Red De Mentiras-James Potter

Luna llena

Capítulo 22
Luna llena.

12:00 am

Tome mi bata que estaba al lado de mi cama, todas ya estaban dormidas y la luna llena se asomaba entre las nubes, tome unas vendas y pociones que había dejado ya listas al lado de mi cajón junto con una cobija, tome mi varita y susurre.- Lumos – Salí de la sala común procurando que Filch y su gata no me encontraran, el frio se sentía estaba sentada cerca del sauce boxeador esperando dejar de escuchar los aullidos que salían, sabía que no pasaría ningún peligro Remus me explico que el sauce boxeador tenía un pasadizo para llegar a la casa de los gritos y desde que no entrara en ella no me pasaría nada.
Frote mis manos en un intento de darme calor me envolví en la manta para así sentir menos frio en momentos como esto me arrepiento que no nos han enseñado aun hacer un hechizo de calor.

Escuche unas pisadas venir hacia mí pero no veía absolutamente nada seguramente era la falta de sueño o simplemente estaba algo paranoica.
Mire el cielo estaba teñido de estrellas pero lo que más brillaba en ese momento era la luna que ahora estaba completamente llena, poco a poco esta se metía entre las nubes hasta que se perdió de mi vista y los aullidos eran más suaves y llego un momento en el que no escuche nada espere un poco más antes de entrar, pero algo me detuvo y ese algo tenía varios pies, pero solo eso se podía ver. Vi cómo se escabullían por el pasadizo y los seguí prontamente cuando estaba lo suficientemente cerca trate de tocar algo, mis manos sintieron una suave tela y sin esperar más la jale esperando ver algo, lo que vi me lo esperaba pero lo que no era que tuvieran una capa de invisibilidad, James, Peter y Sirius quedaron inmóviles tan pronto como les quite la capa, los mire con una ceja alzada mientras me cruzaba de brazos.

-Layra, pero que linda sorpresa – Sirius rasco su nuca nerviosamente mientras James se quitaba las gafas y se refregaba sus ojos.
-Diría lo mismo pero no me gustan las sorpresas y tampoco las mentiras -
-Bella Layra realmente estas obsesionada – dijo James.
-¿Obsesionada? – Mi cara se llenó de confusión haciendo sonreír más a James
-Claro cariño nos has seguido hasta aquí, si quieres un cita solo dímelo deberíamos conversar esto afuera no lo crees dulzura – James me tomaba de los brazos haciendo un mínimo de fuerza para empujarme.
-James sé que soy terriblemente deslumbrante pero no soy un espejo como para que andes diciéndote eso, estoy segura que Sirius a de traer un espejo consigo si quieres él te lo puede prestar y sigues practicando tus coqueteos, pero ahora quítate yo vengo por lo mismo que ustedes –
-¿Vienes por Remus? – la pregunta de Peter hizo que James y Sirius se golpearan sus frentes con la palma de la mano.
-Peter estaba funcionando de maravilla no vez que Layra se lo estaba creyendo – Dijo James pasando su brazo por sus hombros mientras nos adentrábamos a la casa de los gritos.

Revisamos cada una de las habitaciones hasta que, encontramos a Remus, al ser yo la primera en verlo quite mi mirada rápidamente al verlo tirado en el piso prácticamente desnudo.

-¡Chicos, lo encontré! – grite para que se dirigieran, Sirius fue el primero en llegar y le tendí la manta que había llevado para que lo arropara.
-Ya puedes voltear Layra – efectivamente Remus ahora estaba con la manta, soltaba pequeños quejidos.

Mientras yo me dirigía el, James y Peter abrieron su maleta sacando vendajes y trapos para limpiarlo. Abrí mi maleta sacando pociones que madame Pomfrey me había dado para Remus y las coloque en la lúgubre mesa que estaba en la habitación.
Ninguno hablo todos estábamos en nuestros asuntos los chicos sanando a Remus mientras yo organizaba en orden las opciones que debía tomar.

-¿Layra que haces? – Me pregunto Sirius al verme sacar un cuchara.
-Remus tiene que tomar unas pociones, necesito ver si se rompió algo durante su transformación o si al contrario solo le debo dar algo para el dolor. – Explique mientras tomaba mi varita tal y como Pomfrey me había dicho que hiciera.

Llevamos a Remus a la enfermería para que le dieran el resto de cuidados y terminara de curarse.

-Gracias pero deben ir a dormir, deben de estar cansados y si no se van Pomfrey los echara – Remus nos explicó mientras tomaba un poco de agua.

Fui la última en despedirme y nos fuimos hacia nuestra sala común, las escaleras parecían interminables, agradezco no ser Ravenclaw si me canso subiendo las escaleras de Gryffindor no me quiero imaginar subiendo esas, Sirius dio un bostezo contagioso, cuando nos íbamos a dirigir a nuestras habitaciones Sirius se despidió dándome un beso en mi coronilla. –Gracias Layra, descansa - Peter me dio un asentimiento de cabeza pero James se quedó parado mirándome.

-Layra como lo sabias – me miro intrigante haciendo que mis sentidos se alertaran debido a su pregunta.
-Lo sospeche y lo confirme, Remus realmente es malo mintiendo me entere hace poco, descansa James – le dije mientras me acercaba levemente hacia él.
-Descansa Layra y gracias – lo vi estirar sus brazos y levante una ceja, yo le pase su capa.
-Olvidaste guardarla toma y no te voy abrazar James – dije mientras rodaba los ojos y el soltaba una pequeña risa.
-Siempre tan cariñosa mi querida Layra –