Zombie (OhmFluke)

en vida o muerte

El lo sabía, su novio también. Nada era seguro, pero, aún así, se aventuraron en el enredado mundo de los sentimientos, del amor y la pasión,  la felicidad...

Y ahora, Ohm se encontraba caminando por aquella cuadra sucia con olor a abandono y humedad.

Miraba firmemente hacia adelante, no quería ver el estado de fluke en ese momento.

Era tan pálido como la nieve y se ponía severamente frío, aunque sus manos seguían adherida a su camisa, sabía que pronto lo soltarían.

Cosa que le hacían al chico alto volar la cabeza de tanto dolor interno,  no quería perderlo.

Llegó ese instante en que los dedos de fluke dejaron de hacer fuerza sobre la ropa de Ohm y se hacia cada vez más débil...

Así que él se arrodilló en el suelo y dejó caer su mochila a un lado mientras le daba toda la prioridad del mundo a su pequeño chico.

Enfoco su mirada aterrada y melancólica al contrario.

—tranquilo, respira, ya casi llegamos...!

Desesperadamente rompió su ropa y la puso sobre el cuello de fluke, al momento que una gruesa lágrima de coraje e impotencia se deslizaba hasta caer sobre el piso.

—vamos, resiste,  falta poco, seguro Sammy te dará algo para detener la infección...

—ya no, ya no hay oportunidad para mi,  debes irte cariño...— sus palabras débiles y casi inaudibles.

—¡¡¡No!!! Jamás te dejaría aquí, no pienses eso, no te va a suceder nada malo, me encargaré de que no pase — sollozó el chico alto abrazando aún más fuerte a fluke.

En lo que esa humedad de aquella sangre invadía su piel ahora que la camisa estaba rota.

Con el alma en pedazos, Ohm se resigno a seguir, si fluke iba a quedarse ahí entonces él también..

Así que solo se quedó en esa posición, abrazando el frío cuerpo de su amado.

Le acomodó el cabello como solía hacerlo, con una ternura y delicadeza tan pura, que no trasmitía más que amor para él.

El cielo casi anaranjado del atardecer estaba sobre ellos, ambos habían decidido que estarían juntos para siempre, ya no había nada más que esperar.

—te amo, más de lo que puedes imaginar cariño, lo sabes bien...

Fluke simplemente trataba de sonreír, aunque ya no podía hacerlo correctamente pues su piel se ponía cada vez más tiesa y helada.

Cuando de pronto, los pasos de alguien corriendo se escucharon desde ahí.

—¡Ohm! ¡fluke! Que demonios están....—Mew quiso seguir, pero lo que vio no se lo permitió.

En el suelo yacían los dos chicos, el uno llorando en silencio y el otro parecía dormir, solo que aquellas manchas de sangre en su cuello parecían frescas.

Segundos después Prem salio detrás del callejón.

—¿que ocurre? ¿Lo mordieron?— dijo al llegar.

—al parecer sí. Quédate atrás, yo me encargo —se dirigió Mew.

Acercándose lentamente a Ohm se dio cuenta que en efecto, había sucedido una gran tragedia.

—Ohm...lo siento. Sabes tienes que dejarlo...

—¡cállate! ¡Aléjate de nosotros, toma la pieza y vallanse de una vez! Se está haciendo tarde...

—no vamos a dejar que te quedes...!

—¡es mi maldita vida! Y yo quiero quedarme aquí,  así que no iré con ustedes!

Aquello era más difícil de lo que se pensaba, Ohm no estaba dispuesto a abandonar a fluke,  ni en un universo alterno.

De pronto, los labios resecos de fluke se abrieron tan solo un poco, y consiguió decir lo último de su vida.

—vete...Ohm, vete...

—¡¡No!! Fluke...fluke mírame, estoy contigo todavía, y aquí voy a seguir!

—vete por favor...Te amo...

—¡No..! No...—rompió en llanto.

Dijo justamente antes de sonreír por vez última y cerrar sus ojos definitivamente, su corazón se detuvo, y se quedó quieto en la misma posición.

Parecía un bebé dormido, solo parecía dormir, únicamente tenía algo de sueño, estaba cansado...

Vivir y morir, ambas incluían llanto y dolor.

Pero él sentía angustia por ello.

El triste atardecer levantaba polvo, pues el viento comenzó a soplar.

Un tanto gélido, seco...

Y el cabello de fluke se movía lentamente con el aire, al mismo tiempo que abría con demasiada lentitud sus ojos, nuevamente.

...Ohm se perdió en el bonito color azul del iris de aquel zombie.

Un color de ensueño.

Divino pigmento que nunca nadie vio...

Plateado y azúl hacían una combinación bellísima, algo indescriptible.

Una nueva criatura hambrienta de sangre empezaba a formarse en sus brazos aún, quieto y sereno, tranquilo al momento, trataba de incorporarse con lentitud extrema.

—bien, es tu decisión. Pero no me parece buena elección!— gritó Mew.

Segundos después le dio un golpe en la cabeza para dejarlo inconsciente y así poder salvarlo.

Pues fluke comenzaba a mover la cabeza y trataba de ponerse de pie para morder a su nueva presa.

—seguro lo agradecerá!— Prem contribuyó.

Entre los dos lo llevaron con ellos y tomaron la pieza de su viejo vehículo.

Enseguida comenzaron a huir de aquel muerto viviente que recién conseguía ponerse de pie.

Con trabajo y torpeza, sus rodillas frías, articulaciones muertas, le pedían ir por comida...

Al llegar, contaron a Sammy lo ocurrido. Tristemente nada se podía hacer, únicamente el llanto demostraba lo mucho que les partía el alma.

Emprendieron el escape a las 5:22 de la tarde. Y entraban al puerto donde estaban varios barcos hundidos y cientos de zombies en el agua.

Así que se alejaron un poco tratando de hallar otro bote.

Cerca de ahí un velero pesquero esperaba por ellos.

—¡vamos, bajen de prisa,  ellos se acercan! —Mew salio del coche y su grupo con él.

Entraron al barco y eliminaron a los cuatro infectados que aún seguían dentro.

—Prem, enciende el motor ya! Sammy coloca seguro a la puerta!..retiren ancla!!

El hombre que estaba al mando ahora tomó el timón y todos partieron en aquel atardecer.

El cielo rojo lloró sangre en aquel sombrío momento, y el barco se alejaba de la felicidad de un hombre valiente, y un ángel caído razón de la emoción y la canción de su corazón...

Hola chicxs!!! Había perdido la cuenta pero la he recuperado, gracias a los que aún leen la historia. C les quiere 💗