Zombie (OhmFluke)

interesante francotirador

-siempre supuse que no eras buena compañía - mirando a Kao con enojo - no quise darme cuenta, creí que solo eran imaginaciones mías... pero veo que no es así.

-Ahora que lo sabes, baja tu arma y ponte de rodillas - ordenó.

Cinco guardias entraron a la habitación, todos armados y detrás de ellos venia Sam, el aliado de Kao.

Ohm bajó lento el arma y el cuchillo en la funda y los colocó en el suelo.

-Muy bien... Así es - Sam habló mientras daba una vuelta alrededor del que estaba de rodillas.

El plan de ellos era asesinar a Ohm, a Gulf y Mew, después ir por fluke y con el que estaba y quedarse con las armas e ir rumbo a aquel refugio que estaba más lejos pero era más seguro.

-En un principio creí que no vendrías por tus amigos - agarrando del cabello a Ohm.

-Solo déjenlos ir, ya estoy yo aquí, dejen que se vallan. - decía el que estaba de rodillas sintiendo como la punta de una pistola estaba tras su cabeza.

-Cierra la boca o haré que te tragues una bala- amenazó Kao - unos de mis hombres están de camino a donde escondiste a fluke y Boun.... y van a encontarlos - con una sonrisa malvada en los labios.

-Mátame a mi!! Que esperas maldito!- Ohm no quiso escuchar más.

El solamente pensar que en ese momento era impotente le hizo actuar como idiota, pues Sam le ató las manos con cuerdas que tenían alambre.

Lo tomaron de los brazos mientras que éste intentaba liberarse, pero eran muchos y no podía con todos, kao lo encadenó al lado de Mew y Gulf que también estaban indefensos, amarrados a un muro de cemento y con la boca pegada con cinta adhesiva.

Su arma y cuchillo en el piso sólo eran como nubes en el cielo, su única defensa ahora estaba a metros de él, con las manos atadas y sus pies con cadenas.

"-piensa en algo...o fluke morirá.."- por más que Ohm intentaba desatarse no podía.

Enfrente de ellos, estaban los traidores riéndose de manera cruel mirando como ahora los tres habían terminado en el mismo modo.

-vendremos a matarlos en unos minutos; disfruten del tiempo que les queda - Sam y sus hombres salieron por la puerta cerrando ésta con seguro.

Los presos se quedaron solos y Ohm se apresuró a idear una manera de escapar.

-Alguien de los dos tiene algún hueso fracturado?- preguntó el que no tenía sinta adhesiva en los labios

Los dos movieron la cabeza diciendo que nó.

-Bien, entonces podemos salir de aquí...-el alto decía sin dejar de raspar en la pared la atadura de su mano.

"No se puede, no podrás salir de aquí nunca..., Sólo mira la forma en que estás..."

Los pensamientos negativos estaban llenando su cabeza, pero algo dentro de ella también le hizo tallar el alambre de sus manos con más fuerza sobre la pared.

Pasaron unos minutos y después de forcejear sus muñecas, Ohm las tenía sangrando y de color morado...

De repente la puerta se abrió.

-Alto ahí, que pensabas hacer Ohm?.-Sam se agachó y lo agarró fuerte del cabello - ahora mírame - acercando a la garganta del de cabello negro un cuchillo afilado.

Cuando de pronto..., Una bala se clavó en la cabeza de Sam, soltando el cuchillo en segundos.

La sangre de su enemigo salpicó la cara de Ohm y su rostro quedaba de color rojo, mientras que el fallecido despedía sangre de sus oídos, nariz y boca.