Zombie (OhmFluke)

tienda.

Gun, frente a ellos, diferente a como lo conocían.

Cicatrices en sus brazos y con un lanzallamas en sus manos.

La gente cambia, si el mundo entero lo hace...

Off soltó la metralleta que tenía agarrada y miró a los ojos a Gun.

Sin decir una sola palabra, corrió hacia y él lo abrazó.

¿Que era aquello? Lo había encontrado, estaba a su lado y estaba vivo.

Era como si lo hubiera sabido desde el principio.

Soltó lágrimas en el hombro del de menor estatura y no lo soltó por ningún segundo.

-estas vivo, Gun, estás vivo...- decía abrazándolo.

-si...si, aquí estoy, sigo con vida- le contestaba demasiado feliz de poder volver a verlo.

Aquella felicidad, fue tan incomparable que todos sonrieron por aquel encuentro hermoso entre aquellas personas.

-me alegro de verte- le dijo Ohm.

-y yo de verlos a ustedes - comentó.

Y en lo que ellos tenían un grato momento, Sammy rompió a llorar cuando vió al bebé tirado en el suelo con el cuello partido.

Pues la explosión le había hecho soltar al pequeño.

Se miraron en silencio y cavaron otro hoyo donde sepultaron al bebé, que no vivió más horrores del futuro.

Horas después, Off junto a Gun caminaban juntos detrás del grupo, tenían mucho de que hablar.
Todas esas noches en soledad, desearon estar el uno al lado del otro, y eso no había sido realidad, pero ahora lo era.

Sobre la carretera, de noche, hicieron una fogata donde alrededor se sentaron a descansar.

Todos tenían algo que contar, habían cambiado, incluyendo su aspecto.

¿Que había de aquel chico alto? Tenía el cabello algo largo, la mayoría lo tenía así. Su barba había crecido, pero a fluke se le hacía muy lindo, si era Ohm, amaba todo de él.

En cuanto al castaño, sus cabellos delgados estaban algo largos, arriba de los hombros, y para Ohm era lo más bello que había podido ver en toda su existencia...

Se abrazaron en aquella noche, a la luz del fuego, esperando la madrugada.

Y llegada la mañana, aquel recorrido seguía.

-por cierto ¿No te encontraste a Prem?- preguntó Ohm.

-lo ví una vez, estaba en problemas, alguien lo había atacado y le hizo una herida en la mejilla...me dijo que simplemente seguiría la carretera hasta las vías de tren- contó Gun.

-entonces debe estar cerca, iremos a buscarlo- respondió.

Dieron vuelta en una encrucijada y fueron hacia la estación de tren, dónde había escombros y dos errantes.

Pero, a unos kilómetros, se veía una columna de humo...

Rápidamente se movieron hasta aquel lugar, y llegaron a unas chozas mal construidas. En medio de lo que parecía ser un patio, estaba un caldero con ingredientes y a punto de hervir.

Buscaron entre las cabañas vacías a alguien con vida, pero solo había hierbas y especies de humo para llamar a espíritus.

De pronto, de una de las chozas, salió un hombre salvaje, pues así aparentaba.

Tenía las greñas largas y tatuajes primitivos en su piel.

Luego, sacó una lanza inmediatamente.

-no se muevan, o serán nuestra cena- anunció el sujeto.

Ohm sacó su arma y quitó el seguro, poniendo presión sobre el sujeto extraño.

-solo queremos saber...si tienen aquí a un tipo de cabello negro, tenía una herida en la mejilla- dijo el alto, pacíficamente.

-tal vez....devoramos a un tío así ayer...- río.

Aquellos hombres estaban locos, pues al carecer de alimentos, se comían a la gente que pasaba por ahí.

En cuestión de minutos, cinco personas con taparrabos se pararon a una distancia lejana, traían lanzas y hondas para atacar...

A la señal de Mew, todos se retiraron velozmente de aquel lugar funesto, y regresaron al camino.

Pasaron entre las hierbas y palos, se hicieron algunos rasguños, pero no pasó a más.

Habían avanzado algunos kilómetros, y estaba un automóvil de refrescos volcado a la orilla de la carretera.

Entre todos, lo pusieron sobre las llantas y, para suerte, éste funcionaba a la perfección. Y le quedaba algo de gasolina.

Ohm sacó al enfermo que estaba aún con el cinturón de seguridad y le disparó a la cabeza.

Sobre ruedas, el grupo avanzó durante la tarde.

Comieron la comida en lata, y bebieron la soda de aquel camión. Pero mientras descansaban, estaban alerta de cualquier cosa que pudiera pasar momentáneamente. Nunca se sabía que podría llegar a pasar al bajar la guardia.

Al otro día, mientras Ohm conducía, el día parecía ir tranquilo. Fluke bajó los vidrios del camión y dejó que entrara aire fresco. Pero lo único que entró fue polvo, así que volvió a cerrarla.

Y al avanzar por kilómetros, a lo lejos podía verse un campamento, muy grande. Estaba rodeado de láminas de metal que protegían el lugar.

El grupo se bajó del camión y Ohm tomó la mano de fluke para ayudarlo a bajar del vehículo. Aunque no lo necesitara, era un caballero con él.

Escondieron el automóvil entre la chatarra que abundaba en el camino, era casi imposible de predecir que un camión en buen estado fuera a estar por esos rumbos.

Miraron desde donde estaban aquel gran fuerte que aún permanecía en pie.

-iremos allí, veremos qué podemos llevar para el camino- anunció Ohm al grupo mirando a través de la mira de su arma.

Inmediatamente, caminaron hasta llegar a las puertas de aquel campamento donde decía con letras grandes pintadas con aerosol:

"El fin del mundo, nuestra libertad"

Había unos guardias en la cima de las vallas, haciendo vigilancia con escopetas y metralletas.

- bienvenidos a todos, este es mercado del fin del mundo. La entrada a este lugar cuesta tres balas por persona, calibre 45.- gritó desde arriba.

En las puertas, había una señorita en bikini con una metralleta en su mano, y tenía una cajita de metal, dónde se suponía, debían dejar las balas a cambio de entrar al mercado.

-estos idiotas...- susurró Off a su pequeño amigo a su lado.

-¿te quedan balas? Yo no tengo ni una sola..

- olvídate de eso, yo las daré por tí.

Todos dejaron tres balas por persona y, las grandes puertas se abrieron, dejando ver...un paraíso de libertad.

Ohm, junto a fluke, entraron tomados de las manos. Y aquello, era una unión de sus almas, no solo de su cuerpo terrenal. Significaba que iban a enfrentarse al mundo juntos.

Seguir adelante, si sus manos están unidas.