Capitulo 49

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Sebastián

Me encontraba sentado frente a Jorge, había pasado a visitarlo si así se le podía decir a su trabajo y justo ahora me estaba dando un sermón que deseaba que ya terminara.

-no sabes lo molesta que está Linda conmigo-me dijo el suspirando-casi me manda a dormir a la sala.
-me imagino-le dije suspirando-solo espero que esto funcione.
-pues si lo que querías era comprobar que le dolía si está funcionando-me contestó y yo lo miré mal.
-lo qué quiero es que se de cuenta que me ama a mi y no al idiota ese con el que se piensa casar-le dije molesto y tome un poco de café-viste que se atrevió a invitarme a la boda?.
-si, aunque ____ no parecía muy de acuerdo que digamos-me contestó con una mueca-sabes, a mi si me dio pena ver su expresión cuando te vio con Fabiola, trato de disimular pero fue muy obvio que le afectó.
-lo se-le dije y recordé al instante su expresión-no sabes como me arrepentí cuando vi su carita pero ya no podía echarme para atrás.
-y que es lo siguiente?-me pregunto.
-no lo se-contesté pensando que no tenía un plan definido del todo-supongo que seguir dándole celos hasta que reaccione.
-te diste cuenta que ya se le nota el embarazo?-me pregunto y yo sonreí como tonto.
-si, se veía hermosa-le dije suspirando y recargándome en la silla-cuando la vi me pareció mucho más hermosa que antes, me hubiera encantado tocar su pancita-le dije y cerré los ojos para visualizar mejor lo que me hubiera encantado hacer.
-ay hermano, estás perdido por esa mujer-me dijo el riendo-Mira que pensar que es tierno ese pequeño frijol que te separo de ella.
-no es culpa del bebé Jorge-le dije mirandolo-ese bebé jamás iba a ser un problema entre ella y yo, sabes porque?-el negó-porque iba a ser el hijo de la mujer que amo.
-y del hombre que odias-me contesto.
-para mi pesa más el amor por ella que el odio por Raúl-le conteste-bueno me voy porque tengo que llevarle unas cosas a Bruno que me pidió-le dije poniéndome de pie.
-ahí va Córdova, el hombre que es feliz adoptando hijos ajenos por amor-yo tome la pelota antiestrés de su escritorio y se la lancé.
-ya veras que en un futuro voy a tener un hijo con mi sangre con ____-le dije caminando a la salida.
-si, soñar no cuesta nada-me gritó pero yo solo lo ignoré y me fui a casa de Vanessa.

Pase a dejarle lo que me pidió y me quede un rato con el jugando en el jardín, después de eso volví a casa, hice todas las cosas que tenía pendientes y cuando termine me fui a mi cuarto, cuando entré vi el cuadro que tenía colgado de ____, suspire y pensé si en verdad algún día íbamos a poder estar juntos.


____

Mire la tienda y suspire con fastidio para después entrar, había decidido venir a buscar el vestido así que le avise a Raúl y vine a una de las boutiques que había en el centro de la cuidad, en cuanto entre una chica se acercó rápidamente a mi.

-hola, bienvenida-dijo amablemente-le puedo ayudar en algo.
-si, estoy buscando un vestido de novia-ella sonrio complacida-lo necesito para dentro de 3 semanas.
-tenemos muchos modelos que estoy segura que se la verán hermosos-dijo ella sonriendo-busca algo en especial?.
-quiero un modelo discreto-le dije y ella asintió-ya sabes no muy grande.
-ya veo, tal vez le interese alguno de estos modelos-dijo ella caminando al fondo de la tienda donde tenía muchos vestidos que eran más pegados al cuerpo-que le parece este?-dijo mostrándome uno en corte sirena que era realmente lindo.
-es muy bonito pero creo que está un poco escotado-le dije mirándolo pues sabía que la familia de Raúl me iban a comer viva si compraba ese vestido ya que era con la espalda descubierta y bastante escotado de frente.
-también tengo este que es muy distinto-dijo ella sacando un vestido que era mucho más discreto y era bonito.
-este me parece apropiado-le dije.
-le gustaría probárselo?-me pregunto y yo asentí-acompáñeme.

Yo fui con ella a los vestidores y con su ayuda me lo probé, la verdad parecía mandado a hacer especialmente para mi pues me quedaba como anillo al dedo,  no quise ver mas vestido pues este me gusto y me parecía apropiado para la ocasión, después de un rato por fin salí de ese lugar con el vestido, aproveche que estaba fuera de casa para ir a una salon de belleza y apartar con la chica que era mi estilista el día para que me maquillara y me peinara, después de estar prácticamente todo el día fuera por fin pude volver a casa, cuando llegue metí al armario el vestido donde ya estaba el traje de Raúl, yo toqué la tela del vestido y sonreí, la verdad es que si era muy bonito al igual que el traje de Raúl, un ruido me saco de mis pensamientos así que salí a la sala donde estaba Raúl que acababa de llegar, lo saludé y le conté lo que había hecho durante todo el día, conforme los días pasaban yo me sentía más nerviosa pues cada vez estábamos más cerca del "gran día" me ponía los nervios de punta ver como cada vez faltaban menos cosas, a pesar de que trate de oponerme finalmente la boda se planeó en un salón de fiestas, yo le pedía a Raúl que fuera en el jardín de su casa pero el se negó ya que decía que no pensaba casarse en su casa, finalmente el día más esperado por el y más temido para mi llego, ese día me fui a casa de mis papás pues ellos quería que saliera de su casa para entregarme en matrimonio con Raúl así que muy temprano llegue a su casa donde me iban a preparar para la boda.

Un Giro Inesperado (Sebastián Cordova y TN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora