estaban todos los chicos reunidos.
-y como le hiciste para convencer a la amargada de ____ de que viniera?-dijo Sofi riendo.
-déjame decirte que no tuvo que convencerme-le dije mirándola mal-yo si pensaba venir.
-que bien-dijo ella sonriendo-y como les fue en el Spa?-nos preguntó y yo me senté a un lado de ella.
-bien, todo estuvo genial-le dijo Sebastián dentándose a mi lado-ya estamos más que listos para mañana.
-estoy tan feliz-dijo Sofía mirando a Edson-estamos a un par de horas del gran día-dijo ella y Edson se acercó a darle un beso, yo sonreí.
-estás dos ya van a comenzar a derramar miel-dijo Alexis rodando los ojos mientras los demás reíamos.
-envidioso-le contestó Edson mirándolo mal.
-lamentó mucho decirles esto pero el partido ya va a comenzar así que cállense-dejó Hirving subiendo el volumen de la televisión.

La verdad yo no sabía casi nada de fútbol pero me pude dar cuenta que Jorge, Sebastián y Edson le iban a un equipo mientras que Hirving y Alexis estaban apoyando al equipo contrario, nosotras sólo nos limitábamos a ver y por lo visto ninguna entendía nada, cuando llego el medio tiempo decidimos ir por algunas botanas a la cocina.

-no puedo creer que el partido esté empatado-dijo Alexis evidentemente molesto-se han salvado de 2 goles!-le dijo a Jorge y el rio.
-tenemos al mejor portero-le contestó metiéndose una papa frita en la boca, en ese momento mi celular sonó dándome a saber que tenía un mensaje.
-que raro-dije frunciendo el ceño mientras veía un número desconocido.
-que pasa?-me pregunto Ana que estaba a mi lado.
-un número desconocido me mando una foto-le dije desbloqueando mi teléfono.
-y qué es?-me dijo ahora Sebastián.
-tal vez sea una foto inapropiada de un número desconocido-dijo Paula riendo-miren si cara! Yo creo que si es eso-dijo ella al ver mi cara.

Yo no sabía que decir, la fotografía era de Raúl y Daniela, estaban abrazados y reían juntos, esa fotografía era reciente claro que si, sentí como mi estomago se revolvía al sólo ver sus caras como si fueran una pareja feliz no pude evitar que las lágrimas se acumularan en mis ojos, a eso se había ido a Londres? A divertirse con Daniela.

-hey qué pasa?-dijo Linda acercándose preocupada a mi, no había dicho nada pero al levantar la vista y ver a todos con cara de preocupación.
-que viste?-me dijo Sofi pero al no contestarle me quito el teléfono-hijo de su-pero la mano de Edson no dejó que terminara la frase.
-dame eso-le dije quitándole el teléfono y marqué el número de Raúl.

Raúl:hola amor, discúlpame 15 minutos y te regreso la llamada, estoy un poco ocupado.
___:supongo que estás muy ocupado abrazando a Daniela.
Raúl:de que me estás hablando.
___:me mandaron una foto tuya con Daniela.
Raúl:pero no entiendo de que me hablas.

Corte la llamada y le mandé la fotografía en un mensaje, a los pocos segundos me entró una llamada de el pero no conteste.

-chicos yo me tengo que ir-les dije poniéndome de pie y tratando de guardar la compostura-Donde esta mi bolsa-dije desesperada buscándolo.
-tranquila-me dijo Sebastián acercándose a mi-yo te llevo a tu casa pero primero tranquilízate.
-no, yo me voy sola-le dije-tomando mi bolsa del respaldo de la silla.
-____, no te puedes ir sola-dijo Sofía mirándome.
-en verdad chicos solamente necesito estar sola-les dije-Sofi, te prometo que mañana todo va a estar bien y no te voy arruinar tu boda.
-amiga no es eso-dijo ella acercándose-al menos permite que Sebas te lleve.
-no-le conteste-nos vemos mañana.

Salí de la casa muy molesta y triste, no sabía que era lo que estaba pasando entre Daniela y Raúl pero en verdad no podía ser nada bueno, camine por las calles de la ciudad pues la brisa fresca me ayudaba a despejar la mente, sabía que era una locura irme hasta mi casa caminando pues estaba lejos de aquí pero no me importaba, cuando comencé a salir con Raúl yo le advertí que no iba a soportar los maltratos verbales y las infidelidades que su madre si soportaba, después de casi 20 minutos caminando y ya estando muy serca de mi casa sentí como si alguien me viniera siguiendo, volteé disimuladamente y efectivamente entré la oscuridad había una figura que parecía ser de un hombre que caminaba detrás de mi, yo apresuré el pasó pero esa persona también lo hizo, de nuevo volteé pero pare en seco al ver que la persona que me seguía era Sebastián.

-Sebastián, porque me estás siguiendo?-dije al comprobar que era el.
-no quería que volvieras sola a tu casa-dijo el acercándose a mi-te puede pasar algo.
-estoy bien Sebastián-le dije abrazando mi cuerpo por el frío.
-no te veías bien cuando viste la foto de Raúl y esa mujer-dijo el quitándose su chamarra para ponérmela sobre los hombros.
-yo no se con que cara le reclame a Raúl si yo me bese contigo-le dije y el no contestó nada, parecía que también el estaba pensando.
-no se que decirte-me dijo finalmente después de unos segundos de estar callado.
-no tienes que decirme nada-le dije encogiéndome de hombros-necesito hablar con Raúl y saber que fue lo qué pasó pero ahora no estoy de ánimo.

El no dijo nada y simplemente me abrazo, yo recargue mi cabeza en su pecho y envolví mis manos en su cintura sintiendo una paz increíble al tenerlo tan cerca.